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ACEPTO PERO LO RECHAZÓ.
Entró en la mansión y fui directo a la cocina. Aún no estoy muy familiarizada, pero con muchas pérdidas llego, rebusco en la alacena y me llevo al microondas un tarro de fideos instantáneos. Espero los minutos que dice en las instrucciones y los saco, cojo los palillos y me siento en las sillas de la isla de la cocina.
Ni la comida hace que mi mente esté despejada, en momentos circunstanciales como estos me siento muy desconfiada de mí misma, de no saber cómo debo reaccionar o qué hacer. Dejo la comida a medio comer, se me quitó el apetito. Me levanté y la guardé en la refrigeradora y me situé para ir a mi habitación.
Al comienzo de la escalera están esperando mis dos abuelos. Sé que gritarle estuvo mal, pero no quita el hecho de que diera mi opinión, desde que me mezclé con los seres sobrenaturales he estado muy cohibida y miedosa. Jamás me he sentido cohibida por nada ni nadie, pero siempre hay una primera vez para todo, me acerco donde están.
__ Creo que mi punto de vista es diferente al de vosotros __ creo que esto no es una disculpa, pero tampoco estoy cambiando de parecer, sus miradas no dejan de inspeccionarme para determinar si miento. Se detienen al percatarse de que no hago aquello.
__ Fuimos inconscientes y realmente sabemos que te incomodamos con nuestra disputa, Itziar debimos ponernos en tus zapatos antes de hablar __ acaso me está pidiendo disculpa mi abuelo, ambos rostros se ven tristes.
__ La que debería disculparse debería ser yo, no debí gritar aunque esté enojada, son mis abuelos y debería tener más respeto. __ agaché la cabeza por respeto.
Mi madre Sandra era huérfana de ambos padres y no tuvo hermanos, mi padre Cole tenía muchas peleas con sus padres y sus hermanos menores lo despreciaban por ser de otra madre. Por lo tanto, jamás interactúo con otros familiares que no sean mis padres y mi hermano. Soy una cría sin conocimiento de afecto.
__ No te preocupes, sé que para ti esto de asimilarlo debe ser complicado, __ pidió entre asentimiento mi abuela. Tiene razón, esto me tomó muy desprevenida. Y aún no sé cómo debo asimilarlo, pero lo superaré. No por eso tengo dos nombres e identidades. Pero no son distintas, ambas me representan como soy.
Levantó la cabeza y sonrió de lado. Aún me duele la muerte de Sandra y por respeto no haré nada hasta que pasen los días de luto, sé que 7 días no es demasiado, pero representa cuánto he estimado a aquella persona. Pero cuando termine mi semana de luto, Arthur tendrá que pedirle a la diosa Luna y hasta al dios del destino que lo conviertan en un simple mortal para poder morir, porque yo no soy benévola cuando lastiman a un ser querido mío.
No me considero una persona vengativa ni mucho menos lastimaría a personas por placer pero cuando lastiman o hieren severamente a alguien que aprecio un montón esa persona verá mi parte más maligna que poseo.
__ Te dejaremos para que descanses __ me sostiene de los hombros, Joel __ hoy ha sido un día muy duro para todos.
Se despidieron de mí ambos y se retiraron a su dormitorio, subí las escaleras lentamente y pude escuchar los chirridos que mis pies producían a los escalones de la escalera, el sonido del bosque se siente en el hogar. Crecí escuchando a la naturaleza y me sentía plena con la noche oscura. Era gratificante saber que pertenezco a tan bello lugar.
Llego a mi habitación y entró sin demora, me recuesta en la cama, enciendo mi celular y veo que son las 4:36 de la madrugada y no tendré suficiente tiempo para descansar. Si me duermo, me levantaré a la 13:00 p. m., mejor me quedo despierta. Rebusco mi celular y no lo encuentro, me concentro e invoco un hechizo, lo hago aparecer al frente mío flotando con esplendor. Un punto a favor de la magia es que puedo hacer algunas cosas sin complicarme demasiado.
Prende y veo que tengo más de 15 llamadas de Erika y Melany, la diferencia de horario no es mucho, el celular comienza a vibrar, aceptó la llamada y respondo.
__ Hola, por...
__ ¿Dónde estás? y no me digas que en tu casa, porque no me mentirás en la cara, porque hay personas en tu casa que dicen que son los dueños. ¿Dánae, dónde diablos estás? ¿Estás bien? , ¿no te han hecho daño? ¿Pero responde algo, te tienen cautiva? __ Como abrí la llamada, me bombardeó de preguntas Melany. Alejo el celular hasta que escuchó de otro lado un poco de silencio.
¿Qué le diré? No le puedo decir que soy un ser sobrenatural que está de vacaciones donde mis abuelos son los reyes alfas. Se desmayaría de inmediato, sin duda alguna. Esto sería como en nuestro último año de escuela, cuando asustaron a todas las chicas con una salamandra y Melany lloró por tres horas consecutivas de clase. No le quiero mentir, pero tampoco decirle la verdad. Me tachará de fenómeno o de algo peor.
__ Mi linda rubia, estate tranquila, nada malo me ha pasado, solo que estoy en la casa de mis abuelos. Por las vacaciones y quizá me quede estudiando por acá __ Declaré la mitad de la verdad, lo siento, aún no le puedo decir todo.
Escucho un QUE del otro lado que casi hace competencia con la diosa Luna por el grito que dio. Está muy enojada, alejo el celular de mi oído para no escuchar cómo estará maldiciendo y reprochándome.
__ Hey, hey, me estás escuchando, no me digas que me estás ignorando por completo __ braveo con mucho coraje. Vale, esto está saliendo de sitio.
__ Deja de gritar, fue de último momento el viaje __ afirmé, con la cabeza doliéndome __ ¿Y cómo así estás tan bravucona hoy?
__ Vine a visitarte y ¡Bon la sorpresa que me encontré!
__ Agradezco que vinieras a visitar al prójimo pero como te dije estoy de maravilla, necesito un descanso de la ciudad como sabes, me gusta el bosque y lo desolado, y donde estoy es un lugar realmente pacífico. __ Sé que es una excusa realmente cutre, pero no tengo de otra. __ Adiós, mi rubia, te escribo más tarde, okay.
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Editado: 27.07.2024