LAURA
-Espera- escucho como me pide Jake, pero no le hago caso.
Estoy a punto de entrar cuando me agarra y me mete en una caseta de al lado, parece ser el cobertizo.
-¿Qué quieres?- pregunto enfadada.
-No has dejado que me explique- contesta.
-Esta vez no quiero escucharlo- respondo enfadada porque sé que me lo volveré a creer.
Ando hacía la puerta, pero Jake se pone en medio.
-Pero yo sí- dice firme y suelto un suspiro para después alejarme lo máximo posible de él.
-Venga, dime. ¿Por qué es distinto?- contesto en un tono duro mientras me siento en un caja.
-Para empezar no he querido decir que yo siga siendo un mujeriego- empieza explicando y yo bajo mi mirada. La verdad es que me he alterado muy rápido- Y lo segundo. He dicho eso porque yo sé los sentimientos que tengo, pero no sé las intenciones de Sergi con Lu- termina y noto como su mano levanta mi barbilla. No sé en qué momento ha venido hasta mí y se ha puesto de cuclillas- Yo sé que es lo que quiero contigo- dice y me pierdo en sus preciosos ojos grises que me hipnotizan.
-¿Y qué es lo que quieres?- pregunto embobada.
-Venga princesa ya lo sabes- responde.
-De verdad que no sé qué es lo que quieres- informo.
-Quiero que seas solo mía- asegura y me besa.
Nos levantamos poco a poco mientras nos besamos y Jake me levanta haciendo que mis piernas se enreden a su cintura mientras mis manos recorren su torso jugando con los botones de su camisa.
-Si no paramos no me podré controlar- anuncia después de soltar un gruñido.
-Vamos a mi casa- digo rozando sus labios con los míos.
Salimos del cobertizo y vamos directamente a por su moto sin despedirnos de nadie. Llegamos y me dice si quiero conducir yo y se lo agradezco.
Llegamos a mi casa y aparco en el garaje. Bajamos y dejamos los cascos en el suelo.
Jake no tarda ni un segundo en cogerme y subir hacía mi cuarto sin dejar de besarme. Por el camino me quita su chaqueta y yo le quito la camisa cuando entramos en mi cuarto.
Me deja de pie, en el centro de mi habitación, dándole la espalda para bajarme la cremallera. Cuando lo hace mi vestido cae al suelo y deja ver mi lencería roja de encaje. Gruñe y me gira para devorarme la boca con deseo y ansias. Me deja sobre la cama y me quita las sandalias mirándome atentamente. Cuando acaba me acerco a él y le miro a los ojos mientras desabrocho el botón de su pantalón para bajárselo dejándome ver la gran erección que marca sus bóxers.
Una vez los dos en ropa interior se recuesta sobre mí mientras me besa. Deja mis labios y va bajando hasta llegar al borde del sujetador. Me lo quita en un movimiento rápido dejando mis pequeños pechos al descubierto. Se me queda mirando y empiezo a sentir vergüenza. Me tapo con mis brazos pero él me lo impide.
-Perfecta- susurra para volver a besarme haciendo que toda la vergüenza se me vaya.
Baja y empieza a darle atención a mis pechos provocándome gemidos. Cuando le ha dado toda la atención que necesitaban, se separa de él pellizcando mi pezón y ataca el otro. Sigue bajando mientras traza una línea de besos por mi abdomen hasta que llega al principio de mi tanga. Lo baja mirándome con esos ojos grises que se han vuelto muy oscuros. Una vez desnuda baja su mano a mi entre pierna.
-Joder, estás ya lista- dice con una voz ronca a la vez que mete un dedo en mi interior haciéndome gemir.
Empieza a meter y sacar su dedo hasta que mete dos. Repite el mismo movimiento mientras le da atención a mi clítoris haciéndome sentir una explosión de sentimientos por dentro. Estoy a punto de venirme y cierro los ojos por el placer.
-Mírame- me ordena y yo abro los ojos con dificultad
Una corriente recorre todas las partes de mi cuerpo haciéndome chillar, pero me calla con un apasionado beso. Saca los dedos de mi interior una vez dejo de convulsionar y se los lleva a la boca para chuparlos bajo mi atenta mirada.
-Deliciosa- susurra para volver a besarme.
Mis manos viajan hasta la goma de su bóxer y se lo quito con su ayuda. Noto como su erección roza con mi parte intima haciendo jadear.
-Te necesito dentro- suplico.
Jake se levanta, saca de su pantalón un condón, se lo pone y vuelve a subirse encima de mí. Se posiciona y se adentra poco a poco.
La verdad es que es muy grande, y yo hace mucho que no lo hago. Así que me está doliendo un poco, pero lo necesitaba ya.
-Estás muy estrecha princesa- dice con la voz ronca mientras se queda quieto para que me acostumbre.
Unos segundos después empiezo a moverme indicándole que ya estoy lista. Empieza a moverse lento y yo enredo mis piernas a su cintura para que se hunda más en mí.
-Más… rápido- le pido entre jadeos.
Empieza a acelerar sus embestidas y lo único que se escucha en la habitación son nuestros gemidos y el choque de nuestros cuerpos. Después de unas cuantas estocadas llego al clímax arrastrando a Jake conmigo. Se deja caer encima de mí sin dejar de abrazarme hasta quedarnos dormidos.
JAKE
Me despierto al sentir besos por toda mi cara, pero no reacciono hasta que siento como esos carnosos labios llegan a mi boca. Pongo mi mano en su cara, pero ella sonríe en mis labios.
-Buenos días imbécil- dice.
-Buenos días princesa- contesto con una gran sonrisa en mi boca- ¿Qué hora es?
-La 13:30- responde- Duermes mucho.
-Alguien me canso ayer- comento divertido
-¿Ah sí?- contesta- ¿Quién?- pregunta haciéndose a loca.
-No sé si la conocerás, pero es una chica muy sexy con unos hermosos ojos azules, un pelo rubio precioso, tiene unos labios carnosos…- empiezo a describirla- Pero es muy bajita.
-Oye- se queja y le suenan las tripas- Vamos a comer algo porfa- pide y baja de la cama.
Me quedo mirándola al darme cuenta que solo lleva mi camisa. Enserio que me encanta como le queda mi ropa. Se da la vuelta y ve que la estoy mirando.