La viuda de Bennet

3.

Capitulo 3

Cédric Jones

Todos los presentes miraban sorpresivamente al menor de los Bennet, quién no dejaba de mirar con una rabia evidente a Rebecca Bennet.

-Es tu turno de reír, pero no cantes Victoria pues tu final llegará pronto - Damián le susurró a Rebecca, está se estremeció por completo. Sus palabras eran una evidente amenaza, y aunque pensó en contestarle mantuvo la compostura, había demasiada gente, y demasiadas cámaras como para caer en su juego. Además de que ella ya estaba jugando su propio juego: el de viuda afligida.

Rebecca sacó un paño blanco de la cartera y se limpió las lágrimas que brotaban de sus ojos, con una elegancia propia de una Bennet. Eso enfureció aún más a Damián, pero este ya no pudo hacer nada porque la detective Madison le estaba marcando presión para que caminara hacia la patrulla y le acompañará a la comisaría.

Apenas Damián se marchó todos los presentes comenzaron a cotillear a voces, donde claramente se escuchaban teorías con respecto a la misteriosa muerte de Erick Bennet. Unos seguían pensando que Rebecca lo había asesinado para quedarse con el dinero de la familia; el segundo grupo apostaba a que Damián había puesto fin a la vida de su hermano para poner fin a las rivalidades y quedarse con el puesto de heredero. Otro más reducido pensaban que el asesino era Cédric Jones, el sócio de Erick Bennet y quien tenía el 50 % de las acciones de la empresa de transportes Marítimos Bennet&Jones.

-Señora Bennet, lamento muchísimo su pérdida - Cédric Jones se acerca a la viuda y le extiende la mano de forma Cortez. Rebecca la toma sin un ápice de duda, sabe bien que de todos los presentes, solo Cédric Jones puede convertirse en su aliado.

- Muchas gracias - contestas recibiendo el saludo. Cédric le sonríe.

-¿Te importaría si hablamos un poco a solas?- le invita a apartarse un poco de la muchedumbre. Becca asiente en silencio y le sigue el paso. Beatriz y Dafne están furiosas, atentas a la conversación de ambos aunque estén lejos de ellas. -Eres la principal sospechosa para todos- Cédric comienza diciendo.

- Si me has traído hasta aquí para también hacer acusaciones mal fundadas referente a mí, te advierto que no voy a tolerarlo- Becca le para el carro de inmediato y Cédric sonríe complacido de que la mujer en la que ha quedado la fortuna y el imperio Bennet tenga Temple y fiereza. Conoce bien a la Familia y sabe que la va a necesitar.

-Creo firmemente en su inocencia, señora Bennet, no me malinterprete - El hombre vuelve a sonreírle amablemente, Becca le sonríe también aunque continúa dudosa, no sabe a ciencia cierta que es lo que Cédric Jones quiere lograr con esta conversación.

-Vayamos al punto Mrs Jones ¿Que es lo quiere?- Becca le enfrenta y Cédric se siente aún más emocionado con la actitud de la chica.

-Quiero ayudarle, la sacaré del ojo del huracán en donde está metida. Hare que mis contactos presionen a la prensa y que la historia de Damián Bennet como el hombre que mató a su hermano por celos y por la herencia cobré más fuerza, de esa forma usted volverá a su papel de viuda afligida, y transportes Marítimos Bennet&Jones seguiría marchando en nuestras manos ¿Que le parece señora Bennet?- Cédric le susurró esto último, Rebecca sintió un escalofríos recorrer su cuerpo.

- ¿Que quiere a cambio? - Cuestionó sin dudar.

-A usted Sr Bennet, siempre la he deseado solo a usted...

****************************************

-Es la tercera vez que te se lo voy a preguntar Damián Bennet- Madison golpeó la mesa con fuerza y miro fijamente al menor de los Bennet que era muy diferentes al fallecido.

Damián tenía el cabello negro azabache, y los ojos grises como la luna, su piel era pálida, tanto que parecía un vampiro de películas de adolescentes. Por su parte Erick era rubio con ojos verdes aceituna, un tono de piel más rosado, con rasgos mas joviales y amigables. La gente a menudo no entendía cómo es que siendo hijos de la misma madre y el mismo padre ambos pudieran ser tan diferentes.

Incluso en hubo una época en la que las personas cercanas a la familia,llegaron a afirmar que el menor de los Bennet no era hijo del también fallecido Walter Bennet, quién era reconocido como el viejo Bennet.

- ¿Estuvo usted en Newport Sand Beach tarde del 18 de octubre?- Madison volvió a preguntar, Damián Bennet suspiró y se desajusto la corbata antes de responder.

-Si- su respuesta fue seca y fría. Madison sonrió victoriosa, Damián Bennet iba a confesar.

- ¿Cito ahi a su hermano y luego lo mató?- el chico sonrió de forma macabra.

-No, yo no cité a mi hermano, tampoco lo mate- contesto con serenidad mirando fijamente a la detective Madison a los ojos.

-¿Entonces que mierda fue hacer ahí?- la mujer cuestionó iracunda.

-Fui a encontrarme con Rebecca Bennet...




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.