Pasos a la soledad.

AMAR DELVEY

Corría de un lado a otro tratando de quitarle la gorra de Mate pero mis pasos no eran lo suficientemente rápidos a comparación de los de Liam.

Me detuve y golpee el suelo con mi pie—. Ya dame eso Liam —grite agotada—.Eso no es tuyo.

—Ni tuyo —me saco la lengua y siguió corriendo.

Suspire y lo seguí persiguiendo sin obtener resultados positivos.

—Ya déjalo Amar —me pidió Mate llegando a mi lado sin poder respirar.

—Pero eso es tuyo, no es justo —me queje tomando bocanadas de aire.

—No importa —se puso de cuclillas—.Esa solo es una gorra, tengo otras.

Me incline agarrando mis rodillas—.Liam siempre nos molesta —dije furiosa.

—¿Qué pasa cerdito? ¿Ya no puedes correr? —habló detrás de nosotros con una sonrisa malvada en su rostro.

—Liam dame eso —intente quitarselo nuevamente pero levantó su brazo para impedirlo.

—¿Y si no quiero? —me empujo.

—Oye déjala —le gritó Mate deteniendome para que no cayera.

—Le diré a tu mamá —amenace sin obtener ninguna reacción de él.

—Haz lo que quieras —se puso la gorra—.Mi madre no me hará nada al igual que ustedes —se acercó a nosotros—. Tu solo eres una niña tonta hija de una limpia baños —golpeo mi pecho con su dedo índice—.Y tú —se dirigió a Mate—.Solo eres un gordo bueno para nada —se rió y comenzó hacerle como un puerco.

—Y tú eres un burro —le respondí golpeando fuerte su rodilla—. No molestes a Mate —tome la gorra de su cabeza mientras brincaba en un pie sobando el lugar en donde había atinado mi golpe.

—Niña tonta —me gritó mientras caminaba agarrada de la mano con Mate.

—Eso lo hará enojar más —dijo Mate con un tono triste—.No quiero que te molesten.

—No importa mientras estemos juntos —le sonreí tratando de consolarlo.

Luego del incidente con Liam surgieron más, él siempre nos había molestado desde pequeños y algo me decía que lo seguiría haciendo de grande, esa solo fue una de las situaciones en las que tuve el valor suficiente para defenderme, una nueva Amar surgió ese día y de cierta forma me gustaba pero no podía mostrarla ya que también me daba miedo.

Cuando dejábamos a Liam, a los profesores, a los papás de Mate, a todos los alumnos de lado y solo nos enfocamos en nosotros todo era tan divertido, Mate siempre le pedía a su cocinera que le prepara comida para mi, con él nunca tenía hambre, siempre tenía algo en su mochila para darme, o eran galletas, o era pastel, a veces era pollo otras era ensalada, nos encantaba comer, a mi me encantaba verlo a él comiendo, sus cachetitos se hacían más regordetes y su pancita que tanto me gustaba se hacía más grande, yo lo quería de esa forma.

Poco a poco nuestra etapa de primaria terminó dejando atrás a los niños dándole paso a los preadolescentes. Nuestro baile de graduación primaria fue muy divertido, yo use un vestido largo y me hice un extraño peinado que no me gusto mucho, Mate usó un lindo traje con corbata en el que se veía muy lindo, aunque él no pensaba de la misma forma, cuando llegamos Liam como siempre soltó uno de sus tontos comentarios provocando una mirada de tristeza en su rostro. A pesar de eso yo siempre hice lo posible por animarlo y hacerlo sonreír.

Unos día antes de las vacaciones Mate me había informado que sus padres lo habían inscrito a un campamento de verano solo para niños, al principio no sabía cómo sentirme porque habíamos pasado los últimos seis años juntos en nuestras vacaciones y está sería la primera que no sería así, pero aún así lo acepte ¿Qué podía hacer? más que extrañarlo mucho y esperar por él. Cuando se fue iba al parque yo sola y aunque era un lugar lindo sin Mate se sentía tan diferente, me había acostumbrado tanto a él. 

Al ver lo aburrida que lo pasaba mamá decidió hacer lo mismo, busco un lindo campamento para niñas al cual enviar me y aunque yo quería ir al mismo de Mate tuve que aceptar que no se podía ya que él estaba en uno solo para niños. Temeroso accedí a ir a un lugar nuevo en donde no conocía a nadie, según mi mamá ese era el punto, hacer amigos nuevos y experimentar nuevas aventuras para recordar en el futuro.

El campamento era un lugar increíble, era en el bosque donde habían muchos árboles, a mi me encantaban los árboles, había un lago realmente hermoso, las cabañas eran muy lindas, pero lo más fascinante de mi estancia en el campamento fue una de mi compañera de litera, su nombre era Romina y era una niña fuera de este mundo, su forma de vestir, de actuar, de hablar y pensar, todo era realmente interesante. Ella decía que no venía a ese lugar para formar amistades ya que realmente no existían, las personas solo se te acercaban para obtener algo de ti, ya sea dinero, compañia, bienestar sentimental ya que no todos tenían la capacidad de estar solos. Eso era difícil de entender para mi.

Sin embargo cuando había algún tipo de actividad ella siempre era la mejor, siempre trataba de ser perfecta pero no presumía de eso. Una noche me pregunto sobre mi futuro y ninguna respuesta salió de mi boca, no sabía que sería de mi futuro, solo tenía doce años que sabía yo, pero ella no, ella tenía toda su vida planeada, decía que sería una de las mejores en la secundaría, que las universidades se pelearían por tenerla y que cuando finalmente se graduara sería la presidenta de la compañía de su padre. Me dijo que si mis notas llegaban a ser un poco aceptables tal vez me podría dar empleo como su asistente, eso me alegro mucho aunque no tenía idea de lo que era ser una asistente de presidente.

Con Romina aprendí muchas cosas que tal vez no lo habría hecho con nadie, me enseño que cuando quisiera algo tenía que esforzarme para obtenerlo, que debía buscar algo que realmente me apasionara, también en que debía dejar de ser tan estúpidamente inocente que el mundo destrozaba a las personas como yo. No siempre estuve de acuerdo con sus palabras, si sabía que debía esforzarme, sabía que tenía que buscar el motivo de mi vida, sabía que tenía que crecer y madurar pero no estaba de acuerdo con lo de las amistades, la amistad no era lo que ella pensaba, un amigo era alguien que estaría siempre a tu lado, como un hermano, confidente, consejero, alguien que le dé sentido a tu vida, alguien como Mate.