19 . Hekajn

La habitación  es bonita, y muy grande, nada  comparada con la mía, es de color gris, muy sofisticado 
La cama es muy grande, tiene mantas de color blanco y muebles de madera, mis dos maletas están sobre la cama, no desempaco nada, en una semana partimos a la academia en donde me enseñarán a controlar mejor mis dones

Lo primero único que único que tomo de mis maletas es el vestido que Brayden me dio, es bonito supongo que quedará bien para la cena, es de color rojo vino bastante obscuro, tiene decoraciones doradas, también saco un abrigo , me pongo el vestido y me enfundó en el abrigo, no estoy para nada acostumbrada a este nivel de frío, será muy difícil, mañana iré a visitar en donde enterraron a mi madre y después iré a comprar más abrigos
Escucho que tocan la puerta , que raro, no ha pasado tanto tiempo, tal vez se adelantó la cena, me levanto y abro la puerta

—Medea— es Ronan, me sonríe

—Ronan— saludo y lo dejo entrar

—Bonito vestido  

—Gracias — me siento en la cama— ¿Que sucede?

—Debemos poner guardias frente a su habitación— vaya, que bien

— ¿Porque?

—Según varias personas, cuando llegamos estaban presentes varios integrantes de distintos aquelarres, en especial uno de los que más nos preocupa

—Déjeme adivinar, es parte del aquelarre De’Ath

—Así es, no pueden atacarla ahora, porque primero deben estudiarla para  ver que tan fuerte es, y porque estamos en el castillo, si atacan el rey puede responder de la misma forma

—Entonces en un gran alivio que este aquí con el rey

—Supongo, tendrá a los guardias hasta que estemos en la puerta de la academia

— Entonces ellos me seguirán para todos lados, no podre estar sola, a eso se refiere

—Sí, sé que no es la idea más tentadora  pero al menos así tendrán menos posibilidades para lastimarla

—Está bien— digo sin muchas ganas, sabía  que venir aquí sería difícil pero creo que al menos tendría un día para poder acostumbrarme a esto

—Son ellos— dos hombres entran a la habitación, son altos y corpulentos— Ellos serán algo  así como tu sombra, te hablarán solo si tú lo deseas, puedes ignorarlos— hace una señal con la mano y los hombres salen de la  habitación— Solo será por unos días

—Lo sé— me levanto de la cama — Esto va a ser difícil, ¿Que se supone que haga una vez que salga de la academia? ¿Que se espera que sea?, digo todos me dicen que wow soy una Medevane, pero no sé qué se supone que hace una, ¿debo maldecir a diestro y siniestro? ¿Ser una buena persona con todos, todo el tiempo?

—Eso será decisión suya, usted puede elegir qué hacer cuando salga de la academia, si buscar a las que acabaron con su familia, crear de nuevo el aquelarre Medevane, unirse a otro

—Primero que nada, creo que casi todos sabemos quiénes fueron— el me mira— Brent me dijo que a los De’Ath les convenía sacar del mapa a las Medevane, por ello supongo que ahora son el aquelarre más fuerte, lo cual no es bueno porque a lo que yo sé sobre ellos, son despiadados y malvados, y segundo, que tal si solo deseo regresar a mi hogar con mi familia, y se lo que dirá, ellos no son tu verdadera familia, y perteneces al mundo mágico, pero solo póngase en mi lugar, crecí en el mundo normal, sin magia, sin aquelarre, feliz y segura y no puede decirme que ellos no son mi familia 
Porque son lo único  que conozco completamente en todo esto, a pesar de no compartir sangre ellos me aceptaron y nunca me trataron  diferente por ello

—Lo sé Medea— se recarga en la pared— Sé que ellos la adoran con todo su ser, con solo ver la despedida que se dieron fue suficiente, además su padre le dejo claro a Declan que usted es muy importante para él y esperaba que la cuidara — eso no lo sabía— Pero creo que una vez que lleguemos a la academia todo cambiará para usted, sé que lo único  que conoce de la magia justo ahora son cosas malas pero le aseguro que no es así, la magia  tiene dos caras y solo los que la poseen pueden elegir como emplearla — woa que profundo

—Bueno, si sigue así me darán muchas ganas de convivir con las personas que me quieren muerta— él se ríe

—Le recomiendo que no lo haga— se dirige a la puerta— la dejaré descansar

—Claro, gracias por preocuparse por mi seguridad— el asiente con la cabeza y sale de la habitación, yo me tiro en la cama, y me quedo viendo al techo, el tiempo se va volando, alguien toca la puerta, me levanto y la abro

—Hola— Es Declan, sonríe— Te ves muy bien en ese vestido

—Gracias— sonrió

—Es hora de cenar, vamos — me asomó detrás de él y veo a Brent, me sonríe, yo le correspondo la sonrisa

—Vamos— Declan me ofrece su brazo, yo lo acepto y dejo que me guíe hasta donde será la cena, llegamos a una habitación, grande, como todo aquí, tiene una mesa grande con muchas sillas, la mesa está repleta de comida

—Medea — el  rey se pone en pie— Bienvenida, te ves espléndida

—Gracias— Debo admitir que me siento  un poco mal por haberle hablado de un modo grosero al rey, pero si lo pienso más a fondo me doy cuenta de que el verdadero culpable es el

—Ahora si podremos hablar, cuéntame sobre ti — él se sienta hasta que yo lo hago

—Bueno, en realidad no hay mucho que decir, una típica vida en la granja, padres amorosos, hermanos protectores, y poco más

— ¿Cómo descubriste  los dones? — pasamos la cena hablando, Brent habla pocas veces, no lo veo muy animado pero yo estaría igual si fuera el 
Respondo todas las preguntas del rey

—Bueno mi señor, fue un placer haber tenido esta conversación con usted, pero me temo que estoy un poco cansada así que me gustaría retirarme a mi habitación si no le molesta— digo una vez que terminamos de cenar

—Oh claro, si necesita cualquier cosa hágaselo saber a los guardias ellos le darán lo que pida— se levanta y me da un beso en la mano — Buenas noches