CAPITULO 33

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GUERRA, LA MALDITA GUERRA.

Ver la cara de Arthur me da ganas de clavar mis dientes a la yugular, y beber toda su sangre hasta dejarlo sin nada. Juntarme mucho con Adán y Sebastián hace daño; debo dejar ir esos pensamientos asesinos. Aún no quiero beber sangre.

__ Felicitaciones, seguro que tus padres estarían orgullosos; es cierto, ellos no pueden verte o darte muchas felicidades por esto, ¿por qué será que no pueden hacerlo? __ Si no fuera por Sebastián y Adrián que me sujetaron, yo mismo le iba a enseñar al charlatán de Arthur lo que les pasa, lo que difaman a mi familia.

__ Al parecer, nuestra reina aún no sabe controlar su genio de loba temperamental. __ Genial, ahora Enriqueta salió a defender a su alfa rabioso. Como que este par me está haciendo enojar para que los mate de un solo movimiento, acaso.

__ Vaya, vaya, no me habías dicho, Arthur, que tenías un lamebotas como sabueso; ¿eso no es caer bajo? __ Si quieren enojarme, también les haré enojarse. Pero esto será fácil porque la bruja diabólica de Enriqueta está echando humo.

__ Jamás me has visto hacer eso demente. __ De sus manos salieron dos esferas de fuego y las lanzo hacia mí; de inmediato las envuelvo en hielo y las dejo que caigan al suelo. La demente es ella, no yo. Creo que este es el inicio de la guerra. __ Vas a morir por mis manos, reina de pacotilla.

Alza la mano derecha. Enriqueta y todos los que están detrás de ella se disponen a atacar; solo hace un pequeño movimiento de muñeca y todos empiezan a pelear. Las filas se dispersan y solo quedamos Sebastián, Adrián, Lucas y yo contra Enriqueta, Arthur y dos Rogers.

__ Dar lo mejor, a pelear. __ Asiento y mis tropas siguen mis órdenes.

Las flechas no se hacen esperar; de ambos lados se avecinan; la sangre y la desesperación empiezan a florecer; lo que hace un minuto era solo una disputa ahora es sangre derramada.

__ Se pueden encargar de los demás, yo me quedo con Arthur __ hice aparecer las lindas Chakram que me obsequió la diosa Selene.

__ Criatura de pulgas, no creo que…

__ Dije que se encargaran del resto y eso también aplica para ti, Adrián. __ Sus miradas me indican que no quieren obedecer, pero lo hacen al fin de cuenta. Se retiran los tres, pero Adrián me suplica con la mirada que me proteja, e inclinó la cabeza asintiendo y se retira.

Sé que no está bien mentir; hoy sin duda alguna saldré muy lastimada. Quizás sea la persona que vio Hakim y sea mi misma muerte que la presencié.

__ Así que quieres pelear con el que fue tu padre.

Odio a este hombre, y mucho más cuando dice tonterías disfuncionales.

__ Jamás has sido mi padre; deja la palabrería y pelea; __ me está haciendo enojar y eso no quiero; puedo perder los cabales después.

Y ella de donde salió.

__ Arthur, deja de meter a tus hijos en problemas tuyos. __ De su espalda salió Mildred; toda su ropa es negra y sus ojos no son del mismo color que la última vez le vi.

__ Crees que vendré a una guerra ancestral solo con mi linda cara; mi querida hija sí ama a su padre, por eso es que ha venido solo a protegerme a mí.

La mirada de Mildred no es la misma que antes, se ve sinistra y tiene un aura muy similar a la de Enriqueta cuando quiere matarme. ¿Qué es lo que le han hecho a esta chica? Toda su presencia se ve que fue alterada.

Es una bruma incansable de soportar. Es muy espesa y oscura; siento que guarda mucho dolor y un profundo resentimiento.

__ Mildred, contigo no tengo nada, ¿por favor, deja a tu padre aquí solo? __ Mi voz sonó suave pero firme; no quiero lastimar a una persona que no debe estar aquí.

__ Lo siento, no puedo dejar a mi padre indefenso.

En sus manos aparecieron dos dagas iguales a las de Kahel malvado, con que quería matarme en la prueba de reina. Se aproxima velozmente hacia a mí; quedé anonadada. Ella me quiere matar; cuando éramos una familia solo me odiaba o no le caía bien, pero ahora "ella me quiere matar", pero lo que más me sorprendió es que ella usa magia, por el reflejo de la hoja de la daga, despierto de mi asombro. Me giro a la derecha y a la izquierda hasta que abobo un poco a Mildred y sostengo sus manos. De un golpe le hago caer sus dagas. Ató sus manos con una cuerda muy resistente. Llevo mis manos a su cabeza y nada, no encuentro nada; está oscuro y desolado; ella está hipnotizada, no sabe qué mismo está haciendo.

__ ¿Qué carajos le has hecho a tu propia hija? ¿Acaso estas demen…?

El desgraciado Arthur me acaba de apuñalar con ambas dagan en mi espalda y abdomen al mismo tiempo, ver mi sangre ser derrama me da ganas de asesinarlo. Pero me contengo y deshago el hechizo de la mente de Mildred. Es muy fuerte el control mental de ella; me concentro e invoco la magia ancestral y reanudo el hechizo una y otra vez hasta que es liberada.

Me siento un poco débil y agotada por haber derramado sangre, pero fue por un bien mayor. Deshago el hechizo de la cuerda para que esté más cómoda.

__ Cómo es que, __ mira para todos lados; hasta que centra sus ojos, es su querido padre. __ A ti, solo quiero verte muerto. __ Corre velozmente y alza el cuello de su camisa para amenazar o "quizás, solo quizás, quiera ahorrarme el trabajo de matarlo". __ Te dije que Enriqueta era un demonio manipulador y psicopata, y vaya lo que hace mi padre que me ofrece como cambio por ayuda; odio eso de ti. Tuve la oportunidad de matarte ese día solo por la imbécil de Enriqueta que me lava el cerebro. No puede, pero ahora no saldrás vivo de aquí.

Okay, justamente tuve que liberar el lado agresivo y loco de mi antigua hermanastra. Quiere venganza solo porque Arthur la usó. Yo haría lo mismo si estuviera en sus zapatos, pero no puedo; si lo hago traigo maldad y desastre del mundo entero; eso es pedir mucho destino manipulador.

__ Mira, Mildred, quiero muerto a tu padre como tú, pero la pelea es con él; no quiero que te intrometas.