Prólogo: El final

Otro día totalmente igual a los otros para Alan, otro día repetitivo y aburrido. En el que no hacía nada más que levantarse e ir a trabajar, en un lugar en el que laboralmente lo sobre explotaban.

Ese día tuvo algo diferente, algo, que para Alan era el verdadero terror, ser despedido y tal ves el terror de muchos trabajadores. Pero ¿porque razón iba a ser despedido si todos los días hacia lo que su jefe pedía?, todos los días, los 2.190 días, los seis años que trabajo en esa empresa. Bueno hay te va la respuesta "recorte de personal" eso hizo que despidieran a Alan. 

¿Y ahora que iba a hacer un tipo sin vida social, sin familia cercana en la cuidad, sin amigos, sin trabajo y con un apartamento promedio en los suburbios? Pues beber, lo único que necesitaba y quería hacer era beber, para olvidar las penas. Esa misma noche bebió como no había bebido en 23 años de vida, bebío hasta que parecía drogado, bebió hasta que el dueño lo tubo que sacar a escobasos mientras lo maldecía diciendo 

-dios que tipo tan insoportable, me apiadó del alma que tendrá que soportarte-. 

Bueno, ahora que se quedó sin trabajo veamos que estupidez va hacer nuestro estupido protagonista. 

Luego de que lo sacar a escobasos vagó por la cuidad un buen rato, como no lo atropelladon o robaron en ese lapso de tiempo solo Dios lo sabe. Quizás fue el destino o solo suerte, esa que le falto para que no lo despidieran. 

Que le depara el futuro a Alan ahora, quizás el perder su trabajo lo ayude a conocer gente, encontrar amistades y quien sabe hasta una pareja, quizás esta todo apunto de cambiar.

Pues no, fue muy pronto para cantar victoria por Alan. 

Al parecer nuestro protagonista no tubo tanta suerte pues al faltar tres cuadras para llegar a su casa, atropellaron a Alan, bueno hasta aquí llegó la corta y aburrida vida de Alan, quien murió atropellado por un camión. En serio, quien hizo este guión, super cliché. Bueno quizás que le espera a Alan en el más allá o quizás ni siquiera valla al más allá, quien sabe, espera, ¡yo lo sé!. Pero no lo diré.