Cap. 38 Se acercan

Cuando el aviso enviado a Eidel había sido escuchado, las respiraciones parecían haberse paralizado, pero eso solo fue cuestión de unos pocos segundos, porque enseguida Harry se había levantado y estaba a punto de comenzar a dar órdenes en el sentido de la protección de Inverness antes de marcharse, cuando otro aviso llegó ahora para Terry y de la misma naturaleza. De modo que, sin detenerse mucho más, los Aurores partieron, el asunto fue que, para sorpresa y horror de todos, los gemelos Prewet, los Stone, las Potter, Aydan, Altair, Arthur, Steffano y Anette, habían aparecido en el lugar del conflicto y se habían metido de lleno en él. Sin embargo, y como la mayoría de los padres de aquellas criaturas conocían las habilidades de sus hijos, si bien no dejaron de vigilarlos, eso no les restó efectividad en el ataque.

Anette y Cassandrea estaban causando verdaderos destrozos, mientras que Cassander, Altair y Ben habían despachado sin miramientos a todos los que se le ponían a tiro. Steffano sorprendió a su padre por lo preciso y letal de su ataque; las gemelas Potter estaban demostrando su herencia, porque eran tan sanguinarias como su abuelo Sirius, y Oriana prácticamente había electrocutado a más de media docena de individuos en unos pocos segundos. Arthur se había dedicado a proteger a sus abuelos y más que todo a su abuela Margaret, porque Edward Carmichael era bastante hábil con una varita.

No obstante, en un momento determinado, Lyra estaba siendo cercada y cuando Jason se deshizo de sus atacantes y corrió hacia donde estaba su mujer, casi se quedó paralizado al ver un enorme lobo que pasó por encima de Lyra y hundió sus filosos colmillos en la garganta de uno de los individuos que atacaba a Lyra, mientras que un halcón se precipitó en picado clavando sus garras con precisión en los ojos de otro, aparte de lo anterior, otro par de criaturas igualmente mortíferas habían aparecido de la nada, se trataba de un jaguar y de un tigre albino que atacaron con la misma ferocidad.

En otro lugar de la pelea, de pronto Sandy se vio aferrada por la cintura y vio que de la varita de otro encapuchado salía un rayo en su dirección, sin embargo, y de manera inexplicable, ya que era un tiro fácil, no impactó en su pecho, sino en la frente del individuo que la mantenía sujeta. Sandy no perdió el tiempo y estaba por atacar al sujeto cuando este desapareció, más como no tenía tiempo para preocuparse por eso siguió en lo suyo, pero como estaba herida, algo que no tardaron en notar sus atacantes, comenzaron a hacerlo con más furia cuando una pantera negra apareció a su lado y comenzó a destrozar a los individuos mientras ella evitaba que lo alcanzara ningún rayo. Sandy vio de nuevo al encapuchado que había intentado matarla, y supo que era él porque su túnica era completamente negra a diferencia de la de sus compañeros que eran grises, de modo que alzó su varita en aquella dirección, pero se detuvo porque notó algo muy extraño, aquel sujeto no parecía estar atacándolos a ellos, sino a su propia gente. Sin embargo, cuando se giró de nuevo hacia ella, Sandy levantó de nuevo su varita, pero el rayo fue desviado. La pantera que había estado socorriéndola saltó hacia el individuo, pero quedó paralizada. Sandy sintió que el mundo comenzaba a girar y su último pensamiento consciente fue para su padre. El sujeto de la capucha y túnica negra, se agachó, la examinó con rapidez y miró a los ojos de la pantera que seguía paralizada.

• Sácala de aquí  --  le ordenó  desapareciendo a continuación

No obstante, apenas él se estaba girando para desaparecer cuando Jason hizo acto de presencia al lado de su hija, y aunque alcanzó a ver el giro del hombre al desaparecer, no hizo nada por detenerlo ya que lo más importante para él era asegurarse del bienestar de Cassandrea.

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Sandy intentaba abrir los ojos, pero por algún motivo no podía hacerlo. Escuchaba voces preocupadas a su alrededor, pero tampoco lograba identificarlas.

• No te preocupes amor, va a estar bien y…  --  pero la voz se perdió en el vacío y la oscuridad

Más tarde, y aunque no tenía idea de cuánto tiempo había pasado, Sandy volvió a escuchar voces.

• Vayan a descansar, les prometo que cuando despierte…
• ¡Sandy!

Jason giró la cabeza al escuchar la exclamación de Cassander, Ben, Anette y Altair que era con quienes había estado discutiendo para que abandonasen la habitación.

• Bebé  --  dijo arrodillándose al lado de la cama  --  ¿Cómo te sientes?
• ¿Qué sucedió?  --  preguntó ella
• ¿Qué es lo último que recuerdas?  --  preguntó Jason mientras hacía un rápido examen para comprobar su estado
• El ataque en la casa de los Carmichael y a Ben…  -- en ese momento miró al chico y sus ojos se dilataron  --  ¡Estás herido!  --  exclamó intentando incorporarse, pero tanto su padre como él se lo impidieron
• No, no lo estoy  --  la tranquilizó Ben
• Pero yo vi…
• Créeme Sandy, estoy bien

Después de eso y habiendo comprobado que su hija estaba efectivamente mejor, Jason le permitió ponerse de pie, y aunque Lyra confiaba ciegamente en él, no estaba muy segura que fuese buena idea, pero no discutió.

Cuando bajaron, todos se sintieron muy aliviados, lo mismo que ella al ver al matrimonio Carmichael bien, y giró la vista buscando a Terry y lo vio abrazando a Victorie, de modo que pensó lo peor.

• No te preocupes bebé, los padres de Terry están bien --  le dijo Jason