Latidos de amor

[Quince]

Madre tierra-Chayanne

Blanco y negro
[15]

MARIAGRAZIA

Estoy tan emocionada faltan solo unos días para que mi familia llegue desde Italia a visitarme, se supone que llegarían hoy, pero me han llamado para decirme que hubo algunos problemas con su vuelo y retrasarían su llegada hasta mañana. Los he extrañado muchísimo. Creo que lo más difícil de vivir o trabajar en otro país es eso:  Separarte de tu familia

No puedo quejarme, no todo ha sido malo, aquí he hecho grandes amigos, he vivido nuevas aventuras y he conocido a una persona muy especial que me complementa en todos los sentidos.

Ethan, él es esa persona, que aunque cuando lo conocí su alma estaba sumergida en las sombras por una pérdida y un pasado tormentoso, gracias a todo mi cariño y a todo su empeño y ganas de luchar a sabido sobrellevarlo y con el paso de los días incluso me atrevo a decir que lo ha superado, es un hombre con un gran corazón, solo que lo escondía detrás de esa coraza de invencibilidad; hemos decidido darnos una oportunidad y solo dejarnos llevar por lo que siente nuestro corazón, y yo no podría estar más feliz por eso, hemos tenido altibajos como cualquier pareja pero el amor es más fuerte y es lo más importante.

Pero bueno antes de poder concentrarme en la semana libre que nos darán por las festividades y vacaciones, debo dejar algunas cosas listas en el hospital como papeleo y algunas indicaciones para mis pacientes, así que ahora mismo estoy detrás de un escritorio haciendo lo antes mencionado, estoy tan concentrada que casi me caigo de la silla al escuchar el sonido de mi localizador el mensaje es el siguiente "Dra. Barone presentarse inmediatamente a sala de reuniones"

!Qué extraño! ¿Sala de reuniones? Para quitarme la duda voy hacia allí, en el camino me encuentro a Ernesto y a Nina

—¿A ustedes también los convocaron a la reunión?

—Eso parece

Al llegar a la sala de conferencias las luces están apagadas, esto cada vez está más raro y no hay nadie aquí.

Hasta que escuchamos las voces de Arizona, Ethan, Connor y Natalie.

Ethan se pone detrás de mí y tapa mis ojos con sus manos, lo mismo hace Natalie con Ernesto y Connor con Nina

—¿Qué es todo esto? ¿Porque tanto misterio? —replica Nina con impaciencia.

—Tranquilos es una sorpresa para ustedes como agradecimiento por todo lo que hemos pasado juntos —responde Arizona.

—Encenderemos las luces y cuando cuente hasta tres podrán ver ¿De acuerdo?

Uno.... dos...... —cuenta Natalie— TRES!!! ¡¡¡¡Háganlo ya!!!!

¡Cuando por fin recupero mi visión no puedo creer lo que tengo enfrente, están mis hermanos Piero y Francesco mi mamá Eleonora, mi papá Gaetano y mi abuelo Francesco, sin pensarlo dos veces corro y me abalanzó sobre ellos y los abrazó lo más fuerte que puedo! ¡NO PUEDO CREERLO! Cuánto extrañaba a mi familia después de seis meses sin vernos. Jamás habíamos pasado tanto tiempo separados, así de unida es nuestra familia.

Lo mismo hace Nina con su hermano Ignazio, su padre Vito y su mamá Caterina y e igual Ernesto con Gianluca, Ercole y Leonora respectivamente.

—Gracias por hacer esto —digo a todos los presentes. No tengo palabras,en verdad significa mucho para mí que hicieran esto.

—Solo es una forma de agradecerles por su amistad en este tiempo.

—Podríamos ir a cenar el viernes antes de irnos, todos ustedes están invitados

Buena idea Geatano —secunda Nina.

Entonces el viernes no hagan planes, tenemos una cena mañana—concluye Ernesto.

Quisiéramos charlar más tiempo, pero los localizadores suenan indicando una nueva emergencia, antes de salir hablo con mi hermano Piero.

Yo cocinaré esta noche, nos vemos más tarde en mi casa con papá, mamá y Franz 
—comento.

! Yay! Como extrañaba esto, toda mi familia reunida —da brinquitos como un niño pequeño. Te extrañe mucho sorella
—me da un abrazo.

Yo también te extrañé fratello, nos vemos más tarde, tengo que seguir trabajando 
—le doy una última sonrisa y salgo por la puerta.

Después de ese emotivo momento hay que volver a la realidad, al trabajo así que vamos a la entrada y los paramédicos vienen llegando con una víctima masculina de un accidente de auto.

—¿Que sabemos de él?

—Según su identificación se llama Jorge Ramos y tiene 31 años, venía conduciendo cuando un camión los impacto de frente, su esposa e hija venían detrás de nosotros en otra ambulancia, deben estar por llegar.

—Muy bien vamos a la sala de trauma tenemos que movernos rápido, no tenemos mucho tiempo. Transferimos a mi cuenta 1,2,3.

—De acuerdo muchachos nosotros nos encargamos desde aquí, gracias por su ayuda

—Ok vamos a comenzar con exámenes de sangre, orina y toxicológicos, radiografía de pecho y pelvis y llaman a radiología para una TAC de cabeza llámenme cuando los tengan listos.

—Tara —la enfermera— busca entre sus pertenencias y ve si puedes localizar a cualquier otro familiar, yo iré a esperar a que llegue la otra ambulancia donde vienen su hija y esposa.

Salgo a la zona de ambulancias y cinco minutos después llegaron su esposa y su hija

—¿Qué tenemos? —preguntó al abrir la puerta.

—Jessica Ramos, 28 años, es la esposa del primer paciente, lesiones en cabeza y cuello iba en el asiento del copiloto con el cinturón de seguridad, pero recibió la mayor parte del impacto, estaba estable cuando la recogimos, pero sufrió un paro y tenemos 6 minutos haciendo RCP le dimos epinefrina, pero no hay respuesta 
—informa el paramédico—

—Muy bien ayúdenme a bajarla y continuemos con la RCP.

—Dame el desfibrilador y carguen a 200.

¡DESCARGA! —grito— le damos la descarga, pero sigue sin responder.



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En el texto hay: musica, amor, romanc

Editado: 12.07.2020

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