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Allison.

Me encontraba con Chloé en Artyogurt's. La abuela estaba un pocoh enojada por esperar tanto, le expliqué que la última clase se alargó más de lo esperado. 

Mentí, llegamos tarde porque estaba hablando con Chloé respecto a unas teorías, la verdad es que... Chloé también ha estado guardando cosas durante mucho tiempo, su pobre corazón ha estado preso de aquellos sentimientos... Era tan triste.

Me sentía tan culpable.

—Bien abuela, cuéntanos.

—Aguarda querida Chloé, es algo super confidencial, esperemos que Arty nos traiga nuestra orden y lo hablamos. Uno no planea fiestas todos los días...

Y así fue, justo en el momento que el anciano nos entrego el yogurt helado, Chloé y yo miramos a mi abuela con intriga.

—Será algo pequeño... Solo los Alfas, una noche de hombres o con las parejas de las manadas...

—Con todo respeto abuela...—interrumpí—Si invitamos solo a las parejas papá se sentirá peor, creo que lo mejor es algo familiar, las familias de los Alfas, así podemos estar todos apoyando a mi padre, incluso podemos invitar a la Sra Olsen, sin su ayuda no hubiéramos encontrado el aquelarre que evitó la muerte de papá. —Dije lo ultimo casi en un susurro.

Se dice que cuando un licántropo pierde a su pareja el dolor es tan grande que puede ocasionar la muerte. Días después del funeral, mi familia tuvo que buscar ayuda de un aquelarre a las afueras de Eastwood para evitar que eso pasara con mi padre. Sin embargo ellas dijeron que todo lo que podían hacer era romper el lazo y que solo se evitaría la muerte si mi padre superaba la depresión. Algo casi imposible.

—Me parece correcto abuela, además puede ser ropa no tan formal, algo elegante pero cómodo, algo no tan aburrido y serio, solo para pasar el rato, algo cálido.

—Me encantan sus ideas, puede ser en el lago de la mansión, hace falta otro recuerdo ahí, ya no se atreve ni a mirarlo.

No me pareció muy correcto, pero rechazar otra idea suya me hacia sentir mal.

—Sí, con bastante comida. Poco alcohol, ya que es algo familiar y muchas historias familiares. Recordar vagamente es soltar poco a poco. Lo he estado aplicando...

—No sé diga más. Cuando tenga listas las invitaciones, les avisaré.

—No, abuela...—Sonreí— es algo casual, tú llamas al Alpha de cualquier manada, le preguntas qué planes tiene para ese día y listo. Las invitaciones ponen sería la cosa. Claro, sin perder el respeto.

—Oh, perfecto. Ustedes son las expertas. Haré todas las llamadas necesarias ésta semana.

—Tal vez, alguno de esos alfas estén aquí para los entrenamientos. La fiesta puede aprovecharse para darles la bienvenida —Me encogí de hombros.

Ese día fuimos a casa, Chloé estaba un poco triste por lo de Josh, así que se quedó conmigo. 

Al parecer varios necesitamos esa reunión.

Mi padre me contó sobre los avances de la investigación. De nuevo... Nada. 

No pude conciliar el sueño hasta que se hizo muy tarde, no hice nada más que llorar.

—Despierta ya—Escuchaba a lo lejos, mientras que seguía soñando que Tom Holland se casaba conmigo. —Se va a hacer tarde, por favor Allie.

Y un líquido frío me trajo a la realidad. 

«Justo cuando iba a decir "si"»

Miré a mi prima con mi peor cara y ésta solo sonrió.

—Si no te bañas rápido no llegaremos al taller. —Luego de fregar mis ojos volví a mirarla y sí, ella ya estaba lista, lista e impecable.

Me levanté frustrada a asearme. «Al menos me hubiera dejado dar el sí»

Me cambié la ropa luego de salir del baño, hacía mucho frío y hoy no iba a ducharme. 

Lo siento mundo, pero no moriré de hipotermia por tu culpa. 

No me esforcé mucho en mi vestimenta, un jersey color tinto, Jeans oscuros y zapatillas. Por otro lado mi cabello largo, ondulado y castaño claro iba en un moño desordenado, a diferencia del de Chloé que iba en una coleta. La vestimenta de Chloé era similar a la mía, solo que no usaba un jersey, sino una chaqueta a punto y una polera de tirantes, sí, nuestra familia tiene muchos atributos que Chloé se empeña en aprovechar.

Pero no habrá días para darle el sí a Tom...

¿No les ha pasado? Ese momento en el que tienen un buen sueño, acaban perdiéndolo y nunca más vuelven a tenerlo ¿No? ¿Solo a mi?

—Deja de pensar en tu sueño, toma la mochila y vámonos...  

En el camino nos encontramos a Bárbara, últimamente hemos hablado mucho puesto que nuestra manada tiene un evento encima y mi padre está indispuesto para organizarlo. 

Sin intentar retrasarnos más y tras ganarse unas miradas asesinas de Chloé, nos dejó ir.

Hice lo que Chloé me había dicho antes y salí de la habitación, bajé las escaleras hasta la planta baja y odie que mi hogar fuera tan grande, en serio, no encontraba las llaves de la motocicleta, hasta que la vi en el garaje.

—¿Vas a manejar eso...?—Negué. La verdad es que, luego de lo de mamá no he vuelto a usarla, era con ella y sin ella no tiene sentido. —¿Entonces? Nos haces perder tiempo...

—Necesito comprobar si aún funciona—informé encendiéndola y Chloé hizo una mueca por el sonido, un satisfactorio sonido...

—¿Por qué?—se cruzó de brazos—¿Piensas venderla?—Asentí—Te lo prohíbo.

—Solo ocupa espacio, se dañará debido al polvo y luego me dolerá más.—Dije con tristeza.

—Solo vámonos, no pienso discutir eso en este momento.