Lo último de nosotros

Capítulo 5

Voy a paso medio lento mientras cruzo la entrada de la universidad, aún sigo sin quitarme de la mente lo que paso en el sanitario del departamento, durante el trayecto en el autobús hacia el campus tuve tiempo de sobra para caer en la cuenta de que esa "otra yo" es la que he soñado anteriormente, Claire, la que corría de la mano de un chico al que atropellaron en mí sueño.

Absorta en el camino no anticipo el momento en el que me cubren los ojos, pego un saltito por el susto y escucho su inconfundible e incluso atractiva risa.

—Soy yo Nin —dice cerca de mi oído.

Ian.

—Me asustaste—articulo un poco más calmada.

—¿Confías en mí? —pregunta aun con sus manos sobre mis ojos.

—Sabes que si —contesto rápidamente, pero... ¿confiaba en él?

—Bien daremos 5 pasos antes de que llegar al primer escalón, contaremos juntos ¿lista? —lo que él quería era guiarme con los ojos cubiertos, ¡ay madre! Por favor que no empiece a sudar.

Lo seguí, eran pocas ocasiones en las que yo podía estar cerca de Ian, así que no desaprovecharía la oportunidad.

Damos los 5 pasos que él dijo de forma lenta. Y mientras contamos reímos como tontos. Pasa de cubrir mis ojos con las dos manos a una sola, para rodearme con la libre por la cintura. Siento como me vuelvo gelatina, los nervios me revolotean en el estómago, me agradaba la sensación de tenerlo cerca de mí.

Ojalá Leen no vea esto —pienso.

Bajamos los 4 escalones juntos, el aún me sostiene, así que me armo de valor y pongo mi mano sobre la suya en mi cintura, rogando a la vida que no me esté sudando.

—Es el ultimo Nin —suelta sobre mi oído, su aliento cálido hace revolotear más a los animalejos en mi estómago —. Ya está —el toque de sus manos me abandona, se coloca frente a mí y me mira —, nos vemos después —me regala esa sonrisa que tanto me gusta y antes de seguir su camino se acerca a mi mejilla y me planta un beso. Da dos pasos atrás y desvía su mirada de mi y pronto levanta una mano para saludar a su amigo Ben quien se acerca a pasos relajados por a un lado de mi y cuando se encuentran a la misma distancia, Ian se da la vuelta y continúa caminando con Ben.

Trato de lucir tranquila, sereno mi expresión y relajo un poco mi cuerpo, aunque en mi mente este saltando de la emoción y sonriendo como estúpida.

Soy patética.

Así soy yo, de esa manera me conformo con tener a Ian de amigo, con la esperanza de que en el día rosara mi mano, jugara con mi cabello o me saludara con un beso en la mejilla, solo él hacía sentir cada rose tan íntimo.

Carraspean sonoramente a mi derecha, sé quién es, sé la mirada que tiene asi que la miro con mi mejor sonrisa.

—Ay Nin —niega con la cabeza, pero aun así sonríe —, ya, camina—enrolla su brazo con el mío y caminamos juntas rumbo a las aulas.

—¿Qué le ves a Ian? —pregunta Leen de la nada, fijo mi vista en ella y pienso

¿Qué le veo a Ian?

—Es lindo —contesto rápido

—Bueno si, ya lo sé, pero ¿Qué más? —insiste

—No sé Leen tiene un no sé qué, me gustan sus ojos, me gusta cuando está cerca de mí, me hace sentir nerviosa pero cómoda al mismo tiempo —termino con una sonrisa y la miro

—Respuesta medianamente aceptable —murmura Leen y a continuación ríe —, solo que no me gusta ver tu cara cuando él está cerca de otra chica.

—Ya sé, sé que exagero en mis reacciones, sé también que no somos nada él y yo—me defiendo.

—Aun —suelta riendo Leen —Ya verás que pronto abrirá esos ojos que tanto te gustan y te pedirá que tengan una cita —cuando Leen dice eso mi corazón reacciona de forma energética, palpita rápido debido a la emoción.

—¿Crees? —pregunto incrédula aun con una sonrisa en mi rostro y mirando distraídamente al frente, en mi cabeza ya se empieza a formar una historia de Ian y yo tomados de la mano.

—Ya verás que si Nin, digo, no por nada te trata como lo hace no he visto que lo haga con alguien más —asegura— y conocemos como es Ian —completa Leen obviando esa parte.

Ian es el amigo de bastante gente, no es popular solo es... sociable, atractivo, lindo << suspiro >> desde que entramos a la universidad siempre ha habido ese "algo" entre él y yo, así es como me gustaba llamarlo o imaginarlo. Podría estarme adelantando al resultado de ello, pero el que él me buscara para platicar, para saludarme solamente, enseñarme una canción etc., podría ser tomado como un rotundo éxito ¿no?, chicas se le acercan y le coquetean, pero esa suponía que era la gran diferencia entre ellas y yo, jamás he dado el primer paso con él nunca, siempre es él quien viene a mí. Y no era por hacerme la difícil, sino porque me daba pánico quedar como alguna que otra chica que intentaba acercarse e Ian simplemente pasaba de largo.



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En el texto hay: chicklit, romance, drama juvenil

Editado: 16.07.2019

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