Capítulo 2

—La siguiente, por favor—dijo el guardia con voz cansada—. De una en una.

Estamos en la cola para hacernos la prueba de magia. Después de encontrarnos un montón de impedimentos "de protocolo" con los que al final terminamos visitando todo el departamento hasta que encontramos nuestra sección, habíamos llegado a la inmensa cola. La cual, estaba llena de chicas monísimas, pero todas iguales a causa del maquillaje.

Dos horas y media después, ya nos toca pasar. Laura ya ha entrado y hace bromas con que, como la prueba consiste en un análisis de sangre y le gusta mucho quejarse, se había desangrado viva.

Yo soy la siguiente y cuando escucho la voz del guardia pidiendo que pase, entro. El interior es simplemente una enfermería con una mesa y varias sillas en las que están siendo atendidas otras chicas. Me piden que me siente en una y que extienda el brazo para sacarme sangre. Al principio estoy muy nerviosa porque es la primera vez que me saco sangre, pero la enfermera me calma.

Me hacen una foto tamaño carnet y la pegan el el formulario. En este momento lamento haber dejado que mi padre me cortara el pelo, cuando precisamente no tenía fama de buen peluquero.

Me esperan fuera y nos vamos, porque era la última ya que se habían colado todas.

En el camino a casa, Laura no para de hablar sobre lo genial que sería que una de las seleccionadas fuera de Casteja. Dice que sería el pueblo más famoso del mundo y que turistas de todo el mundo querrían visitarlo. Yo lo veo muy poco probable, nadie sabe que existimos. ¡Ni siquiera salimos en el mapa!

Cuando llegamos al pueblo, le ofrezco a Laura que se quede en mi casa para estudiar, pero ella me dice que tiene que ayudar a sus padres con su trabajo.

La familia de Laura se dedica a hacer ungüentos y medicinas con plantas medicinales. Son como los farmacéuticos del pueblo y son los que más saben de eso. Y Laura está destinada a ese trabajo, a ella le da igual, es la mejor en eso, pero a mi no me gustaría ser pescatera como mis padres, ni pescar ni limpiar pescado es lo mío. Pero es a lo que estoy destinada, y en parte sé que es por eso por lo que me he propuesto para la selección. Bueno, por eso, y por la parte de las pruebas de magia gratis. La palabra gratis siempre es buena a la hora de tomar una decisión.

La tarde se me pasa volando. Cuando me doy cuenta, ya es la hora del Report. Voy corriendo a la plaza cuando me doy cuenta de que si no no llego.

Allí ya están todos, y el presentador está dando las noticias. Laura da golpecitos al suelo para que me siente a su lado. Le saludo y todos me chistan para que me calle. Miro a la pantalla.

—Y ahora, con motivo del evento que va a ocurrir en Magnia, vamos a entrevistar a los reyes, ¡Antoine y Amanda!—exclama mientras se escuchan aplausos en la sala y entran. Tienen unos 50 años, Amanda tiene el pelo castaño, ojos igual y una cara redondeada, su marido lleva una canosa barba, y el pelo castaño corto. Los dos van vestidos de gala, a juego.

—Antes de nada, me gustaría que me dijérais cómo se os ha ocurrido esto de la selección—dice cuando ya se han sentado en un sofá alargado con forma de L. Se nota que tienen mucha confianza, no me extrañaría que fueran amigos.

—Bueno, en realidad, ha sido una idea de nuestro hijo, Luca, y, junto con la aprobación de Oliver, nos lo han propuesto a nosotros—toma la palabra el rey.

—¿Y en qué consiste esa selección?

—Se trata de un concurso, elegiremos a una chica de cada provincia por lo que al final habrá 52 chicas de entre 16 y 20 años compitiendo por el corazón de Oliver—esta vez habla Amanda, se ve emocionada—. Las menores con el permiso de sus padres, claro. Cada martes, eliminaremos a una de las chicas, las únicas ocasiones en la que se podrá eliminar a más son en las dos primeras semanas para que el concurso no se haga tan largo, y en el caso en el que alguna incumpla las normas. Habrá un canal 24 horas en el que gente de todo el mundo podrá seguir a nuestras concursantes de cerca. Además por cada semana de concurso se les dará una compensación a las familias, y no hace falta decir que su estadía es gratis—básicamente como un reality show. A la gente le encantan los reality shows.

—Sí, el concurso comenzará el 1 de septiembre, después del verano, pero los resultados se darán la semana que viene, para dar tiempo a las chicas para que se preparen—prosigue Antoine.

—¿Y qué harán las seleccionadas durante su estadía en el castillo?

—Bueno, recibirán clases de magia las que no sepan utilizarla, así como historia de la magia, y la información necesaria para alguien que desconocía que era maga.

—Ese es otro punto, se descubrirán muchas magas entre la gente que no podía permitirse pagar las pruebas. ¿Cómo se darán los resultados si resulta que tienes magia pero no eres seleccionada?

—Los resultados se mandarán por carta a cada una de las familias, pero no las recibirán hasta la semana que viene, para que la sorpresa sea mayor si salen seleccionadas.

—¡Qué emocionante! ¿Y qué piensa el príncipe Oliver de todo esto?

—Bueno, antes de decírnoslo a nosotros su hermano y él lo estuvieron hablando y añadieron la condición de si no encuentra el amor allí, terminar el concurso sin casarse con nadie de allí. Sin embargo, mi marido y yo albergamos la esperanza de que entre esas 52 chicas, alguna sea la correcta.