Las Ruinas de Cassandrea

Cap. 112 Reacciones

 

El opresivo silencio que se había cernido sobre los presentes fue roto por el desgarrador grito de Oriana, pero daba la impresión de que nadie lo hubiese escuchado. Una vez que Sirius entendió la magnitud de lo sucedido, se llevó una mano al pecho donde el dolor crecía de forma acelerada y otra a la cabeza donde se repetían como en un eco interminable las palabras del desdichado al que había matado más temprano: “…Perderás aquello que más amas y mi señor va a disfrutar mucho con su sufrimiento mientras acaba con su vida… Disfruta tu infierno, Black” y a continuación Sirius cayó sin sentido.

Jason no estaba en mejor situación, y cuando Lyra se volvió hacia él posiblemente buscando apoyo, se encontró con que, en la oscuridad de la noche, el iris de sus ojos parecía haber desaparecido, pues aquella especial característica que poseía demostraba que en aquel momento su dolor era tan intenso que sus ojos ya no eran ni siquiera azul claro, sino que prácticamente no poseían color alguno y a continuación siguió a Sirius en su viaje hacia la nada.

Bill era el tercer sujeto en peor situación, ya que si bien todos sabían que poseía unos nervios de acero y un supremo control sobre sus emociones, también sabían que su lado más vulnerable eran sus hijos y sus nietos, de manera que en esta ocasión no le fue humanamente posible ocultar su dolor y la tremenda angustia que estaba sintiendo, pues al hecho de la desaparición de su nieto había que sumarle los recuerdos de lo sucedido con Louis hacía varios años atrás, y la imagen de cómo lo habían encontrado lo golpeó con saña.

De los miembros de la generación siguiente, los que estaban peor eran Tyler lógicamente, Anthar y James, pero los dos últimos expresaron su dolor y sobre todo su ira de la forma más violenta posible, ya que, aunque Anthar no se movió, los árboles en varios metros a la redonda fueron rápidamente consumidos por las furiosas llamas que generó. Y en el caso de James, después de lanzar un enfurecido grito de impotencia, desató una violenta tormenta eléctrica que demoraría mucho en cesar.

Con relación a los más jóvenes, prácticamente y fuera del grito que había lanzado Oriana, no hubo reacción alguna, pues todos parecían en estado de shock. Cabe suponer que después de toda la angustia que habían estado viviendo primero con la desaparición de Cassandrea, después con la batalla en la que se habían visto inmersos y la desesperación por las víctimas, la terrible realidad a la que ahora se enfrentaban parecía haberlos invalidado emocionalmente.

En medio de este caótico estado de cosas, fue Louis quien conservó la fría calma y canalizó su ira tomando las riendas de la situación.

  • ¡Tío!  --  dijo sacudiendo a Harry que se encontraba en franco estado de desesperación y como de costumbre el peso de la culpa casi no lo dejaba respirar

No obstante, como no logró una respuesta inmediata, comenzó a tomar decisiones y a dar órdenes. Contrario a lo que se habría podido esperar e incluso pensar, las chicas si bien con toda seguridad estaban destrozadas, especialmente Dominique y Lyra, fueron las que sirvieron de apoyo a Louis y acataron sus órdenes como si eso fuese cosa de todos los días.

Lyra y Grace se encargaron de llevar a Sirius y a Jason al hospital; Tyler después de ser sacudido por Louis, marchó también al hospital junto con Albus, con el fin de dar la terrible noticia a los Stone. Joseph y Jeremy se encargaron de que los pocos sobrevivientes fuesen trasladados a Azkaban; Terry y David Wiler se ocuparon de llevar al hospital a los poquísimos heridos de entre los hombres de Jensy; Alexander y Justin debido a que habían pasado más tiempo con los chicos en los últimos meses, fueron encargados por Louis para que los reunieran y no los perdieran de vista ni un solo minuto. Rowena que extrañamente no se había puesto histérica, de quien se hizo cargo fue de su hija Oriana que sí lo estaba, mientras que Lily y Dànae hacían denodados esfuerzos por tranquilizar a James y a Anthar.

Después de organizar todo esto, Louis se había dirigido al interior del castillo y luego de una rápida evaluación de los daños, dio órdenes a los Aurores que se avocasen a las reparaciones con la mayor celeridad posible, y como ninguno de ellos iba a ponerse a discutir con aquel individuo, se organizaron con rapidez y comenzaron a trabajar, mientras que las chicas del grupo eran comisionadas para conducir a los asustados alumnos de los primeros años a sus respectivas casas.

Aunque el castillo había sufrido considerables daños estructurales, éstos se habían concentrado en el comedor, el vestíbulo y las escaleras principales, ya que no los habían dejado avanzar más allá.

Louis pasó por la enfermería y madame Pomfrey le informó que la mayoría de los heridos estaba en vías de recuperación o completamente bien gracias al gran trabajo que habían estado haciendo Jason, Altair y Ben. Esto hizo que Louis sintiese una dolorosa punzada al escucharla mencionar a los chicos, pero no podía darse el lujo de dejarse abatir. Comprobó que Daviana que había sido la última en ser atendida por Jason, si bien aun estaba inconciente, estaba bien, así que ordenó fuese trasladada a San Mungo junto con el resto de los Aurores que habían resultado heridos. Tuvo la intención de acercarse a Hermione, pero Remus estaba con ella y ambos lloraban en silencio, porque Remus acababa de darle las tristes noticias a su mujer.

Louis abandonó la enfermería y se trasladó a la sala de los menesteres donde ya estaban reunidos todos los chicos.

  • Tenemos problemas  --  le dijo Alexander, y como Louis se limitó a mirarlo agregó  --  A Becky aun no le hemos dicho lo de Altair y Ben
  • ¿Por qué?
  • Mira  --  le dijo él señalando hacia donde estaba su sobrina




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