Capitulo 40º Preguntas...

Ya habían pasado unos años, Elisabeth tiene cinco años, va al colegio, la lleva Alexandra como todos los días, el colegio está en The Royal College Of Saint Peter in Westminster, más conocida como Westminster School, es una de las escuelas más independientes más importantes del Reino Unido, situado en el recinto de la abadía de Westminster.

A las tres de la tarde la recoge Robert del colegio, y Daniel también va a ese colegio.

Suele estar sola en el recreo, y Daniel se acerca y pasa el recreo con ella, mientras Daniel esta con ella, Elisabeth no tiene miedo, hay niños que se meten con ella, por tener esos orígenes, ella no le había contado nada a sus padres.

El tutor del colegio llamo por teléfono a Natalie, para decirle que Elisabeth, estaba teniendo problemas en el colegio.

—¡Hablare con Elisabeth! Para saber qué es lo que pasa, muchas gracias, adiós —dice Natalie.

—¡A usted!  Buenas tardes, adiós —dice el tutor.

Natalie llamo por teléfono a Robert para contarle, lo que le había contado el tutor.

—¡Hola cariño! ¿Qué tal el día?

La voz de Natalie, no se le notaba normal, tenía un miedo que siempre lo había llevado consigo, no era egoísmo, sabía que algún día tendría que salir a la luz.

—¡Hola princesa! ¿Qué ocurre? No me llamas por eso Natalie, dime la verdad, te noto nerviosa—dice Robert.

—Creo que ha llegado el momento de contarle a Elisabeth, la verdad, de sus orígenes—dice Natalie.

—Cuando llegue a casa, hablamos princesa, no te preocupes.

—Está bien Robert, luego hablamos. ¡Adiós! —Dice Natalie.

—¡Vale, amor, adiós cariño! — Contestó Robert.

Robert conocía muy bien a Natalie, y sabía que sus palabras no la habían tranquilizado para nada, ese demonio la había estado persiguiendo hacía tiempo, sabía que cuanto más tarde sería peor, para Elisabeth y para ellos.

Natalie tiene miedo a la reacción de Elisabeth, al saber que ellos no son sus padres, y ella querría, saber de su familia biológica, y sobre eso no la podía ayudar.

Mas tarde llegó Robert con Elisabeth, Otto enseguida fue a saludar a su fiel amiga con la que siempre ha estado, Elisabeth se acercó a Natalie y la dio dos besos, ella la abrazó fuertemente cayéndosele unas lágrimas por la cara.

—¿Qué pasa mami? ¿Por qué lloras? ¿He hecho, algo malo? —Dice Elisabeth.

—¡No, mi princesa! Te quería preguntar algo, ven. ¡Aquí, siéntate conmigo! —Dice Natalie.

Natalie y Robert se sentaron en el Chaise Longue, Elizabeth se sentó en el suelo enfrente de ellos al lado de Otto.

—¡Me ha llamado, el tutor! Me dijo, que tienes problemas. ¿Qué es, lo que pasa Elisabeth? —Dice Natalie.

—Bueno mama... Los niños se meten conmigo, porque dicen que soy diferente a vosotros, que no sois mis papas—dice Elisabeth llorando.

—¡Ven aquí, Elisabeth! Siéntate encima, mama y papa van a hablar contigo, hace muchos años cuando eras un bebe, te adoptamos, te hemos criado, cómo si fueras nuestra hija, y así te queremos —dice Natalie entre lágrimas.

—Pero... ¿Quién son, mis padres? ¿Porque tengo, los ojos diferentes, a vosotros? —Dice llorando Elisabeth.

—¡Mi princesa! Son muchas preguntas, te vamos a responder a todas, no sabemos quiénes, son tus padres biológicos, solo sabemos que tus orígenes son asiáticos, de china o Japón. ¿Entiendes, cariño? —Dice Robert.

—¡Pero nosotros somos, tus padres, y eso nadie puede negarlo! Y siempre lo seremos, cuando te digan algo otros niños, tú les dices que tienes padres iguales, a ellos o mucho mejor—dice Natalie.

Elisabeth dio un fuerte abrazo a su mama, y a su papi.

—Os quiero, mucho mami, más que a nada en el mundo, los niños son tontos, además Daniel me defiende, es mi hermano mayor—dice Elisabeth.

—¡Nosotros también, te queremos princesa, y no olvides nunca eso, aquí estaremos siempre para lo que necesites, y cuando tengas un problema, nos lo cuentes cariño! ¿Lo entiendes, Elisabeth? —Dice Robert.

—¡Si, papi! ¿Puedo ver, la tele un rato? —Preguntó Elisabeth.

—¡Si claro! Pero solo un rato, después tienes que cenar, y tenemos que aprender, a leer bien—dice Natalie.

Natalie se había quedado más tranquila, pero también sabe, que Elisabeth solo tiene cinco años, cuando sea más mayor, se hará más preguntas...

¿Qué pasará, a medida que Elisabeth, vaya creciendo?

¿Logrará saber, quiénes son sus padres y dónde están?

Y sobre todo... ¿Porque, la abandonaron?

CONTINUARA...

LIBRO SEGUNDO

LA VIDA DE ELISABETH 2º (Pasado incierto)