Capítulo XVIII: Obsesión Siniestra (Arco II: Una Sombra Sobre New Hope)

Notas del Autor: 

Hola mis estimados lectores, les saludo cordialmente.

Bien lectores, les comunicó que esta publicación  pone fin a los eventos de Una Sombra Sobre New Hope. A partir de la siguiente publicación o capítulo número diecinueve damos pie al siguiente arco argumental titulado Reyerta en New Hope y contara con un total de seis capítulos.

Finalmente quiero desearle felices fiestas de fin de año y unas breves palabras:

El mayor número de los males que sufre el hombre. Proviene del hombre mismo.

Plinio el joven

A pocos días de Halloween…

En los últimos años, especialmente en Norteamérica o en este caso Estados Unidos y Canadá. Una particular moda comenzó a surgir entre los jóvenes de 14 a 17 años y sumado a la presencia de la popular tienda Hot Topic –una cadena de tiendas de origen estadounidense especializada en música, ropa de la cultura pop, punk, Post-Hardcore y accesorios– A partir de 1988 de la inauguración de la mencionada tienda como en años recientes la moda resultaba ser "Vampiros" o en otras palabras, los jóvenes vestían un estilo gótico-punk, una serie de accesorios, blanquearse la cara, delineador negro, piercings, teñirse en cabello específicamente uno que otro mechón y beber jugo de tomate o frambuesa simulando ser sangre humana... los más osados beber sangre animal que mezclaban con pastillas de éxtasis provocando un estado de euforia como alucinaciones.

En grandes ciudades solía ser comunes tales prácticas de emular a los vampiros. Pero, en ciudades pequeñas como lo resultaba ser New Hope, Canadá. Bueno… es harina de otro costal. New Hope, fundada por inmigrantes europeos y constituidos por una institución religiosa fuerte con un gran apoyo de los ciudadanos, dicha moda resultaba ser vista con malos ojos y una serie de prejuicios estaba a la orden del día. En el único establecimiento educacional intermedio, un grupo de jóvenes estudiantes proveniente de familias de clase media y un moderado acceso económico independiente. Habían formado su denominado "Aquelarre" o llamándolo los "Condenados de New Hope" habitualmente merodeaban cerca de las gradas del gimnasio institucional o un sitio apartado del parque local.

En dicha institución, existía una tolerancia por parte de la autoridad y la agrupación de padres por considerarla una simple etapa de jóvenes. En el cuerpo estudiantil existía un "respeto" medianamente moderado pero ocasionalmente una broma leve por su particular forma de vestir y actuar.

El grupo estaba constituido por Kevin Timbrell, Jake Reid, Simón Monroe y Kenzie Watson. Los cuatro estudiantes cursaban el onceavo grado de secundaria y las edades variaban entre los 16 como 17 años. Kevin resultaba ser el mayor con 17 años cumplidos y el líder natural del grupo, Jake solía ser el segundo al mando, Kenzie se encargaba de visitar regularmente el Hot Topic y comprar nuevos accesorios o ayudar a perforar y por último estaba Simón que realmente se unió al grupo por estar enamorado secretamente de Kenzie y en su interior, solía cuestionarse sobre el inusual comportamiento de Kevin como Jake.

Sus amigos mostraban una personalidad que en el último tiempo bordeaba exceptivamente cierto fanatismo por el consumo de sangre animal mezclada con pastillas de éxtasis. Sufriendo episodios de paranoia o euforia desmedida, y en una ocasión agrediendo a un policía pero solo se emitió una multa como advertencia.

En aquel día, los cuatro estudiantes cumplían dos horas de castigos por faltar a la clase de historia de la maestra Charlotte Jones y ella en persona estaba a cargo de los cuatro pseudo-vampiros. A diferencia de otros maestros, la maestra Jones tenía algo más de paciencia con los estudiantes problemáticos y charlando brevemente con ellos.

–¡Y finalmente!– dijo Charlotte, terminando de calcular la calificación por el ensayo grupal pendiente de la clase de historia. –Los cuatro tienen una B-… ¡Felicidades!...

–¡Gracias!– contestaron.

–¡¿Solo "gracias"?!– preguntó Charolotte.

–¡Gracias, maestra Jones!– rectificaron.

–¡De nada!– replicó Charlotte Jones. –Bien, pueden irse… ya ha sido suficiente castigo. ¡Son libres!...

A pesar de lo estricta que podía llevar a ser, la maestra Jones. Ella comprendía perfectamente tener un hijo atravesando cierta "crisis" y nunca resultaba ser una tarea fácil, esos cuatro estudiantes en su opinión solo atravesaban una etapa y ocupaban un pésimo delineador negro.

–¡Un consejo!– exclamó Charlotte. –Intenten comprar un lápiz delineador, es mejor y ayuda a definir de mejor forma el contorno de los ojos.

–¡Les dije!– replicó Kenzie a sus tres amigos.

–¡Lo tendremos en cuenta!– contesto Simón.

Kevin y Jake, hicieron oídos sordos a lo mencionado por la maestra Jones. Una vez en el estacionamiento de la secundaria, comprobaron que estaban los cuatro solos y comenzando a verificar los últimos pasos a seguir.

–¡A las 9 en punto!– dijo Kevin, bebiendo algo de jugo de tomate. –¡Repasemos!...