[Ocho]

Bienvenido-Laura Pausini

Desahogo
[8]

MARIAGRAZIA

Estoy muy sorprendida de ver a Ethan en la puerta de mi casa y más en este estado, pero después pensaré en eso ahora tengo que calmarlo un poco, temo que si no lo hago pueda darle una criáis de ansiedad.

Después de tranquilizarlo un poco me hago a un lado para dejarlo pasar, el entra y se sienta en el sofá

—Te prepararé un té para que te calmes un poco.

El solo asiente con la cabeza, aún parece que no está del todo consciente.

Voy a la cocina, prendo la estufa y pongo a calentar la tetera para el té, lo pongo en una taza y voy hacia el salón, le entregó la  bebida  y me siento junto a él.

─¿Qué pasa Ethan? —pregunto— ¿porque estás así? ¿Qué ocurre?

Veo que el traga saliva y se pasa la mano por el cabello, le doy una mirada, tratando de transmitirle seguridad.

—Lo que pasa es que yo tengo una historia, un pasado del que no me siento muy orgulloso y siento que debo decirlo porque si no terminará por asfixiarme y carcomerme por dentro y ya no puedo seguir con esto.

—Me estás preocupando —replico— ¿qué es eso que cargas y te lastima tanto?

Veo que una vez más traga saliva y exhala, como tratando de encontrar valor, se voltea para estar frente a frente, pero en ningún momento deja de mirarme, la tensión se siente en el aire, se puede cortar con un cuchillo,después de unos minutos que me parecieron eternos por fin decide hablar.

Yo nací en Japón —comienza— en Niigata para ser más exactos, pero cuando tenía cinco años tuve que venir a Chicago porque la situación no era muy buena 
—hace una pausa y continúa— tengo 3 hermanas, Verónica, Lucía y Jade, pero ahora solo me quedan dos porque Jade murió.

Mi boca se abre formando una O, luego la cierro, incapaz de articular palabra y suelto un suspiro.

—Te lo explicaré  —dice al notar mi reacción— Jade era teniente como tú y como yo, ella amaba su trabajo, era una de las  mejores, un día tuvo que irse a una misión de rescate a Siria y por azares del destino esa vez estábamos trabajando juntos, el caso es que teníamos que trasladar a un paciente en estado grave pero solo había disponible un helicóptero y solo entraban dos personas así que le dije a Jade que subiera ella, que yo la alcanzaría después, entonces ella se fue —su voz comienza a quebrarse. Pasó un día en el que no supe nada de ella, a la mañana  siguiente, nos avisaron por radio de un accidente aéreo —sus ojos están rojos tratando de contener las lágrimas— cuando llegaron los accidentados, la miré, y supe que era ella, junto con el paciente.

—Mi hermanita había muerto, la luz de mi vida se había ido y ya no estaría conmigo.  
Desde ese día desarrolle estrés postraumático, desde entonces no duermo bien —empieza a llorar con fuerza, y las lágrimas mojaban sus mejillas sin detenerse.La culpa me carcome por dentro, ¿te das cuenta? Si yo no la hubiera hecho subir a ese helicóptero ella aún estaría conmigo, no sé cómo superar esto, tengo pesadillas todas las noches, no recuerdo cuándo fue la última vez que logré dormir una noche completa, sin haberme despertado exaltado y sudando, no sé cómo librarme de esto. No aguanto más.

Tomo un respiro tratando de procesar todo esto

—Ethan, primero que nada, me conmueve mucho tu historia y te doy las gracias por tener la confianza de contarme todo esto, escucha, creo que el destino y los planes de Dios son perfectos, e inclusive si ella no hubiera subido al helicóptero, algo más habría pasado, porque su tiempo se había acabado y ante eso no podíamos hacer nada, era joven, sí, pero murió feliz haciendo lo que amaba.

—En el poco tiempo que llevo conociéndote he visto la gran persona que eres, pero tratas de esconderlo detrás de esa coraza de hombre fuerte e invencible, debes quedarte con los buenos momentos que pasaste con ella, las sonrisas que compartieron, los pequeños detalles que son los que importan realmente, sé que donde quiera que ella esté, quisiera verte feliz.

—Llorar, gritar o maldecir, está bien a veces para sacar los sentimientos negativos, y si algún día quieres hacerlo, aquí tienes a alguien para acompañarte, pero no te lo guardes, ni trates de evitarlo eso solo te hará mal,  te volverás amargando, retraído y lleno de odio y resentimiento,no digo que será fácil superarlo, pero veras que pronto podrás recordarla sin culpa ni dolor, aquí estaré si necesitas algún consejo un abrazo o lo que sea, conmigo tienes a una confidente —finalizo.

Se queda un momento en silencio, procesando mis palabras y después exhala con fuerza, como quitándose un peso de encima y me abraza seguido de eso.

Luego de que estuviera más tranquilo se va, y yo por fin me acuesto a dormir después de un día lleno de emociones fuertes.

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