Hola abuelo:
¿Qué cree?
Anoche soñé con usted.
Soñé el día en que fuimos al parque con mis padres y mi abuela.
En ese entonces tenía como unos 7 años, estaba haciendo una noche realmente fresca y usted dijo que podía enseñarme a manejar bici.
Estaba emocionada, mi mamá no quería, pero a usted le dio igual.
Lo intentamos muchas veces, pero siempre me caía.
Hubo una donde me caí y me lastimé, mi mamá se molestó, pero usted me dijo que dejara de llorar, y que si no lo hacía no me iba a comprar mi helado.
Creo que esas fueron las palabras mágicas para que dejara de llorar.
Abuelo, cada día me haces falta.
Hay noche en las que lloro hasta quedarme dormida.
Mi mamá te extraña, yo te extraño, todo la familia te extraña.
Todos seguimos pensando que es un sueño, y que al despertar usted estará sentado ahí, en su silla favorita.
Pero eso no va a se posible.
Debemos vivir con eso de ahora en adelante.
Nos leemos en la otra.
Con amor,
Dana.