Capítulo 1

Paseo de un lado a otro en la sala. Cómo es posible que esa mujer haya desaparecido de esa manera.

—Lo siento Derek, pero esa mujer parece que no existiera— Dice Cristian en tono preocupado.

—Existe— Lo miro —Tengo las pruebas en este papel donde es legalmente mi esposa y la copia de su pasaporte, además...— Cierro los ojos al recordar cómo esa mujer hizo que perdiera el sentido de las ganas que tenía al despertar para hacer la mía una vez más. Pero mi sorpresa fue mayor al ver su lado de la cama vacía y la prueba de su inocencia.

—Contrataré a los mejores— Cristián hace un asentamiento con su cabeza y me deja solo con Alex.

—¿Qué vas a hacer cuando la veas? —Dice Alex —¿Le pedirán el divorcio?— Lo miro por un momento.

—Eso lo veremos cuando la vea— Digo dando la vuelta para salir del estudio.

—Dijiste que solo sería por una noche y después todo acabaría—Me detengo y lo miro sobre mi hombro —Mira que es mejor parar está locura antes que esa mujer sepa quién eres y desee proclamarse reina—

—Pues reina ya es— Contesto y salgo del salón.

La verdad es que estos días han sido una locura total. En especial en haberme casado con una completa desconocida.

¿Qué putas estaba pensando?

Dos meses después...

Termino de revisar unos documentos y doy mi aprobación en ellos. Carmela, mi secretaria, espera a un lado y los toma cuando he terminado de firmarlos. Observó que hace una reverencia y sale del despacho.

Unos minutos después entra mi hermana con una revista en la mano y se sienta enfrente de mí.

—¿Cómo ha estado su alteza?— Dice con sarcasmo y hace una pequeña reverencia.

—Con mucho trabajo princesa— Mi hermana rueda los ojos y se pone a revisar su celular — ¿Qué te trae por acá Lucía?— Digo con impaciencia.

Mi hermana deja a un lado su móvil y me observa con una sonrisa.

—¿Acaso no puedo pasar a verte?— Suspiro y le sonrió.

—Claro que sí, sabes que siempre tendré tiempo para ti— Tomó su mano sobre el escritorio y observó su semblante de tristeza.

—Extraño los viejos tiempos— Susurra y sus ojos se llenan de lágrimas —Sabes que pronto es su cumpleaños...— Ahoga un sollozo y me levanto para poder abrazarla.

Mi hermana se aferra fuerte a mi pecho y siento como trata de contenerse, pero no puede. No es fácil el haber perdido a su esposo hace dos años.

Nicolás era mi mejor amigo y se casó con mi hermana, pero un trágico accidente se llevó su vida dejando a mi hermana viuda y a un pequeño sin su padre.

—Debes ser fuerte por el pequeño Alejandro— Susurro besando su cabeza.

—No es fácil, todo este tiempo lo sigo extrañando—

—Ven, que tal si salimos a comer un rato— Digo cambiando el tema.

—Si es lo mejor— Dice mi hermana y limpia sus lágrimas.

Tomó mis cosas y apago mi ordenador. Mi hermana me esperaba en la puerta y antes de salir tomó la revista que llevaba en sus manos para entregársela, pero antes de hacerlo me sorprendió la portada.

—¿Qué sucede?— Pregunta mi hermana al ver que me he quedado en shock.

—Esta chica...— Susurro sin dejar de mirar la imagen de la portada.

—¡Ohh! Esta chica es una de las mejores diseñadoras del momento— Dice con emoción —Estoy esperando que termine la semana de moda para poder contactarla y que ella pueda diseñar un nuevo guardarropa—

Salgo de la oficina de prisa y me encuentro con Cristián.

—¿Sucede algo excelencia?— Pregunta al ver mi rostro.

—La he encontrado— Digo y le entregó la revista.

—¿A quién has encontrado Derek?— Pregunta mi hermana a mi lado.

—A mi esposa—