Como todos los años, terminando las clases todos íbamos al club al cual nos inscribimos, podías asistir al que más te gustara, claro, yo eh elegido todos los años botánica, me encanta la belleza de las plantas, Me hacen sentir libre, además de ello, estando tanto las plantas y árboles a mi alrededor puedo sentir el aire fresco y puro, cuando este entra por mi nariz y llega a mis pulmones me hace sentir de esa manera también.
Es mi primer día en el club de botánica de preparatoria, todos los integrantes son de grados superiores, y por lo visto Kei y yo somos los únicos que nos uniremos al club este año. No negare que me sentía nerviosa, pero me alegraba tener a alguien de mi misma edad en este lugar.
El presidente del club nos dio la bienvenida y nos presentó a todos los integrantes, asimismo Kei y yo nos presentamos. Wooow, nos recibieron tan gentilmente y a la vez con tanto animo que no me arrepiento de estar aquí. Nos dieron información acerca del club y como es que este se manejaba y las actividades que se realizaban. Una de las más importantes es el proyecto de reforestación que hacen en nuestra comunidad pidiendo ayuda a todos los habitantes para que estos se comprometan también al cuidado de la vegetación que nos rodea. Entre más escuchaba más me maravillaba de todo, me parecía excelente el hecho de que todos pudiéramos ayudar y que se pudiera saber la importancia del cuidado del medio ambiente.
Después de darnos toda la información necesaria, nos dijeron que haríamos un recorrido por el jardín que ellos tenían a cargo. Ellos se enfocaban en recrear jardines representativos de cada país. Era emocionante saber la forma en que expresaban la belleza en diferentes partes del mundo. Gracias a esto poco a poco estaba descubriendo que era lo que quería ser o a que me quería dedicar.
Primero nos mostraron los diseños en miniatura que tenían de cada una de ellos, todos tenían su propio encanto, claro estaba, no podían replicar al cien por ciento estos jardines más que todo porque habían algunas plantas que no crecían en nuestro país, además de ello que en muchas ocasiones no se contaba con un gran presupuesto para poder abordarlo así que ellos utilizaban su creatividad y le daban su propio toque a cada uno de ellos, claro, sin perder la esencia de los jardines, este año se representaría un jardín japonés. Su representativo eran las flores de cerezo, pero había un enorme problema estas solo se dan en el continente asiático. Cada quien tendría que dar alguna idea o investigar acerca de alguna planta que pudiera sustituirla, si no podíamos encontrar algo presentaríamos tal proyecto cuando estuviera listo. Esa era la ventaja, después de todo al menos nosotros teníamos tres años aun para poder representarlo. Después de todo las personas que se graduarían también serían parte de esto ya que siempre vienen a ayudar a la realización de estos.
Nunca me había sentido tan a gusto en un lugar, ciento como si al fin hubiera encontrado el lugar al que pertenezco, por la expresión que tiene Kei en su cara parece que no soy la única que se siente así. Después de que nos contaran y nos enseñaran tantas cosas maravillosas procedimos a ir a los jardines, todos eran hermosos, claro, estos no se hacían de gran tamaño, después de todo se tenía que dejar algo de espacio, en su totalidad había cinco jardines, los estudiantes anteriores en ocasiones tardaban mucho más de tres años en lograr hacer un jardín, creo que por esa razón cada uno de estos jardines te transportaban a esos lugares y sentías que te encontrabas en ese país. Mi corazón y mi alma se sentían como en casa en ese momento, observar todo ello y saber que existen plantas extrañas alrededor del mundo que tengo que conocer me hace sentir emocionada y extasiada.
Después de haber recorrido los cinco jardines el presidente dijo que nos mostraría algo mucho más sorprendente, no pude evitar sonreír, al mismo tiempo tenía ganas de llorar, el hecho de saber que existía algo mucho más maravilloso que esto hacia que mis emociones comenzaran a desbordarse. Comenzamos a seguir al presidente y comenzamos a adentrarnos al bosque. Claro, yo nunca me había adentrado tanto, claro, solo fue en una ocasión pero no pude disfrutar de la hermosa vista en ese momento. Pero en esta ocasión comencé a notar de todo. Era exquisitamente maravilloso. ¿Por qué no lo había notado antes? o es más ¿por qué no me había adentrado antes a este lugar? ¿Qué rayos estuve haciendo todos estos años?
Entre más nos adentrábamos podía observar más flores silvestres las cuales se veían hermosas. Nos topamos con un pequeño arroyo el cual no sabía que existía, era obvio que no lo sabría, después de todo nunca había venido a este lugar a pesar de que estaba tan cerca de él. Cruzamos el pequeño arroyo cristalino y por alguna razón mi corazón comenzó a latir a mil por hora, al parecer presentía que nos acercábamos a algo mucho más asombroso.
Seguimos caminando unos quince minutos más, lo cual no quería que ese pequeño viaje terminara, pero a la vez quería llegar ya a ese lugar que sé que no me decepcionaría, después de todo no importa que, la naturaleza nunca me ha decepcionado.
-llegamos- escuche decirle al presiente
Observe cientos de troncos de árboles a mi alrededor eran un poco más delgados que los demás que habíamos observado durante nuestro recorrido. Puede que para muchas personas solamente hubieran visto algo simple, pero para mí ver tantos arboles reunidos me parecía maravilloso después de todo, actualmente no puedes ver este tipo de lugares tan fácilmente, menos tenerlos tan cerca.
-si eso es hermoso también, pero lo más hermoso se encuentra arriba- decía el presidente en un tono presumido
Emocionada cerré los ojos y alcé mi vista poco a poco, cuando abrí los ojos me sorprendió la maravillosa belleza que estaba presenciando en ese momento, no pude evitar sonreír, comencé a girar para poder observar todo a mi alrededor. Lo maravilloso de este lugar era el color de sus hojas, no era el verde que estaba acostumbrada a ver, era un hermoso tono entre verde y azul lo cual el sol ayudaba a vislumbrar hermosamente con sus rayos de luz. Se sentía como si estuviera en un cuento de hadas en ese momento. El viento soplo un poco y el aire tenía un olor tan refrescante, el olor era muy diferente a otros que había sentido, por alguna razón se sentía maravilloso, ¿cuántas veces ya lo voy repitiendo? exactamente no lo sé, después de todo lo seguiré haciendo.