28 de enero
El día es realmente agradable, está soleado, los pájaros cantan y yo me encamino al trabajo. Debo admitir que no me agrada la idea de ver a mis molestos compañeros toda la semana, ¿Qué más puedo hacer?, me levanto todas las mañanas a las 4am para pasar el día con unos desagradecidos, para un miserable sueldo, pero se supone que debo agradecer cada mili segundo que paso en su compañía y ¿Para qué? siendo realmente honesta no me importa en absoluto sus quejumbrosas vidas, ni mucho menos sus problemas.
Voy en camino al trabajo en un pequeño tren, me lleva como si no tuviera rumbo alguno, veo pasar la gente unos tienen una cara angustiada, otros una sonrisa de oreja a oreja, la cual no logro entender, yo en cambio siempre voy con una cara seria, no es que no me guste sonreír, al contrario, solo que no necesariamente me gusta sonreírle a los demás, es algo tan mío, prefiero reservármelo para ocasiones especiales, no para algo tan aburrido como una ida al trabajo.
29 de enero
Lo mismo de ayer...
30 de enero
Ohhh genial nada nuevo.
31 de enero
No sé ni porque me preocupo en escribir algo, ¿pierdo mi tiempo?.
1 de Febrero
He tomado la firme intención de dejar de escribir, no creo servir para esto.
2 de febrero
Sé lo que dije ayer, ¿si?
3 de febrero
Ya sé que te desespero, dejame tranquila.
4 de febrero
Sé lo que dirás, pero tengo algo que contarte.
5 de febrero
Al menos trata de adivinar, ¿no?
6 de febrero
Estaba bromeando, eres un diario, no puedes adivinar ¿acaso lo intentaste?
7 de febrero
ya me puse seria, mejor convenceme.
8 de febrero
okey, me convenciste, te contare.
9 de febrero
Solo jugaba contigo, no había pasado nada interesante. Si fueras una persona te deberías sentir bastante estúpida ¿cierto?
Hoy vi al chico más lindo del mundo, veras, estaba de camino al trabajo de repente escuche una voz.
-Hola mel, han pasado años- me dijo, con una sonrisa algo encantadora, debo admitir.
-¿Quién eres?respondí mientras lo miraba con ojos de curiosidad.
-Soy yo dan- sonríe y acto seguido suelta una gran carcajada.
-¿Dan?- mis ojos demostraban confusión.
-¿Darié? Miro de un lado a otro como buscando una respuesta, de repente se me viene a la mente un vago recuerdo de una triste infancia, bueno no tan triste. Cierro los ojos y me acostumbro a la nueva luz, clara y brillante, darié juega conmigo en aquel parque que tanto ame, los gritos de los niños al saltar de un lugar a otro, llenan mis oídos de hermosos recuerdos.
Darié salta y me asusta- lo empujo y grito darié idiota, pero su cara se nubla tras asustarme, me mira con ojos de melancolía y luego de aquello se queda callado, era un silencio con un sabor amargo.
-Mel , yo...
-No lo digas, no quiero escucharte- refunfuñe.
-Mel, me mudare, ¿lo entiendes? -¿Me abandonaras como todos los demas verdad?
-Lo siento - Me miente, mientras se echa a llorar.
-Bien, vete y jamas vuelvas -añado mientras procedo a darle la espalda Esa fue la ultima vez que vi a darié.
De un brinco inesperado vuelvo a la realidad- Dan me mira sorprendido y yo me percato de eso.
-¿Porqué tan seria eh? - pregunta luego de que su rostro volviera a su estado original.
-Nada señor curioso- Mi mano le da un golpe amistoso en el hombro y sonrió
-¿Te veré de nuevo señorita mel?- pregunta.
-Puede ser, desde luego- Aclaro .
11 de febrero
Antier vi a Dan hemos quedado de encontrarnos mañana y estoy sumamente feliz.
12 de febrero
Cita cancelada por trabajo, supongo que sera en otra ocasión.
17 de febrero
Luego de haber intercambiado números con Dan hemos quedado en vernos hoy a las 3 de la tarde, en un viejo parque que frecuentábamos cuando niños.
Te escribo mañana como me fue, deseame suerte.
18 de febrero
El mejor día de mi vida
Dan es todo un caballero, aunque cuando llegue él estaba hablaba con un chico de inmediato me presto la atención a mí.
-Hola mel , te ves preciosa
-Hola...
-Mel, querida te presento a mi amigo federico- Me dice mientras me susurra al oído, que no te vaya a gustar porque eres mía
-Mucho gusto federico, soy mel- Lo saludo mientras suelto una carcajada por las palabras de dan
-El gusto es mio mel pero llamame fede- Con una gran sonrisa luego se despide y se va
Luego de que fede se fuera me quede a solas con darié, quien luego de haber preparado una bellísima sena por la noche me abrazo y me dijo que se alegraba de haber vuelto.
Después de todo, admito que fue un día genial.