Parte 5

-Hola! -digo sin obtener respuestas. -quién eres? -vuelvo a hablar.

Pero en vez de ella responder, mueve sus manos muy rápido y me lanza una bola de fuego que esquivo por poco, de inmediato comprendo que ella no tiene buenas intenciones así que me preparo para hacer uso de mis habilidades.

Levanto la tierra y le lanzo dagas que esquiva estratégicamente, ella sabe lo que hace, y también lo que quiere y al parecer acabo de descubrir lo que quiere, presiento que será mi funeral muy rápido.

No quiero que se entere que soy la madre elemento así que la ataco con solo un poder, ahora le lanzo una roca enorme que había cerca y ella lo destruye impactando con otra roca.

Ella trata de rodearme y escondiéndose detrás de los arboles y yo estoy algo expuesta, siento como algo me impacta por detrás me dio con una roca la perra mal nacida y donde diablos esta Nathaniel.

Cuando me volteo la tengo de frente y ya sin capucha, ella es una chica rubia de ojos grandes, la verdad no me fijo en mas porque estoy muy enojada, solo sé que cuando la miro fijamente ella pone cara asustada y entreabre los labios, cuando trato de reflejarme en sus ojos cierro los míos de golpe.

Mi iris esta de cuatro tonos, cuando veo la chica de nuevo ella está de rodillas.

-Madre, me disculpo por mi insolencia, pensé que era una de los Trusha

-Me ibas a matar estúpida y quienes son esos Trasha o como se llame? -pregunto aun enojada.

-Son el clan que invadió el reino cuando usted desapareció.

-Bueno y tu como te llamas?

-Dalia madre, mi nombre es dalia portadora del elemento de la tierra.

-Si me di cuenta, y no me llames madre que aún no tengo hijos, llámame, Kate.

-De acuerdo Kate, y ¿porque está sola en el bosque?

-De hecho, no estoy sola, ando con mi maldito mentor que después de besarlo salió corriendo al parecer.

-Es ese chico que viene corriendo? -pregunta y me giro, y efectivamente hay viene Nathaniel.

-Kate discúlpame, no es que no te quiera besar si quiero, es solo que siento que no era el momento, pero te lo voy a demostrar.

De pronto me sujeta de la nuca y me besa es un beso lento que deja mucho que desear, cuando logro seguirle el beso alguien se aclara la garganta a mi espalada y hay es que me acuerdo de dalia, me alejo de Nathe respirando entrecortadamente y me le quedo viendo.

-Eh hola, sigo aquí.

-Oh si, nathe ella es dalia, nos acabamos de conocer, ella me quería asesinar.

-Como que te quería matar y ¿porque estas viva entonces? -que estúpido es este hombre.

-Porque vio mis ojos. -le digo de lo más normal

-No entiendo.

-Que ella me golpeo y vio mis ojos, mira te muestro.

Cierro los ojos y cuando los abro veo la sorpresa en los suyos debe ser hermoso, el me pasa el dedo índice por la mejilla y yo medio sonrío.

-Te ves muy hermosa, y eso significa que ya has desarrollado todos tus poderes, fue más rápido de lo que pensé.

-Bueno nos vamos? -Pregunto y nos giramos hacia dalia -Tu vienes con nosotros.

Ella solo asiente dos veces y cuando me volteo nathe no está seguro ya se fue el idiota ese.

Entonces también me teletransporto y espero a que llegue Dalia, cosa que no pasara porque ella no sabe dónde vivo, vuelvo al bosque y ella está esperando con los brazos cruzados.

-Lo siento -le digo y le sujeto la mano, al cabo de segundos ya estamos en mi casa.

-Oh yo vivo cerca de aquí -me dice en cuanto entramos a la casa.

-Y como es que no te había visto antes?

-Me acabo de mudar.

-De acuerdo supongo que tendré una nueva amiga que me quería asesinar.

Nos reímos y entramos juntas, nos sentamos en la mesa y ella nos cuenta como llego hasta aquí.

Sucede que ella se mudó porque están invadiendo de apoco la ciudad rubí así se llama mi pueblo natal, y ella salió de ahí para que no le hagan daño, porque están matando a ciegas a todo el mundo tengo que ir rápido hasta allá.

-Si ya desarrollaste todos tus poderes entonces ya tienes tu entrenamiento.

-Cual entrenamiento? -pregunto sin saber de qué habla.

-Antes entrenabas mucho, eras la mejor en cuerpo a cuerpo y utilizando todo tipo de armas, y como tus poderes volvieron seguro eso también ha vuelto.

-Entiendo, chicos, ¿no quieren ir de fiesta hoy? -pregunto, nathe y yo nos miramos cómplice

-Claro, como negarme ante mi reina. -dice nathe

Miro a dalia esperando, y se ve algo indecisa.

-Me gustaría ir pero tengo que ir de compras cuando vine no me traje nada conmigo.

-tranquila chica, vamos a mi cuarto para que te des un baño y ya luego hablamos.

-Que cuando bajemos estes listo ¿ok? -digo refiriéndome a nathe.

Guio a dalia a mi cuarto y cuando llegamos le doy una toalla y la entro al baño, mientras yo voy al del pasillo, veinte minutos después salgo del baño y la encuentro sentada en la cama.

-Bueno reina vamos a trabajar, ¿cuál es tu estilo? -pregunto

-El que quieras, me adapto rápido.

-Pues seremos las perras de la fiesta, ponte de pie querida, y frente al espejo de cuerpo entero.

Ella hace lo que digo y mientras camina muevo mis manos y ya tiene el estilo de hoy.

-Wao como hiciste eso, ah se me olvidaba con quien trato. -se ríe y me lo agradece.

Le puse una falta corta roja ajustada a su cuerpo, un top negro, el pelo rubio este suelto en ondas, le llega hasta la cintura, y tienes unos tacones negros muy lindos.

-Me puede poner unas botas mejor? Es que no me siento cómoda con tacones. -me dice apenada

-De acuerdo princesa. -le pongo unas botas les llega hasta las rodillas tiene agujetas y tacón también son negras mate.

-Estas me encantan, muchas gracias.

Le respondo que no hay problema y me visto yo, mi ropa consiste en unos shorts negros con medias pantis del mismo color, un top negro por igual y unas botas igual que Dalia solo que las mías no son tan altas.