Los Amores PlatÓnicos ¿se Hacen Realidad?

IREMOS A LAS OLIMPIADAS DE LA CIENCIA, SI, QUE SE NOTE MI EMOCIÓN

Un día antes de ir a esas estúpidas olimpiadas, estaba pensando en cómo evitar ir, con la persona con la que menos quería ir era con Alex, así que trataba de hacerme la enferma, pero mis padres ya no creían en esas mentiras. Me la pase toda la noche sin poder dormir, debido a que yo no conocía el lugar y, además, me perdía con facilidad, el profesor dijo que sería mejor que Alex y yo llegáramos juntos al lugar donde se llevaría a cabo la actividad, concurso, lo que sea. Quedamos en reunirnos en la parada del bus. ¡Ayuda! no quiero ir.

Cuando llegue a la parada del bus Alex ya se encontraba ahí, ambos nos quedamos en silencio, no es como si tuviéramos algo de qué hablar. Ambos subimos al autobús, me adelante y tome un asiento vacío, Alex se sentó junto a mí. ¡Oye deberías haber tomado otro, hay muchos asientos vacíos en este autobús sabes! Decidí calmarme y comencé a mirar hacia la ventana.

Llegamos al lugar donde se realizaría el concurso, ambos bajamos del autobús, los coordinadores comenzaron a guiarnos al salón donde se haría la ceremonia de inicio, esta persona es como el director de nuestra escuela, le gusta hablar demasiado, después de una hora de bla bla bla, nos dirigimos a los salones donde haríamos las pruebas, a Alex y a mí nos hicieron tomar el examen de biología, ya que este era el que siempre se le daba a los de primero. Los de segundo y tercero se quedaban con la prueba de Física y Matemática. Después de una hora terminé de responder el examen, estaba a punto de pararme e ir a entregar mi prueba, pero ningún estudiante se había movido de sus asientos, no quería llamar la atención así que decidí quedarme más tiempo en el escritorio y esperar a que unos dos estudiantes entregaran la prueba primero. Después de unos minutos Alex termino y se levantó de su asiento, pasando cerca de mi dijo

-si ya terminaste deberías de entregarlo también, así te puedes ir luego-

Lo sé, sabes, no tienes que decírmelo.

Me levanté de mi asiento, y seguí a Alex, en ese momento parecía un pollito siguiendo a su mama, después de salir del salón, ambos nos dirigimos al patio, no pude evitar estirar mis brazos en ese momento, después de todo ya estaba cansada de estar sentada. Vi a Alex caminar rápido así que lo seguí, vamos, no tenia de otra, temía perderme y seria vergonzoso que eso pasara. Alex se dirigía a una de las tiendas que se encontraban en el lugar, así que decidí sacar dinero también y comprar algo.

-ten-

Alex me estaba alcanzando un jugo de manzana, esto es extraño, ¿exactamente que está tramando este sujeto? Tome el jugo y le alcance el dinero, pero este solo me ignoro.

Después de haber caminado por media hora en el lugar donde nos encontrábamos, al fin salimos de ahí, se me estaba haciendo una eternidad, no recuerdo que hayamos recorrido tanto cuando entramos, pero no me puedo quejar, después de todo no es como si yo hubiera podido salir por mi cuenta. Ambos nos dirigimos a la parada del autobús. Después de unos minutos el autobús llego y ambos nos subimos a él. Encontré un asiento vacío que estaba cerca de la ventana y me apresuré a tomarlo, Alex volvió a sentarse a la par mía.

Dirigí mi mirada nuevamente a la ventana, poco a poco comenzó a darme sueño, no podía quedarme dormida, pero no pude evitar comenzar a dar cabezazos, pude escuchar la risa de Alex. Pero era mejor ignorarlo en ese momento, después de unos minutos me quede dormida.

Cuando desperté, mi cabeza se encontraba en el hombro de alguien, ¿no me digas que?, quite rápidamente mi cabeza del hombro de Alex, y con una expresión de incomodidad susurre

-lo siento-

Después de ello Alex dijo

-más que disculparte deberíamos de pararnos rápido de aquí, nos hemos pasado varias paradas-

- ¿eh? -

Alex se levantó rápidamente del asiento, yo comencé a seguirlo, pero había demasiada gente que era difícil seguirle el paso a Alex, alguien tomo mi mano y comenzó a jalarme hacia adelante, después de bajarnos del autobús Alex seguía sosteniéndome la mano, trate soltarme, pero este me sostenía con fuerza, después de ello cruzamos la calle corriendo, ya que el bus que nos llevaría de regreso venia. En esa parada había demasiada gente también, Alex sostuvo mi mano con más fuerza y subimos al autobús, en esta ocasión nos quedamos de pie ya que, todos los asientos estaban ocupados. Después de media hora llegamos a la parada a la cual deberíamos de habernos bajado desde un principio, Alex tomo nuevamente mi mano y bajamos del autobús, después de bajar este soltó mi mano. A pesar de estar incomoda con eso tenía que agradecerle por ello

-gracias-

Alex se dio la vuelta y con una sonrisa que no podía describir me dijo

-de nada-

¿eh?, ¿desde cuándo este chico se volvió amable?, ¡oh! ¡esperen! ¿acaso esto es alguna broma?, ¿qué diablos pasa con él? Bueno, debe de ser la edad. Mientras estaba pensando en ello alcé la mirada y encontré a Kei en la parada de bus. Cuando lo vi no pude evitar sonreír y comencé a acercarme a él. ¿eh? ese sujeto parecía molesto, me ignoro y se fue. ¿No me digas que estas molesto por que no pudiste ir a las olimpiadas? ¡No es como si fuera mi culpa sabes, es la tuya por quedar en el tercer lugar!

Ooh. Leia también se encontraba ahí, no sé si lo imagine, pero también parecía molesta, ¿qué les pasa a todos hoy?, si, entonces ha de ser eso, la edad los está cambiando.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.