Capítulo 43

La sala principal se llena de gritos de horror. Mary sin saber cómo no ha podido ver aquel taburete en medio, se le cayó el té hirviendo al pecho de Alice, quien chilla de dolor sin esperarlo. El agua está prácticamente quemado sobre su piel suave y ligera. Llegan criadas y Gerard seguido de Lourdes. Todos preocupados menos Mary que no siente nada, ella se lo ha buscado, piensa la joven. Llega un guardia que acompaña a Alice.

_Yo... lo lamento- suelta así Mary.

_¡¡¡Eres una estupida !!!- se levanta furiosa y le da una bofetada muy grande, tanto que le deja marca - ¡¡¡Eres una bruta!!! ¡¡¿Como te atreves?!!

_Tu te lo has buscado - dice Mary entre dientes así nadie la oye.

_¡¡¿Como!!? - pero esta la escuchó. Gerad se acerca para separarlas y evitar una pelea - No, no. No me quedo así. ¡¡Me quema!!- le salen lágrimas.

_¡Le traeré otro vestido señorita! - corre Lourdes preocupada.

_¡¡No permitiré que pases así!! - se le acerca  a la cara para advertir - No voy a rebajarme a pelearme con los cerdos. Vas a tener tu castigo- llega Lourdes con un vestido nuevo de la señora de la casa. Esta ayuda rápidamente a quitarle el vestido quemado, se queja. Hay una rojez y se pone histérica- ¡¡Tienes suerte de que no me haya quemado del todo maldita !! ¡¡Jeffrey!! ¡Quiero que le des cien latigazos por el castigo!

_Pero señorita no...- intenta meterse Gerard pero lo calla. Mary sigue sin responder a una emoción ni sentimiento, pero algo de preocupación sí, porque si llegan a ver que wue sus heridas sanan rápido, levantará sospechas.

_Gerard - dice preocupada sabiendo lo que va a pasar, el guardián de la chica de oro la coge por las manos.

_Tranquila, todo va a salir bien- la coge por última vez de la mano.

_¡¡Aqui no!! No quiero llenar el suelo de sangre. Llamad a todos para ver el espectáculo, será en la fachada, en medio de todo para observarlo todo.

Mary no tiene miedo, salvo preocupación. Acepta el castigo, pero también sabe que ella lo hizo adrede y lo que quiso, lo tuvo. La miró con asco. Nadie quiso decir nada. Pasados tres minutos, todos los empleados se encuentran en una línea recta para ver cómo Mary es machacada por los latigazos. Allí, en medio de toda la casa, fuera con el calor sofocante  que le hace caer gotas por la frente, con las manos atadas a la espalda y el vestido roto, abierto y su espalda desnuda y brillante. Alice sonriendo.

_¡Cuando quieras Jeffrey! - y así, comenzó por un latigazo.

Duele, quema, pero no dice ni una sola palabra. Mary resiste, así hasta los diez latigazos. Todos observan con dolor y lastima. Lourdes se echa a llorar a escondidas. Gerard está preocupado. Aguanta otros diez latigazos. Sangre comienza a bañar su vestido y gotas salpicando el suelo echo de tierra. Escuece mucho y lagrimas le caen por la cara pero no quiere decir nada. Ya al latigazo número veinticinco, no aguantó más. Comenzó a gritar. Alice está en su punto más alto.

_¡Así me gusta! ¡Que os quede claro a todos, que esto es lo que pasa cuando no hacéis bien vuestro trabajo! - suelta esta. Llevando la mitad, solo se oye guryar y llorar a Mary, que está llena de sangre y piel abierta, tanto que en algunos casos se le puede llegar a ver todo. Sus gritos resuenan por todo el bosque. De pronto llega corriendo Edward.

_¿¡¡Que ocurre aquí!!?

_¡¡Jeffrey no pares!! - y no para- ¡Es su castigo por quemarme! - el señor se pone una mano en la boca, ve como la chica sufre, medio muerta en el suelo.

_La vas a matar, para ya - él no puede hacer nada. Así es con los criados en esta situación.  No le gusta pero ese no es su castigo, sino el de Alice. Con setenta latigazos, Mary aparece casi inconsciente, ya no hay gritos - Alice, para por favor.

Rápido llega a salir del carro Ethan, sus ojos se abren completamente. Esta loco por ver que es lo que pasa. Su cara dsta llena de furia.

_¡¡¿¿Que pasa aquí??!! - su voz no es normal, sino más grave que nunca, Alice parece algo asustada y su padre preocupado, el joven ve que se trata de Mary, que esta tumbada casi muerta y coma la cara llorosa a no más. La mira triste y furioso- ¡¡Basta!! - Se dirige al guardián quien lo aparta de un golpe en la cara, luego se acerca a Alice - ¡¡¿¿De qué vas Alice??!!

_¡¡Me tiró el té hirviendo!! Se lo merece- lo dice sin remordimientos, Ethan la coge del brazo y la aprieta - Me haces daño - dice en voz baja.

_¡¡Esta no es tu casa, no tienes derecho a venir y a hacer esto!! ¡¡Es la última vez Alice!! ¡¡Largate, no quiero verte!! - muy cabreado, se dirige a Mary quien la ve a punto de explotar y la toca delicadamente para así cogerla en brazos, le quitó la atadura y la llevó a su habitación - ¡¡Lourdes!! - dijo para que le acompañe. Todos se quedaron mudos ante la actitud de Ethan, Alice se queda la peor, haciéndose la victima, cuando ha sido su culpa. El padre del chico la mira mal, y todos los empleados vuelven a la casa a las tareas en silencio.