La Verdad detrás de la Mascara

Lo que vio lo dejó paralizado, se dio cuenta de que el rostro de la mujer no estaba serio, sino más bien aterrado. Su boca temblorosa era una muestra de horror que podría asustar a cualquiera, a pesar de su gran belleza.

La reacción fue tan grande que inmediatamente el hombre reaccionó y soltó a la mujer, que sin pensarlo se dio la vuelta y se fue corriendo.

El hombre se quedó solo en el callejón, sintiendo asco de sí mismo, sin importarle nada lo que pasara a su alrededor. Tanto que hasta que alzó la vista no se percató de que había alguien junto a él. Era otra mujer, más adulta pero igual de bella y también llevaba un abrigo y mascara. El hombre la miró directamente y ella no pareció sentir nada. Después de todo, quizá acabe siendo una buena noche.

La mujer rompió el hielo con una frase:

-: ¿Crees que soy hermosa?:- 

El hombre pensó que era una pregunta tonta, pero necesitado de amor dijo que sí. Bajo la máscara se podía ver cómo la mujer sonreía. Movió su mano a la cara para quitársela, y el hombre se volvió a quedar paralizado, pero esta vez por el terror. 

-: ¿Y ahora? ¿Crees que soy hermosa? :-

Estaba llorando y asustada, su cara estaba golpeada y ensangrentada por golpes que alguien le dio…

Los espíritus de los muertos que fueron asesinados de maneras violentas como mujeres maltratadas, a menudo no logran alcanzar el descanso eterno. Así que torturan a todos los hombres que alguna vez han maltratado a una y los llevan a un callejón sin salida para su venganza.