Una vez cerrada la subasta de las diez primeras Andanzas, el panorama se empieza a poner difícil para ELCOVE. No han caído en su tela de araña revendedores como el CORSARIO, babeándose por el lucro inminente de re venderlas con una considerable diferencia, sino ilusionados coleccionistas que esperaban acceder al paraíso de las incunables.
Llueven ahora los mails de oferentes que han llamado al teléfono proporcionado al sitio y les han dicho que allí no vive ningún Vélez, y don Elio debe brindar explicaciones que suenen convincentes, porque algunos fans del Indio habitués de Mercado Libre se conocen entre ellos y han cruzado datos y se van acrecentando las sospechas.
Le escribe JUANO, de Mar del Plata, ya en medio de las tratativas por un par de los ejemplares subastados: Estimado Elio, lamentablemente me acabo de encontrar con esta sorpresa de mal gusto, honestamente me hace mal enterarme de esto ya que confié en usted, solo necesito una explicación, sabe que pasa para mí esto es un hobby agradable y ya esto sobrepasa lo agradable y no quiero tener disgustos de ninguna naturaleza, siempre fui franco y sincero en mi proceder, aparte estoy guardando el dinero para cerrar la operación con usted rechazando otras compras seguras para cumplir con lo pactado, Elio ya no sé qué hacer estoy muy desorientado y defraudado, solo le pido que sea sincero y me diga si esto es cierto y me olvido de esta historia y le doy posibilidad a otra gente que me quiere vender otras revistas, le adjunto el mail recibido por otro usuario enviado por usted... espero su respuesta.
En el mail al otro usuario ELCOVE, revirtiendo su estrategia inicial, había acusado al CORSARIO -el principal de los vendedores marcados como abusivos, que no había caído en la trampa-, de realizar una maniobra de apoderamiento de todas las revistas de la subasta, al tiempo que se explayaba sobre la mudanza y el teléfono que ya no le pertenecía, pobre viejo: Estimado Sr.: Ante todo quiero explicarle que ya no pueda comunicarse conmigo: la gente con la que vivía podría decirse que, prácticamente, me echó a la calle y en forma sorpresiva, ya que en el momento en que di mis datos a Mercado Libre, eso no era de prever. La situación por la que atravieso actualmente, hizo también que demorara ir a un local de Internet, a ver mi correo. Mis primeras disculpas... A más de males, considero que ha habido en esta subasta un fraude imperdonable. El día jueves al mediodía, terminando ya con las últimas cosas que restaban mudar de mi departamento, recibo un llamado telefónico de un tal CORSARIO al cual recordaba como ofertante, que se presentaba como el ganador en todas las subastas de mis artículos (oferté doce revistas en total), por un precio que después me entero era bajísimo, más adelante le cuento, y que –fíjese el caradura- me proponía, contra pago inmediato, una reducción de un 30% del valor total. Creyendo en lo que me decía y encontrándome con muchos problemas financieros, acepté esa propuesta y arreglé el encuentro para el día siguiente en Capital. La transacción se produjo, y regresé contento con la venta, pero al abrir mi correo -tardíamente, reitero- me encuentro con su mail, lo que me lleva a revisar los mensajes que había recibido de Mercado Libre, allí recién me entero que había varios ganadores en las subastas, usted entre ellos, por un valor mucho más elevado del que me mintió este CORSARIO, que encima me sacó descuento y todo. Algunos usuarios (en preguntas al vendedor) me habían advertido antes de una posible maniobra, ya que resultaba curioso que este CORSARIO ofertara en todas. Incluso pregunté esto a Mercado Libre, pero recibí una respuesta absolutamente inespecífica. Calculé, entonces, que este Sr. una vez obtenido mis datos se apuró en ganarles de mano a los demás, ya que como me habían advertido es un revendedor. Revisando su reputación, corroboro eso, que es el típico revendedor abusivo de los genuinos coleccionistas como Ud. y yo y que además ha tenido problemas con muchos usuarios. Vive en Villa Lugano. No veo forma de sancionarlo en Mercado Libre, ya que su compra la realizó, no lo puedo calificar negativamente. Por otra parte, he notado muy poco interés del sitio en solucionar estas cosas. Yo me hago cargo de, debido a la urgencia económica, no haber corroborado los datos, por lo que le pido mil disculpas. Además está Ud. en todo su derecho de calificarme negativamente. Tenga absoluta seguridad que yo no haré calificación de Ud., le doy mi palabra. O si lo prefiere, lo calificaré de manera positiva. Pero si Ud. llegara a entender esta situación le propongo, como lo haré con los demás damnificados, que boicoteemos a esta persona inescrupulosa ofertando con nicks falsos en sus artículos, o de cualquier manera que se nos ocurra. Reiterando mis disculpas, y a la espera de su respuesta, lo saluda atentamente. Elio Coradino Vélez.
Era lógico que se desconfiase de semejante embrollo, y de un viejo tan inexperto en las ventas y tan hábil para proponer operar con nicks falsos. Sin embargo otro comprador creyó todo a pie juntillas, al punto que respondió a ELCOVE: Estimado Elio, lamentablemente estas cosas ya no pueden revertirse. Le propongo calificarnos neutralmente, y damos como motivo simplemente que hubo problemas por no poder coordinar a tiempo la operación por una mudanza de usted, está de acuerdo? O bien ponemos que fue estafado por un usuario. En fin, lo único que queda como positivo es que ya usted le conoce la cara y no le va a vender más. Lamentablemente esas revistas tan preciadas y que crean tanta ilusión y alegría fueron a parar a manos de un estafador.