CAPITULO 28

28

DEJARE DE SER BUENA.

Itziar Valois

Parezco una paleta helada; estoy que tiemblo como cuando me moje en invierno; esa sensación espeluznante de no poder controlar los espasmos es una desgracia; Ni siquiera con respirar profundamente funciona aquí; La solución de Melany de la relajación no da beneficio; los colmillos me rosan la lengua al intentar hablar.

No recuerdo que esto fuera tan difícil; cuando probé la sangre con tequila que me brindó mi tío no sabía mal, pero ahora que el olor pasó por mi nariz la sentí asquerosa.

__ Itziar ¡Estas pálida!

No creo que solo pálida, sino desbastada, engañada, inculcada, muerta, y sobre todo ultrajada. Y muchos sinónimos más; mi vida es un carrusel de emociones y experiencias nada agradables. Hasta unas semanas antes de mi cumpleaños 16, mi vida fue pacífica y nada tormentosa; algo que refiero a volver a vivir una y otra vez, solo es una ilusión… Porque si retrocedo el tiempo, deshago muchas cosas que debían pasar o provoco bucles y demasiados desastres.

__ Iker ¿De dónde viene ese aroma?

No sé qué es lo que me pasa; quiero transformarme en lobo y salir a correr; estoy impaciente e incomodada con mi forma humana; no tengo control de nada.

__ Itziar, mírame. ¡Tranquila, debes de tener control de tu cuerpo! Ya no eres una híbrida, tu fuerza es más y tu hambre es insaciable ahora. No le des el control...

Es tarde, ya perdí el control. La batalla entre mi yo y la fuerza de la sangre vampírica me ha corrompido. Quiero matar, ver la sangre correr. Y hacer sufrir a mi presa.

__ Ya no se puede hacer nada, quiero divertirme un rato __ le contesto a Iker antes de teletransportarme donde presiento que se encuentra un lindo ciervo pasteando.

Me posiciono justo atrás de un frondoso pino, observo detenidamente cada movimiento, a cada 26 segundo alza la cabeza para estar atento a su entorno y a cada 2 segundo sus patas traseras las sacude por instinto y a cada 9 da un paso al frente.

Lo tengo.

Uno, dos y tres. Me lanzo sobre él y mis garras lo aprisionan. Me interceptó justo cuando lo intentaba noquear. Sus patas me empujan hacia adelante y pierdo la agarrada. Se vuelve furioso, pero la batalla la tiene perdida, su sangre empieza a chorrearle y eso se enciende. Su posición se vuelve más agresiva y tosca; a cada tanto debo darme vuelta para no ser embestida por sus cuernos; en una vuelta me lanzo y caigo encima de él, en lugar de montarlo. Posiciono mis dos manos en su cuello y entierro las garras. Patalea inmediatamente, pero al final yace en el suelo.

Destierro mis garras y me levanto del cuerpo. Estoy sucia en todas partes. Cambio mi look sangriento por unos shorts de masillas y crop top de encaje blanco; de paso, unos convers a juego. Recojo mi cabello en una coleta y ahora solo mi fleco es que me cubre la cara.

Toda sangre fue removida y no quedó en mi cuerpo. Pensé que me apetecería un poco de sangre, pero se fue mi interés.

__ Te encontré... Pero qué has hecho.

No me importa qué rostro habrá puesto, solo lo quiero ver lejos y que me deje en paz.

__ Eso no te incumbe a ti, bestia mítica.

Giro y lo veo todo disgustado y molesto. Eso me enoja a mí. No es nadie para sentir lástima por mí.

__ Claro que me incumbe, maestra. Soy parte de usted; su sangre vampírica la está corrompiendo; justo ahora solo quiere ver sangre correr, asesinar, divertirse porque no tiene control. Porque si estuviera con todos sus sentidos sentiría que matar a un animal inocente está mal...

__ Deja de hablar tonterías, me estás mareando. Solo quiero comer y ya, ¡acaso es pedir mucho!

__ No le pido que no se alimente ni mucho menos, le pido que reaccione.

Racionar, racionar que. Estoy perfecta, ya no me resisto a mi poder y me siento de maravilla...

Elijah

Alguien está buscando a ese tal Elijah, pero no sé porque ese nombre retumba en mi mente como si me perteneciera. Me siento desconcertada, perdida como si estuviera en un túnel sin luz.

Elijah, ven a mí.

__ Deja de llamarme, ¿no sé quién eres?

Elijah, no te dejes llevar por la maldad… Tú tienes el control; te espera nieves.

Nieves, ¿quién es nieve? Porque me interesa saber a quién le pertenece ese nombre. Porque me siento nostálgica de repente; quiero llorar, quiero gritar. Me siento reprimida y sin lugar.

__ No, no lo sé. No sé quien seas __ grito con frustración, no aguanto. Cada vez se repite lo que dijo esa voz. Es un tormento que no soporto.

__ Que, ¡pero a qué te refieres!

__ No sé ¡Te he dicho que no lo sé! No sé quién es Elijah y peor Nieves.

No cesan las palabras, se vuelve más abrumador y no sé cómo pararlas.

__ Itziar, contesta el llamado. Sino se volverá más difícil.

__ ¿Y cómo rayos hago eso? Ahh, has silencio. Quiero que te calles.

De mí sale una onda que remese a los árboles a mi alrededor; no puedo controlar mi poder; solo quiero silenciarlo de una vez. Mi mente está siendo llenada de voces y me siento aturdida.

__ Escúchame, Itziar reacciona __ Me zarandea para que conteste, pero solo puedo pronunciar un si __ tú mencionaste que tenías un padrino, y que era mago. Ellos poseen una magia sinigual, lo que a veces puede ser un llamado de la diosa Selene.

Que dolor más horrible, terminemos con esto. Iker dice que tengo un tal padrino que no sabía su existencia y eso quiere decir que yo soy esa tal Elijah, si es así.

Elijah, tu ahijada acepta tu llamado.

Paro, no escucho nada; silencio a tal punto que puedo escuchar mis propios pensamientos.

__ Estas perdida, ¿porque te has dejado perder?

Abro los ojos y me encuentro a un chico de como 23 años, cabellos blancos como la misma nieve, sonriéndome con alegría, haciendo que sus ojos negros brillen con más intensidad.