-"Me gusta pensar que hay algo más allá algo que vibra más alto sobre todos, que nuestros destinos están escritos, un guionista que escribe nuestros destinos."-
Durante el transcurso de mi vida pude ver cómo una persona que amaba mucho se marcho de este plano, se rindió, sin pelear tal vez su destino estaba escrito entre líneas subrayadas, pude ver a una persona llorando sin consuelos en la oscuridad bajo la luna y yo sentado al lado haciéndole compañía, pude escuchar discusiones con palabras hirientes destruyendo sentimientos sin piedad, pude sentir un abandono frío, pude sentir el dolor de un "no te quiero mas" y sobreviví a todo.
Desde muy niño sentí mucha admiración y atracción por los ángeles, sus alas, sus figuras, los dibujaba por cual hoja limpia tenga un cuaderno, fascinación por esos seres que en esa edad no tenía idea que eran en realidad yo solo los dibujaba, así mismo me trajo complicaciones a tal comportamiento que me llevaron a terapia, durante meses me hablaron sobre el tema nunca supe el por qué mi obsesión por ellos pero lo que sé, es que los buscaba desesperado en libros y fotos.
-Cuando fui creciendo esa fascinación y admiración por los ángeles las tuve que esconder en los más profundo de mi ser, pero, a veces... en las noches de tristezas aún siento y puedo ver cuando duermo que un destello de luz ilumina mis ojos cerrados y la paciencia vuelve a mi.-
Cuando tenía 10 años una persona me dijo: -"dibuja y escribí lo que te salga del corazón eso va a calmarte cuando sientas tristeza y dolor"-.
Hoy de grande ya dejé de dibujar, algunos cuadros colgados esparcidos por mi casa llevan las figuras ilustrada de lo que alguna vez sentí, tampoco escribo... algún que otro cuaderno con escritos suelo mirar de reojo guardados en cajones viejos que nunca ven la luz.
Pero estos días me veo con la necesidad de volver a escribir lo que siento porque si no escribo mi cabeza revoluciona a mil por hora y los pensamientos se transforman en voces ensordecedoras, me hundo en la tristeza.
-"El guionista una vez escribió en un borrador que un ángel con un don celestial andaba deambulando y se encontró a una persona herida".
EL COMIENZO
En un momento de mi vida el destino me hizo ver la imagen en una foto donde un ángel posaba bellamente mirando hacía una cámara que le capto una sonrisa que me dejó estupefacto por 10 segundos, ~que hermoso ángel me retumbaba en la cabeza~, no iba a hablarle no sé por qué busque la forma de llamar su atención y lo logré su "hola" y mi respuesta estoy seguro hicieron chocar dos planetas en algún lugar del universo... una historia, arrancaba para los dos.
Ella era hermosa, sentí una conexión al instante me hizo recordar mi niñez rápidamente se transformó en algo especial era la persona con la que me gustaba hablar todos los días, sus "buenos días", sus "hasta mañana" eran el motivo por el que yo sonreía, no exagero cuando digo que ese ángel me hizo sentir distinto y me daba paz.
En esa época no anda bien, había perdidos seres queridos, estaba desorientado en la vida, lleno de excesos, anestesiaba dolores con basuras contaminadas de la noche con tantos amaneceres había días que ya no podía más... no podía mas seguir y esa oscuridad que hacia años me cegaba parecía no sentirla cuando interactuaba con ella. Me daba seguridad, era delicada, extrovertida, y ese toque angelical que la caracteriza.
Pasaban los días, semanas y meses charlando y contándonos cosas sin sentido a veces, más la conocía más me atraía, pero no todo fue lindo como el atardecer de una primavera, al pasar el tiempo se canso de mi, podía ver a veces su desinterés en sus palabras, tal vez la aburría con mis cosas, un día me dijo que había conocido a alguien y que no hablemos más, así de seco, no me dio chance de procesar el mensaje sentí ardor en el corazón como si me apoyaran un fierro al rojo vivo en el pecho no podía hacer nada no iba a retenerla si no éramos nada... solo extraños pasando el tiempo.
Esa tormenta que había dejado atrás me estaba por alcanzar de nuevo y mientras ella se cansaba de esperar que yo haga un movimiento de interés, a mí me tenían atado con una cadena desde la oscuridad y me tironeaba todo el tiempo, creo que en el fondo jamás quise empezar otra relación para rellenar vacíos que me habían causado.
Para mí ella era un ángel, se canso de esperar algo de mi y tenía razón yo nunca llegué porque no quería hacerle daño y se fue, voló en otros cielos.
Quedé solo un tiempo largo, en momentos la extrañaba mucho, no pude conocer a nadie me había cerrado a todo tipo de relaciones siempre sentí que si me iba con alguien y ella volvía yo no iba a estar, en el fondo la esperaba a veces buscaba la forma de saber de ella, pero no podía siempre tuvo la facilidad de bloquear todo acceso que tenía a ella. Estaba bien lo intuía solo me quedaba paciencia y esperar.
Pasó un año o más, no lo sé, se que fueron varias estaciones del año y apareció, volvió a hablarme yo estaba solo, en la oscuridad de nuevo, mi casa de siempre, ese lugar oscuro que volvía una y otra vez cuando andaba a la deriva, era donde ahogaba mis angustias que sentía de secuelas de golpes.
Me dijo: ~cómo estás~, "bien" respondí, mentí no andaba bien pero automáticamente su luz me armó todos los pedazos desarmado que tenía, mi ánimo cambio era como ese perrito que tiene miedo pero aún así quiere que lo acaricies y le hagas cariño... se que ella me seguía queriendo y quería verme, me propuse cambiar mi mundo para ella, siempre la esperaba no se por que nunca me alejé, no lo sé, tal vez si.
Recuperamos esa confianza que nos unía pasaba el tiempo y yo seguía sin animarme, me hacía bien, dejaba todo de lado por ella pero, no sé, me frenaba el miedo tal vez, ya había superado otras relaciones ya no me dolía tanto las heridas, no guardaba rencor por nadie, la cadena que tenía atada y me tironeaba ya se había cortado, estaba bien ya se había despejado el cielo y tenía alguien que esperaba pacientemente verme y sobre todo me quería, pero el miedo paraliza, el miedo te hace dudar, te recuerda dolores que sentiste, el miedo tiene memoria.