Prefacio

Hace millones de años el mundo fue creado por las manos de nuestro padre, este era su obra maestra, un paraíso perfecto, capaz de albergar a todas sus creaciones y de satisfacer todas sus necesidades, nosotros estuvimos a su lado cada segundo, sin embargo nosotros jamás fuimos capaces de satisfacerlo completamente, por supuesto que nos quería, pero para nosotros él era nuestro todo.

Entonces llegaron ustedes, esculpidos de la tierra y hechos a su imagen y semejanza, fue en ese momento que los ojos de nuestro padre brillaron, pronto ustedes se convirtieron en su obra maestra, sin embargo nunca sentimos envidia ni ninguna de las cosas que ustedes si podían sentir, ni siquiera cuando él nos puso a su disposición para cuidarlos del mal, porque nosotros no fuimos creados con libre albedrio.

Pero siempre hay un error en el producto ¿verdad?, ni siquiera nosotros pudimos salvarnos de la tentación y la envidia, pero ustedes, ustedes  tampoco fueron perfectos como él creía, llenos de pecados y tan fáciles de corromper, tan débiles... la única diferencia fue que a nosotros no se nos perdonó y fuimos desterrados de nuestro hogar y de todo lo que conocíamos, mientras que a ustedes se les fue entregado el perdón.

Nosotros nunca conocimos al padre bondadoso que ustedes tuvieron y al final también aprendimos de ustedes los humanos, pero es hora de que nuestro padre conozca la cara verdadera de su creación, es hora de que le mostremos los 7 pecados que él creó.