Recordo haber llegado en plena tempestad a la morada del triseñor, sus tías patológicas cabreadas de sus ludibrios llenos de resentiento, cómo arder en tinieblas.Desataron pesadumbre al hacerle tributo a su padre bienaventurado, posándose en los ostentosos muebles de guino de su familia ilegítima, habría despertado la furia de las carrillo hasta el punto de aborrecer su presencia, diciendo que nunca sería bienvenido por su tiranía y blasfemia, Desataron el cauteloso río rojo de los sentimientos más negros que pudieron existir, después de la tormenta lo habrían dejado afuera como la más feroz de las Hienas.
Sin decir adiós habría llegado a su verdadera huerta, derramo lágrimas de sangre así camino en el lago que arde con fuego y azufre, se pudo decir que fue la segunda muerte eterna ,a posteriori la melancolía se fue, de repente una voz celestial a su conciencia dijome :
-Desenlazaste la ira al ser ingrato y embustero con su descendencia, mereces un castigo ejemplar por tener la marca del pecado .Se percato que su luz es semajante a su piedra preciosa, la esmeralda que hurto en la habitación de Leida 7 años más tarde de su muerte .
Amaneció un día gris y lleno de lluvisnas, su desolación seguio intacta, una luz divina lo topo diciéndole:
-y el enjuagara de sus ojos todas las lágrimas ,ni habrá ya muerte, ni llanto ni alarido ni habrá más dolor porque todas las cosas de antes son pasadas .
-y dijo al que estaba sentado en el solio :he aquí renuevo todas las cosas, escribe porque todas estas palabras son dignisimas de fe y verdaderas .*