Reiteradamente en esa ocasión ingirió una botella de vino ,apodada "indómito" sinfonía perfecta al aroma del casis y coco ,las nubes negras habían desaparecido en absoluto, todo muy cálido a la vez caluroso acoplaba con el Marlboro gold ,su suavidad más que el rojo ,la afección lo tocaba de ocacion ,era el ocaso en ese instante . Muy dichoso le otorgaron su mención al sueño americano el día en que comenzó su valle de lágrimas .
Consideraba que podría ser un día tormentuoso como cada mes séptimo ,rememoraba momentos de su infancia donde se dedicaba a jugar cerca al lago de los cisnes ,pero algo que nunca cambio su exuberancia juvenil y su humor sádico en particular.
Cada víspera ,sacaba su mesa de cativo vinotinto encajaba muy bien con su atuendo ,junto a sus 8 libros en privilegio "La Ilíada" y "la odisea", los típicos relatos de mitología griega ,denotaba a no creer en el amor alegando que fue como un veneno que te consumia hasta dejarte ciego ,siendo así suspiro de aceptación.