Cap. 5 Desaparecidos

Después de la hora de almuerzo, la profesora McGonagall estaba en su despacho en compañía de Caroline, la nueva profesora de Estudios Muggles, cuando le llegó el urgente mensaje de Bill.

• Profesora, necesitamos que reúna a todos nuestros hijos y al de Joseph Morgan y los ponga bajo la vigilancia de Neville, vamos para allá

Caroline se había quedado mirando a la directora con extrañeza, porque ésta se había interrumpido a mitad de una frase y luego se había puesto violentamente de pie. Minerva conocía bien a aquellos individuos y un mensaje de esa naturaleza, solo podía obedecer a algún asunto grave.

• ¿Profesora?  --  estaba diciendo Caroline que se había levantado también
• Disculpe, pero esta conversación tendrá que esperar, profesora
• ¿Hay algún problema? ¿Puedo ayudarla?

Minerva lo pensó un momento y asintió.

• Necesitamos ubicar a todos los miembros de las familias Weasley, Potter, Black, a la señorita Lupin, al señor Morgan y traerlos aquí de inmediato  --  le dijo mientras caminaba hacia la puerta
• Yo sé exactamente dónde están, puedo ir por ellos  --  la directora se detuvo y la miró
• Bien, vaya por ellos y tráigalos aquí
• ¿Debo decirles algo?
• No, solo dígales que la acompañen

La mujer salió a toda prisa, mientras Minerva enviaba un mensaje a Neville, pero él, que había estado conversando con la profesora Sprout, ya había recibido el mensaje de Bill y se dirigía hacia la Sala Común. Sin embargo, cuando estaba a punto de llegar, recordó que los chicos normalmente después de almorzar se reunían a orillas del Lago, de modo que cambió rápidamente de dirección.

Bill y Joseph llegaron al despacho de McGonagall apenas unos minutos antes que Sirius y Remus, que a diferencia de Bill, no se había molestado en anunciar su presencia, aunque tuvieron la delicadeza de no forzar su entrada y llegar a través de la chimenea.

• ¿Y cómo están Harry y Hermione?  --  estaba preguntando Minerva en el momento que ellos salían de la chimenea.
• Mal  -- contestó Sirius  y miró a los Aurores
• Ya los están buscando  --  dijo Bill interpretando correctamente la mirada de Sirius

Sin embargo, él no era de los que podía sentarse a esperar, de modo que se encaminó hacia la puerta justo en el momento en el que llegaba un mensaje de Neville

• Minerva tenemos problemas, ordena una búsqueda general, voy para allá

Aquello no les decía mucho, pero todas las señales de alarma se encendieron en los cerebros de los Aurores. Bill sujetó a Sirius y Joseph a Remus, la mente rápida de Bill le indicó que una búsqueda de esa naturaleza y teniendo la prisa que tenían, no podrían efectuarla ellos solos y de forma desordenada.

• ¡Suéltame!
• ¡Sirius escúchame!  --  exclamó él  --  Necesitamos organizarnos
• ¿Organizarnos? ¡Lo que necesitamos es encontrarlos!
• ¡Profesora, selle las puertas de acceso al Colegio!  --  estaba diciendo Joseph

Minerva que inicialmente se había quedado estupefacta, primero por el mensaje de Neville y segundo por el pleito entre Bill y Sirius, se puso rápidamente en movimiento y abandonó el despacho. Remus había entendido el razonamiento de Bill y ahora los estaba ayudando a tranquilizar a Sirius, mientras Bill enviaba una orden perentoria a sus hombres.

El Departamento de Aurores siempre había estado integrado por hombres bien entrenados, pero desde que Harry asumiera la jefatura, lo había reestructurado y ahora no solo seguían contando con los magos y brujas más capaces, sino que estaban organizados por equipos con distintos objetivos y una alta efectividad. De modo que apenas unos segundos después que Bill había enviado su orden, comenzaron a llegar.

Finalmente, Sirius había entrado en razón y los años de entrenamiento salieron a flote, organizaron con rapidez a sus hombres y siendo que Remus y él, eran los que mejor conocían el Castillo, lo dividieron por secciones y enviaron a los grupos a zonas específicas de modo de cubrir todas las áreas del Colegio en el menor tiempo posible. Mientras otros cuatro grupos se encargaban de reunir a los alumnos de todas las casas, confinarlos a sus Salas Comunes y velar por su seguridad.

Cuando Neville llegó, ya la operación estaba en marcha, pero les extrañó verlo llegar en compañía de los chicos, sin embargo, un rápido vistazo les indicó el motivo de la alarma. No estaban completos.

• ¡Papá!  --  dijeron algunas voces  --  ¿Qué sucede?  --  se adelantó Tyler
• ¿Por qué no están los demás con ustedes?  --  preguntó Sirius intentando disimular su angustia
• La profesora Doherty fue por ellos cuando estábamos en el jardín y dijo que la directora…

Pero el chico se interrumpió al ver que las miradas de ellos se cruzaban y la expresión de decidida alarma que se dibujó en sus rostros. Minerva venía entrando en aquel momento, pero cualquier cosa que pensara decir, quedó interrumpida al ver a los niños.

• ¿Dónde está, papá?  --  estaba preguntando Lily
• En este momento…  --  comenzó Remus
• No nos mientan  --  lo interrumpió Albus  --  Todo esto obedece a algo serio, de no ser así no estarían aquí, y ciertamente mi padre habría sido el primero en llegar. Así que no lo intentes tío, y dinos ahora mismo lo que está sucediendo.