Las Crónicas de Melek Hoffmann Ii: El círculo del rayo azul

Catorce: ¡Eres Una Egoísta!

En ese momento Melek y los dos jóvenes miran al abogado, a su hermano mayor Klaus y a Julide que esta preocupada y con mucha curiosidad y Melek dice:

—No sé cómo explicarlo todo — dice ella intentando de procesar la información que acaba de ver por sus propios ojos, se siente mareada y muy cansada

—Es que.. — dice Azra y se queda en silencio

—Quisieron matar a Melek..  — suelta Christian sin tapujos y los tres se quedan mirando a Melek muy preocupados

—¿QUÉ? — exclama Klaus con asombro

—¿QUÉ? ¿POR QUÉ? —exclama Julide que se cubre la boca con sus manos y ella está muy preocupada

—No lo sabemos — dice Azra y en ese momento el abogado se da cuenta que le sale sangra el brazo a Melek y dice:

—¿Por qué te sangra el brazo joven Melek? — exclama el abogado y Melek recién

—¿Qué? — exclama la muchacha y al ver que su  brazo izquierdo esta sangrando, comienza a sentir los efectos del dolor ya que la adrenalina le impide darse cuenta que le había rozado una bala en su brazo. Melek se toca con sus manos la herida y ve en sus dedos la sangre que surge, en la mente de Melek comienza a funcionar de forma muy rápida e intenta de procesar el flujo de información. Comienza a sentirse mal, su vista está nublada, el aire es cada vez más pesado; ella sabe que va a sufrir una crisis de pánico y con sus brazos aparta a Klaus y a Christian, sus manos se agitan muy nerviosa, esto preocupa a las personas de su alrededor, el primero al estar a su lado es su hermano Klaus y con gran esfuerzo se toca el pecho y dice:

—No.. no — dice Melek que parece que tuviera una crisis de asma en vez de una crisis de pánico

—¿Qué te ocurre, hermanita? — pregunta Klaus que la sostiene desde el hombro

—No.. no.. no  puedo respirar.. ar.. ar  — dice Melek que cada vez tiene la mirada más nublada y finalmente pierde el conocimiento, Klaus siente el peso muerto de su hermana y se agacha junto con el cuerpo desmayado de Melek 

—¿Melek? — dice Klaus que le toca el rostro, y el resto se acerca a ella muy preocupados — abran paso por favor

—Melek — dice Azra muy preocupada — ¿Qué te pasa por el amor de Dios? — exclama muy preocupada

—Por el amor de Dios — dice Klaus, su hermano la lleva a la habitación de sus padres y allí Azra, Christian, el abogado y Klaus están al lado ella muy preocupado. En ese momento ocurre algo inesperado para todos, Christian toma la mano de Melek de forma muy dulce y amorosa y todos quedan sorprendidos ante este acto y no pasa percibido, Christian no era una persona meramente emocional o que se deja llevar por ellas, sus emociones son algo equilibradas; ni él mismo entendía lo que está haciendo en esos momentos. Pero él sentía un deseo de estar al lado de ella y acompañarla en estos momentos, él no siente deseo sexual o atracción hacia ella o tener una relación de pareja, sino es algo diferente. Klaus no conoce a Christian y por lo poco que ha visto, le genera una gran confianza y también le hace recordar a alguien, esos ojos verdes oliva brillantes, esa mirada ya la había visto en algún lado o en esa persona.

Cuando Melek está inconsciente ella comienza a soñar que también está desmayada en un lugar diferente al habitual, era un lugar de color blanco y su piso esta extremadamente limpio que se puede ver su propio reflejo y de repente ve que alguien se acerca, era una niña de unos diez años de edad que va a su encuentro y Melek pregunta:

—Niña.. ¿Quién eres? — pregunta Melek un poco confundida al ver que se parece a ella cuando era niña

—¿Acaso no me reconoces? —exclama la pequeña niña

—Debería — dice Melek cada vez más desconcertada

—Soy tú.. o sea soy tu inconsciente — exclama la niña

—Espera.. ¿Qué dijiste? — dice Melek cada vez más desconcertada y sorprendida

—Lo que escuchaste soy tu representación de tu inconsciente y necesito que me escuches — exclama la pequeña Melek

—Esta bien.. te escucho — inquiere Melek

—Tienes que buscarlos — exclama la niña

—¿A quiénes tengo que buscar? — pregunta Melek

—Tú sabes a quienes tienes que buscar — dice la niña

—No.. en realidad no lo sé — exclama Melek

—Si.. lo sabes — dice la niña enojada y Melek la toma de sus brazos y la zangolotea

—¿Cómo carajos voy a saber a quiénes tengo que buscar? — exclama Melek enojada y la niña lo mira

—Lo sabes.. pero no lo recuerdas — confiesa la niña

—Entonces dime.. ¿Qué es lo que tengo que recordar? — la mira con enojo

—No tengo que decírtelo.. porque tienes que descubrirlo tú misma y cuando lo hagas vas a entender todo — mira la pequeña Melek y esta de repente desaparece y Melek ve todo oscuro. Esta mira por todos lados asustada y de repente despierta y ve a su hermano por el lado izquierdo y al otro lado esta Christian que la miraba fijamente. Klaus al darse cuenta que Melek está despierta se acerca a ella y dice:

—¿Estas bien, hermanita? — exclama su hermano muy preocupado que le toca sus manos y con su otra mano el rostro

—Si estoy bien — dice Melek y le quita la mano; luego mira a Christian que tiene los ojos muy abiertos, pero esta en silencio — Christian — lo llama y el muchacho responde

—Melek… ¿Se encuentra bien? —exclama el muchacho

—Si estoy bien — sonríe la muchacha y Klaus lo mira por algunos minutos y decide

—Christian.. — se dirige directamente al muchacho y este lo mira por algunos segundos

—¿Me puedes dejar solo con mi hermana? — exclama

—Si claro — dice el muchacho y sale de la habitación de forma muy silenciosa. Melek mira con severidad a su hermano y le dice:

—¿Tenías que ser grosero con Christian? — exclama Melek con severidad

—No es nada personal contra él — se dirige a su hermana — pero cuando estabas inconsciente comenzaste a susurrar cosas raras.. el hecho que aparentemente estabas discutiendo con alguien

—Soñé con algo raro — exclama Melek recordando

—¿Qué cosa? —pregunta



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En el texto hay: cienciaficcion, aventura, suspeso

Editado: 31.07.2023

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