La reina cuervo (libro 1)

Una carrera con la muerte.

 

La intervención de Aris había sido impactante para Elizabeth y Mikea, haberle visto ponerle un alto a Jane, fue muy gratificante para ellas, al final terminaron invitándolo a la noche de películas ¿habrá sido una buena idea?

—¿Películas de terror? ¿Enserio?—le preguntó Mikea en forma de burla.

—La comedia romántica se me hace algo aburrida jeje.—le respondió ella con una sonrisa.

Aris caminaba de prisa para encontrarse con su padre y estaba aliviado de que aquel encuentro no hubiera pasado a mayores.

—Ay, menos mal que no quisieron ver el regalo…—expresó Aris soltando un suspiro y añadió.—espero le guste a Elizabeth.

Un poco más tarde, Elizabeth y Mikea se encontraban comiendo comida tailandesa.

—Oye… te cae muy bien Aris jeje.—le dijo Elizabeth mientras se llevaba un bocado a la boca.

—Cleo que me cae bien, es un chico muy lindo, además de que es muy guapo.—le respondió Mikea risueña.

—Tiene dieciséis.

—Si, eso me dijo el otro día, pero no te preocupes, dejaré que crezca un poco más.

—¿Que? —Elizabeth abrió los ojos de golpe y esto le causó mucha gracia a jmikea.

—Jajajaja, solo estoy bromeando jaja.

—Eres predecible, oye, eh… Jane y Sam fueron…

—¿Novios?

—Si.

—¡Claro que no! Eso quisiera ella, no le hemos conocido ninguna chica, pero considerando lo discreto que es, debe tener alguna por ahí, una de mucho dentro igual que él.

—Supongo que si.—exclamó Elizabeth con tristeza.

—Aunque…tu le caes muy bien.—le dijo Mikea mientras le daba un ligero golpe con el codo.

—Tu también, todo el mundo le cae bien.

—Tienes razón, se pasa de amable.

—Cambiando de tema ¿quieres un helado?

—Yo invito, tu pagaste la comida.

—Bueno.—le dijo Elizabeth desanimada.

—¡Animo! Que esa loca no nos amargue el día, se que te hizo enojar muchísimo, así también me sacó de quicio.

—Si, casi le saco los ojos jaja.

Por otro lado, en unas carreras clandestinas de motocicletas llamadas “Hombre muerto”

—Oye amigo ¿seguro que quieres participar en la carrera?—le preguntó un tipo llamado Rea quien era algo así como un amigo o compañero de tragos.

—Si ¿por que?—le respondió Ansel mientras tiraba la colilla de su cigarro y lo apagaba con el pie.

—Por que se ve muy ilegal, hay puro mal viviente aquí.—le dijo Ren mirando desconfiado.

—Mmm, yo lo veo bien.

—Se espira la muerte , todos aquí parecen ex convictos.

—Se ven de confianza tranquilo.

Ya era tarde para arrepentirse, Ansel ya se encontraba subido en su motocicleta, el presentador agarró su megáfono y anunció que la competencia estaba por empezar.

—¿Están listos para perder la vida en esta competencia? Si les va bien solo perderán un brazo o una pierna… ¡Así que si quieren abandonar la carrera he ir a llorar con sus mamis es momento de hacerlo! El recorrido empieza en 3, 2, 1 ¡Fuera!

—¡Llegó el momento de la diversión! —exclamó Ansel emocionado y arrancó a toda velocidad y todos los participantes avanzaron con él.

—¡Vas a perder princesa!—le dijo uno de los participantes que iban de su lado.

—Las ballenas deberían estar en el océano y no en la pista.—le respondió él sonriendo.

—¡Idiota!

Ansel aceleró arrebañándolo considerablemente.

—¡Ese dinero será mío!—dijo otro d Elos participante mientras taraba de cerrársele para sacarlo de la pista.

—¿Y este de donde salió?—se preguntó Ansel desconcertado.

—¡Déjenme llegar a la meta mariquitas!—gritó otro motociclista.

—No de broma los dejaré quedarse con mi dinero.

De pronto, uno de los participantes perdió el equilibrio y se volteó causando varios accidentes.

—¡El próximo serás tu princesa!

—¿Otra vez tu? Creí que ya te habías largado.—le respondió Ansel fastidiado.

—¡Juju! ¡Ustedes sigan declarándose su amor! ¡Los veo en la meta! Jajaja.—les dijo otro participante mientras los rebasaba.

—¡Yo creo que no! ¡Sayonara princesa!—grito su rival mientras se reía de él.

—¡Este jabalí ya me esta cansando!—exclamó Ansel mientras aceleraba más.

Mientras esto pasaba, otra motocicleta exploto causando un gran estruendo.

—Diablos, esto se puso feo.—dijo uno de los participantes que se acercaba a la meta.

—¡Nuestra carrera de la muerte esta apunto de terminar y solo quedan cuatro participantes ¿Quien ganará? —exclamó el presentador con emoción.

Dos de los cuatro participantes terminaron volcándose porque se acercaron mucho el uno al otro dejando a Ansel con su Nemesis.

—¡Solo quedamos tu y yo princesa! No pienso dejarte ganar.

—¿A si? No estoy tan seguro de eso.—le dijo Ansel al ver que su contrincante se dirigía a una zanja.

—¡Noooo! ¡Maldición!

—¡Adios jabalí! Jajajaja.

—¡Tenemos un ganador!

Ansel derrapó un poco, pero llegó hasta donde estaba Ren y lo dejó sorprendido.

—¿Como es que estás vivo?—le preguntó impactado.

—Te dije que el lugar era seguro.

—No puedo creer que ganaras jaja.

—Deberías participar la próxima vez, es terapéutico.—le dijo Ansel con el corazón acelerado.

—Jajajaja, ni loco, por cierto, esas dos chicas no han dejado de mirarnos ¿por que no celebramos con ellas tu victoria?

—No puedo ser tan grosero.—exclamó con una sonrisa picara.

Después de recibir el dinero, Ansel y Ren se fueron a beber a un bar acompañados de las dos chicas que conocieron en la competencia.

Ansel estaba muy pensativo, mantenía su mirada fija en su trago.

—Me pregunto que sería de ese cuervo entrometido…

—¿En que tanto estas pensando?—le preguntó Ren con curiosidad.

—En nada importante.

—Oigan señoritas ¿quieren otro trago?—les preguntó Ren y ellas respondieron que sí felices.



#6361 en Otros
#1118 en Acción

En el texto hay: romance, accion, heroes vs anti heroes

Editado: 02.08.2024

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.