Pasaron unos minutos hasta que un discípulo apareció avisando que el desayuno ya estaba listo.
Wei Wuxian le respondió al discípulo con un "Gracias, en un momento vamos".
—Eso es todo, los espero después del desayuno los espero otra vez.
Los juniors asintieron ante las palabras del mayor y salieron rápidamente de la biblioteca. Wei Wuxian soltó un suspiro pesado y salió del buscar para ir en busca de su esposo. El Wei tenía la impresión de que JingYi y Xue Yang estaban con el Lan.
Lan Wangji observaba a su hermano con seriedad, hacía unos minutos habían empezado ésta pequeña disputa y, ninguno daba el brazo a torcer. Ambos Lan seguían dedicándose burlar algo hirientes bajo la atenta mirada de dos niños, y sorpresivamente, bajo la atenta y furiosa mirada de Sandu Shengshuo.
De un momento a otro, los Jades Lan se encontraban rodando por el suelo provocando un tic en un furioso Jiang Cheng. El Jiang no podía entender como esos dos lograban sacarlo de quicio.
Cuando Wei Wuxian apareció al lado de su Shidi, digamos que no estaba para nada contento. Mientras los Jades peleaban, los mocosos gritaban "pelea, pelea"; cabe decir que estos dos también estaban peleando por ver cuál de los dos Jades iba a ganar esto.
Yiling Laozu y Sandu Shengshuo estaban a nada de perder la maldita paciencia. Tampoco ayudaban las cosas que los hermanos Lan se decían.
"Eres un idiota". Había gritado Lan Wangji cuando su hermano lo pisó.
"Tú lo eres más". Fue la respuesta del primer Jade.
"¡No entiendo cómo tu esposo te aguanta!". Jiang Cheng alzó una ceja ante eso.
"¡Lo mismo digo, Shidi!". Wei Wuxian soltó un pesado suspiro.
El látigo violeta impactó a centímetros de los hermanos.
Jiang Cheng había tenido suficiente cuando los dos mocosos empezaron con cosas estúpidas.
"¡Lan-ge sonrisas le está pateando el trasero a Lan-ge, por ende él es mejor!". Había exclamado Xue Yang provocando un sentimiento de traición en Lan Wangji quien terminó por golpear a su hermano.
"¡No es verdad, Hanguang-Jun es el mejor!". Fue la respuesta de JingYi.
Al notar el aura asesina de Jiang Cheng y Wei Wuxian, los cuatro pararon y se levantaron. Zidian soltaba chispas con furia, igual que su amo.
El que Wei Wuxian esté de brazos cruzados tampoco ayudaba.
—¡Tú! —señaló el líder de Yunmeng a su esposo—. Te vas a limpiar, vas a acomodar tu cabello y me seguirás, sin quejas, ¿Entendido?
Xichen asintió temeroso empezando a limpiarse y arreglarse. Temía lo que sería capaz de hacer Jiang Cheng sino obedecía.
Wei Wuxian también copió la acción de su hermano, pero él señaló a las tres personas restante.
—Se limpian, se arreglan, me siguen y no quiero quejas.
Los tres empezaron a limpiarse y a arreglarse rápidamente. Cuando todos estuvieron lo "suficientemente" limpios, siguieron a sus personas favoritas.
A algunos discípulos les pareció divertido la forma en la que que sus mayores junto con los otros dos seguían a Yiling Laozu y Sandu Shengshuo. Ver cómo un respetado maestro tenía un puchero en el rostro era algo de lo cual disfrutarían en este preciso momento.
Cuando llegaron al comedor, se encontraron con la mirada reprobatoria del líder Yao y Ouyang. Lan Qiren parecía aliviarse al verlos entrar.
—Lan Qiren, esto me parece una total falta de respeto —habló el líder Yao siendo secundado por el líder Ouyang.
Qiren intentó reprimir las ganas de echarlo, pero mantuvo su postura recta y seria.
Al escuchar la voz del líder Yao, Xichen y Wangji reprimieron sus ganas de rodar los ojos. ¿Por qué ese hombre había aparecido hoy?
Wei Wuxian y Jiang Cheng, si dejaron notar su fastidio al rodar los ojos e ignorar lo dicho por el líder.
—Mi hijo me mandó una carta diciendo que Wei Wuxian lo echó de su castigo —dijo el líder Ouyang.
El ex Patriarca dirigió su mirada al heredero Ouyang, ¿Acaso él...? ¿Por qué?
—Wei Ying no echó a su hijo, líder Ouyang —habló Wangji apretando los puños con rabia—. Fue su hijo el que decidió no hacer el castigo e intentó acercarse a Lan JingYi y Lan Yang.
El sonrojo en la cara del líder Ouyang podía haber cometido con un tomate.
El líder creyó que podía hacer quedar mal a Wei Wuxian, no pensó que Lan Wangji saltaría en su defensa.
—¿Cómo está seguro de eso, Hanguang-Jun? —preguntó con arrogancia.
—Porque a su hijo se le ocurrió la gran idea de meterse en mi camino —respondió con suficiencia.
Lan Qiren fingió toser ocultado su risa.
Lan Xichen sonrió abiertamente a lo dicho por su pequeño hermano.
Jiang Cheng formó una leve sonrisa arrogante.
Wei Wuxian solo negó con la cabeza.
Xue Yang rió con ganas mientras que con la mirada se burlaba de Ouyang Zizhen.
JingYi tosió un poco de comida cuando se atragantó.
—Su hijo debería saber que Wei Ying es su mayor —siguió hablando el Lan—. Wei Ying tiene todo el derecho del mundo para castigarlo por alguna regla rota, o algo mucho peor.
—¡Tú!...
—Si él quiere seguir aquí, tiene que entender varias cosas.
Un silencio se había formado, cuando el líder Yao intento replicar a favor del líder Ouyang, fue silenciado por el muy conocido hechizo silenciador de la secta GusuLan.
Eso había dado a entender que Lan Wangji no quería queja alguna.
—Disfruten del desayuno —habló Qiren antes de empezar a comer.
Todos en el lugar estaban asustado por la forma en la que Lan Wangji le había hablado al Líder Ouyang.
Un valiente muy estúpido creyó que esa no era la forma en responderle a un líder de secta.
—Hanguang-Jun creo que esa no es manera de responderle a un líder de secta —habló un cultivador de alguna secta que a Wangji sinceramente no le importaba.
—¿Y vendrás tú a decirme cómo hablarle? —respondió Wangji irónico.
—Creo que un asesino como Wei Wuxian no puede hacer lo que quie...
Antes de que siquiera pueda terminar la frase, Zidian azotó con fuerza en su mesa.