Alice dormía profundamente en uno de los asientos del tren, a su lado descansaba Jake, quién desde siempre había sentido gran incomodidad por dormir en los viajes. El vagón saltando con su aspecto cláisico y sus sonidos metálicos le ponían de mal humor, junto con eso la capacidad de su joven novia para conciliar el sueño, le daba envidia. A los segundos, un fastidioso sonido acompañado de una vibración dentro de su bolsillo, le alertó.
Tres horas faltaban para el amanecer, ni siquiera un pestañazo logró concretar y para su colmo, ahora el “abogado” le llamaba, impertinentemente en esa fría noche. En cuanto el hombre contestó, una voz femenina saludó con tintes de preocupación y probables celos.
—¡Nikol —pronunció Jake, cuidando que su voz no fuera a despertar a Alice.
—Perdóname por llamarte a ésta hora —lamentó la mujer—. pero tenía que saber de ti —culminó. Sus palabras provocaban en Jake un severo enojo. Sin embargo no podía manifestarlo en aquél sitio.
—Nikol, sabes que no quiero que me llames, Alice podría escucharme y si eso pasa estoy perdido, estamos perdidos. —Las palabras de Jake resonaban al otro lado de la línea, mientras se escuchaba el incesante sollozo de la mujer—. Nikol, hablemos mañana, es más seguro, por favor, trata de entender que si te hablo de ésta forma es porque quiero que no seamos descubiertos, es lo mejor para ambos. Aquellas palabras lograron su objetivo, de inmediato Nikol pareció más calma, su respiración se habia relentizado, así que tras despedirse con tristeza y ternura, ella cortó.
Jake en tanto se quedó con el teléfono unos segundos más en mano, escudriñando de forma poco precisa su pantalla.
Él ícono de la radio parecía ser algo diferente al montón de música religiosa que escuchaba casi a diario, quizás tras escucharla podría dormir, cambiar en algo su repertorio y no ser redarguido por ningún pecado, ningún dios, al menos hoy. Finalmente el cansancio le venció, tras mucho intentarlo Jake cerró inevitablemente sus parpados, instantes después fue perdiendo la sensación del ruido y movimiento, hasta que más temprano que tarde se durmió.
Tras el paso de las horas el hombre despertó.
La voz de Alice parecía parte del sueño, era discutible su origen dada las condiciones de agotamiento que Jake afrontaba. Sin embargo, la fuente de éste sonido no era un sueño, sino la propia Alice, quién anunciaba que el tren había hecho arribo hasta Tshyre, la ciudad en la cual deberían hacer trasbordo hasta Marckova.
—Jake —La salutación continua de Alice, concluía por fin, haciendo que el hombre frotase sus manos en la cara, luego miró hacia afuera con dificultad, comprobando la llegada hasta la urbe.
—¿Qué hora es? —Ante la pregunta del hombre, Alice miró su teléfono, poniéndose de pie mientras ordenaba sus cosas.
—Son las ocho de la mañana, casi las ocho en verdad, faltan diez minutos. —respondió la mujer, haciendo que Jake asintiera conforme para también levantarse.
Cuando el tren se detuvo en la estación, la pareja salió de su vagón con destino a las boleterías. Sin embargo, encontraron un caos en la venta de pasajes, las boleterías estaban llenas, la gente reclamaba por retrasos y cancelaciones, parecía terminal aéreo en tiempos de terrorismo.
Jake hizo la fila para validar el trasbordo y recibir el nuevo acceso al tren, mientras tanto Alice se fue a descansar a los asientos de color negro que habían cerca. Un televisor encendido transmitía las noticias de la mañana.
—“Y tomamos contacto con María Morevna, corresponsal de Redossia noticias en el estado de Tauronov, quién a ésta hora nos da un reporte acerca del asesinato de la familia Fradulic, llevado a cabo durante ésta madrugada, te escuchamos María.
—Hola Dano, como bien dices, toda Adrussia se conmocionó al enterarse del asesinato de la familia Fradulic, ésta familia dedicada a la producción de miel y que según cuentan quienes les conocían, no tenían enemigos así que la federación ya está en control del caso, descartando o tratando de confirmar terrorismo de parte de grupos insurgentes o anarquistas. Quiero contarte que a esta hora se encuentra desplegado todo un operativo en el fundo Fradulic, tratando de establecer que fue lo que sucedió. Hasta el momento se sabe que unos antisociales entraron a la casa, rompiendo el ventanal de la propiedad y atacando a la dueña de casa, posteriormente los nietos y por último al propietario, quién intentó defenderse con una escopeta, aunque lamentable fue reducido por los antisociales y asesinado.
Hasta el momento la federación ha omitido la causa del deceso, los familiares de los Fradulic han llegado hasta las inmediaciones del lugar pero no han conseguido escuchar ningún reporte oficial o explicación por parte de los peritos, también se han negado a hablar a las cámaras lo cual ha generado un malestar en vecinos y familiares”
Alice miraba fijamente la noticia, escuchando hasta donde su atención y oído le permitía, sin embargo la presencia de Jake le hizo volver a la realidad.