Viajamos toda la tarde mi madre y yo hasta llegar a mi casa ya en la noche, mis hermanos al igual que el año pasado me recibieron contentos y con una sorpresa de bienvenida. Esas dos semanas que estuve en mi casa conviviendo con mi familia, Jasón también ya estaba ahí y el, mi hermano y yo volvimos a hacer travesuras como cuando niños, aunque ya éramos algo “viejos” para esas cosas, pero no nos importaba. Durante esas dos semanas estuve hablando un poco con Dora. También hable con Leila en una ocasión, quien me dijo que había ido de viaje con su familia a mi ciudad, aunque no fue posible vernos, ya que ella me aviso cuando ya iban de regreso a su casa, me dijo que su vestido para la graduación lo había comprado en la ciudad que quedaba más cerca de mí casa; Leila y su familia viajarían toda la noche hasta llegar a su casa en la madrugada ya que habían salido de aquí ya en la tarde, así que fui acompañando a Leila por vía mensaje electrónico hasta que llego a su casa, Nos despedimos y entonces acordamos vernos en la graduación.
Habían pasado las dos semanas y por desgracia mis hermanos no podrían ir a la graduación, solo iríamos mi madre y yo. Yo me fui un día antes, tome un autobús en la mañana para poder llegar en la tarde a la preparatoria, anteriormente ya había hablado por teléfono al Padre Noel para preguntar si podíamos hospedarnos en el seminario mi madre y yo durante el tiempo que estaríamos ahí, el Padre Noel me dijo que no habría ningún problema. Fue entonces que esa tarde llegue aproximadamente a las 6 de la tarde al seminario.
Había sido un viaje largo como siempre, pero después de haber viajado así numerosas veces durante 3 años, ya estaba acostumbrado. Los Padres Noel, Marcos y mi padrino ya me estaban esperando en el seminario, recuerdo que aquella tarde antes de llegar directamente al seminario, pase a la casa de cultura a ver rápidamente al profesor Santiago. Llegue a casa de cultura y estuve platicando un poco con él, también encontré a un viejo amigo de la preparatoria ahí, al que salude; después de un rato me despedí del profesor Santiago y me dirijo al seminario, donde la portera me dijo que los Padres estaban ocupados en una reunión, pero que podía pasar e instalarme. Mientras esperaba a que los padres se desocuparan de su reunión recuerdo que me fui a lo que alguna vez fue mi dormitorio y estando ahí hable un poco con Dora, quien me dijo que en ese momento venía de regreso de su universidad, no fue mucho el tiempo que platicamos, pero no importaba, sabía que estaría con ella al día siguiente en la graduación, aunque tenía la intención de salir a caminar un rato con ella mientras se llegaba la tarde, pero yo le preguntaría esto hasta el día siguiente en la mañana.
Cuando los padres salieron de su reunión me saludaron y pasamos a cenar, era raro estar ahí en esa casa cenando con los padres sabiendo que ya no era seminarista. Recuerdo que después de la cena mi padrino, el Hermano Horacio me invito a platicar un rato; estuvimos hablando sobre cómo me sentía, que había pensado, que carrera iba a estudiar y en donde estudiaría; mi padrino siempre fue una persona de confianza para mí, por lo que no tuve inconveniente para contarle todo lo que me pregunto, después de haber charlado con mi padrino ya un buen rato me fui a mi dormitorio y descanse.
A la mañana siguiente los Padres y los Hermanos tenían misa en la capilla como siempre, así que quise ir también, recuerdo entonces que el Padre Marcos me dijo que, si gustaba ayudar con los cantos, así que fui rápido por una guitarra al cuarto de música y acompañe aquella misa cantando, fue la última vez que toque en esa capilla, después de haber tocado cientos de veces durante 3 años. Después de la misa fue el desayuno, posteriormente yo mande un mensaje a Dora para preguntarle si estaría ocupada en el día, tardo un poco en responder pero me dijo que si estaría ocupada, que se estaba arreglando para la tarde, en ese momento me di cuenta que no podríamos salir a caminar como yo esperaba, así que seguimos platicando un rato; terminamos la conversación y en ese momento me di cuenta que aún faltaba mucho tiempo para que empezara la graduación, entonces me dirigí al cuarto de televisión para relajarme un rato y mientras lo hacía llego un mensaje de Leila:
¿Hola Alex… como estas?
Hola Leila, bien gracias… aquí aburrido, llegue ayer en la tarde y ahorita voy a ver un poco de televisión para distraerme un rato
¿llegaste ayer? Qué bueno… yo ahorita me estoy arreglando para la tarde
¿enserio?!... ¿jajaja ya tan temprano?...
Si… aunque no lo creas si lleva bastante tiempo jajaja
Sabes yo me voy a comenzar a arreglar cuando ya falté casi media hora jeje
Que suerte la tuya jaja… ¿oye sabias que Dante no va a venir?!