Los detectives acudieron a la cita con la Doctora Yunice Campos, quien es la Psiquiatra Forense adscrita a la Policía Técnica, estaban ansiosos.
-Buenos Días Doctora Campos, ¿Qué puede decirnos de este sociópata?
-Bien, lo importante es establecer en primer lugar que acá no estamos en presencia de un sociópata sino de un psicópata y esto lo deduzco en razón de su éxito, es decir en por lo menos cinco homicidios, que podrían ser más, no ha sido capturado y es muy posible que ni siquiera haya sido señalado.
-En eso se equivoca mi querida Doctora, tenemos un sospechoso muy fuerte, este fue el mismo sospechoso del primer delito reportado, en aquella ocasión se pudo sustraer de la persecución penal debido a que estaba rodeado de mucha gente de peso, pero esta vez, sabemos que lo vamos a atrapar, va a cometer un error en cualquier momento.
-Ok, más a favor de lo que les explico, un psicópata es muy hábil para desenvolverse en la sociedad, sin encender alarmas, pueden determinar cuándo van a dejar salir su violencia y cuando no, al contrario, un sociópata suele estar inmerso en muchos problemas, ya que le cuesta mucho reprimirse, son impredecibles y actúan con espontaneidad, de ser un sociópata nuestro sospechoso, ya lo habrían señalado en otros hechos de violencia posteriores a aquél en que se pudo escapar.
Pude ver en las fotografías de las escenas de crimen de las diversas víctimas, que el asesino es una persona pulcra y ordenada, característica comúnmente observada en la conducta del psicópata, logra hacer un caos con las víctimas, sin ensuciar, sin hacer ruido y de manera eficiente ya que no deja huellas, no se deja ver por cámaras de seguridad, cubre sus huellas y presenta a la víctima como si de una obra de arte se trata, quiere mostrar su trabajo, que sepan de lo que es capaz y lo ofrece al mundo como un regalo, en las victimas a pesar de causarles tanto daño no se observan actos ejecutados con odio sino meticulosos, es muy interesante.
De la observación de las escenas de crimen y de las victimas podríamos aventurarnos a diseñar el perfil de este individuo.
-Qué tan confiables son estos perfiles doctora?
-Les cuento, en las técnicas que se usan en el diseño de un perfil psicológico, se emplean principios de diferentes disciplinas como, por ejemplo, la psicología clínica, la psicología social y la psicología cognitiva, así como la psicología ambiental y la psiquiatría forense y, si bien hay dos metodologías nos interesa la metodología usada por la Unidad de Ciencias del Comportamiento, en la Academia Nacional de Quantico del FBI, ya que ha sido la más exitosa.
Fue el método usado para la captura de George Metezky, alias Mad bomber, quien fue capturado en 1.957, este caso inaugura la figura de la psicología de la investigación criminal, permítanme buscar acá en mis archivos el perfil elaborado por el Doctor James Brussel de New York.
-Le creemos Doctora, no hace falta.
-Créame esto, cuando escuche el perfil sabrá de que le hablo. Acá lo tengo, les leo:
“Es un hombre paranoico, de mediana edad de 40 a 50 años, introvertido. De constitución bien proporcionada, es soltero, un solitario, quizá vive con una mujer mayor, pariente suya, es alguien muy pulcro, aseado de afectado apurado, no debe estar interesado en las mujeres. De buena educación, pero de origen extranjero. Es un mecánico habilidoso, cuidadoso con las herramientas, es eslavo, religioso. Si es criticado en su trabajo puede ser violento. Se siente superior a los que le critican. El resentimiento sigue en aumento. Sus cartas las envía desde Whestchester, ya que no es tan estúpido de echarlas al correo en la ciudad en la que reside. Probablemente envía las cartas en un lugar que esta en el camino que esta desde su casa hasta la ciudad de Nueva York, una de las mayores concentraciones de Polacos está en Bridgeport Conneticut y para ir de allí a New York hay que pasar por Whestchester. Ha tenido una enfermedad grave posiblemente del corazón. Cuando ustedes lo capturen llevará una camisa de doble pechera, abotonada.”
Los detectives escuchaban a la doctora atentos, el detective Medina dijo con mucho respeto, pero en tono jocoso:
-Que bien, muy conciso, ¿cree que pueda decirnos como irá vestido nuestro asesino el día que lo capturemos?
-No han escuchado todo, ahora les cuento con que se consiguieron los detectives cuando capturaron a Mad bomber, el 21 de enero de 1.957, encontraron que Metezky tenía un taller arreglado para armar sus bombas, muy pulcro y ordenado, había sido herido en un accidente en 1.930, y después de tres meses de subsidio había sido despedido, lo que desató su resentimiento que devino en la violencia que ejerció, era un hombre atlético, de 54 años, polaco, soltero y vivía con dos mujeres mayores quienes eran sus hermanas y además llevaba una camisa de doble pechera abotonada.
El detective Méndez soltó un silbido por lo impresionante del caso, recordaba haber estudiado en la academia sobre el caso del Mad bomber, cuando estudiaron los asesinos seriales, sin embargo, ante lo poco común que es este tipo de delitos en nuestros países latinos, donde abunda más el sociópata, producto de la crianza negligente y niveles de vida paupérrimos, desconocía la conexión de este caso con la psiquiatría forense.