45. No

En menos de lo que canta un gallo todo ha estallado, nuestros oponentes han avanzado, Wolfgang no tarda casi nada en ponerse de pie, mis compañeros y amigos tampoco tardan en responder,  nos lanzamos contra el bando contrario, desde que comienza se pierden vidas de ambos bandos, noto que las personas que me apoyan dudan bastante al ver a los niños que acompañan al ejercito de Wolfgang, como dije son solo niños pero solo tienen una misión en esa pequeña mente la cual es acabar con nosotros

— ¡ES ELPRINCIPE! —Gritan barias personas al percatarse del príncipe de Welham peleando de nuestro lado

—El comandante Wolfgang nos mintió, dijo que estaba muerto— Como pensábamos muchos comienzan a voltearse contra Wolfgang atacan y luchan por llegar a donde nuestro equipo, algunos no lo logran ya que los asesinan, de repente siento un ardor en uno de mis costados, me han dado, no tardo en responder, mando lejos a la persona que e lo ha hecho al igual que Wolfgang tira a unos cuantos de sus compañeros

— ¡Tenemos que llegar a Wolfgang y a Adelaine! — Me dice Ronan, ese es el plan, tenemos que acabar con ellos ya que sin ellos no tendrán a quien seguir de manera oficial y con suerte se rendirán, el problema es que por obvias razones son a los que más protegen

Yo asiento y saco raíces del suelo las cuales trepan por los brazos de nuestros oponentes sosteniéndolos evitando que puedan lastimar a nuestros aliados, ya casi no quedan arqueros por lo que el muro queda solo para los herido, a lo lejos veo a Adelaine sonriéndome, antes de que pueda reaccionar el aire abandona mis pulmones y no puedo moverme

— ¡Demonios! — Escucho la voz de Usher, lo veo correr de manera rápida a donde los enemigos, logrando atraer la mirada de su abuela, el aire vuelve a mí y el movimiento también, respiro hondo y por un segundo mis rodillas fallan pero me recupero rápido ya que no tenemos tiempo que perder, clavo la espada y aviento a los oponentes logrando abrirme camino, cada vez más me acerco a donde mis objetivos principales, pero como saben que deben protegerlos las personas intentan detenerme, al clavar la espada y ver el como la ida abandona las caras el sentimiento de asco y tristeza acude a mí pero no dejo que me domine, o mueren ellos o nosotros

— ¡VAMOS! — Es Declan a su lado esta Brent, tiene unas pocas heridas pero no muy malas como para que no puedan pelear corremos y abrimos paso, mientras mas cerca es más difícil pero lo logramos, nos acercamos a Wolfgang, para nuestra mala suerte Adelaine se acerca y manda a volar a mis dos acompañantes, dejándome sola

—Hola Medevane— Se ríe— ¿Tus últimas palabras? — Yo respiro hondo y sonrió

— ¿Qué se siente cuando tu propio nieto prefiere a su enemiga y no a su familia?— Su car es todo un poema

— ¡Como te atreves! — Ella se ríe como loca— ¡El iba a matarte ahorrándonos esto muchacha estúpida!

—Pues te salió un poco mal el plan — Me abalanzo hacia ella pero Wolfgang se interpone, Adelaine solo ríe y se aleja

—No puedes matarla — Me empuja haciendo que caiga de culo al suelo, me levanto y comenzamos a pelar con las espadas, no debo usar mucha magia ya que Adelaine es poderosa y mientras más débil este yo más difícil será acabar con ella, bloqueo sus ataques tal y como me enseñaron en las practicas, él es más alto y más fuete que yo pero aun así no dejo que me gane, doy batalla, pronto ambos estamos sudando— Medea acaba con esto, mira a tu alrededor, muchas personas están muriendo, personas buenas

—Tu empezaste esto— Doy un golpe pero él lo bloquea— Mataste a la mujer que amabas Oslo por el poder, por dinero, ¿Qué clase de persona eres? — Lo pateo logrando que de unos cuantos pasos hacia atrás ganando más terreno

— Soy humano hija mía, solo quiero que tu estés a mi lado, reinando, te lo mereces, tu madre también lo merecía pero le aterraba el acabar con unas cuantas personas, nos negó la felicidad

—Estás loco— Sus palabras me hacen enojar así que me abalanzo sobre el por fin logro lastimarlo, mi espada le hace un gran corte en el brazo del cual la sangre comienza a fluir, el sisea de dolor— Preferiría ser una campesina normal y  noble a que estar reinando a tu lado, me das asco Wolfgang

— ¡MEDEA CUIDADO! — Volteo hacia atrás y veo a un guarda corriendo hacia mí dispuesto a defender a su capitán, yo tomo mi pequeña daga y la aviento a su dirección, justo ahora agradezco tener una buena puntería ya que esta llega a su cuerpo logrando que caiga al suelo, al dejar a Wolfgang él ha aprovechado y me toma del cuello

—No puedo dejar que arruines mis planes pero no voy a perderte a ti también— Comienza a apretar mi cuello, no  quiere atarme si no dejarme inconsciente, me revuelvo como loca para evitar su cometido, pataleo intentando darle pero como dije es más fuerte que yo

—Eso sí que no señor— La presión desaparece, siento como Wolfgang cae a mis espaldas, toso y respiro, volteo y para mi completa sorpresa me encuentro con Lion— No puedo dejar que te mate, sé que no estas enamorada de mi peor yo si lo estuve— Me jala hacia él y me tira al suelo, medio idiotizada por le porrazo alzo la mirada y lo veo luchando con algunos De’Ath, me levanto y lo ayudo

—El porrazo no era necesario— Él se agacha y evita los ataques

—Era un porrazo o quedarte sin cabeza

— En ese caso gracias— Luchamos juntos hasta librarnos por completo de los De’Ath, al regresar la mirada a donde Wolfgang no lo vemos

— Deberíamos correr— Miro a donde él y vemos  a muchos soldados viniendo a nuestra dirección, corremos, muchos de nuestros aliados nos cubren las espaldas, al llegar un poco  más cerca de donde nuestros aliados veo como Lion se queja

— ¿Qué sucede? — Veo como él se pone la mano en uno de sus costados y esta se mancha de sangre— ¡Carajo! — Paso uno de sus brazos sobre mis hombros y comienzo a caminar como puedo hacia donde los doctores — Ni se te ocurra morirte Lion