— ¡Mierda Mitzy te estoy hablando! — exclamó molesto cuando miro a su amiga levantarse en ropa interior lo que en cierta forma lo tranquilizó.
— Sam... Yo... ¡No sé qué pasó estábamos ebrios y no sabía dónde vivías! — trato de justificarse y parecer agraviada — ¡Te juro que no sé qué pasó!
— ¡¿Tienes idea de lo que esto significa?! ¡O !¿El problema que me atraería?! ¿Por qué no dejaste que Ricky me llevará a casa o llamaste a mi esposa? — la sacudió tomándola de los hombros.
Estaba enojado y molesto, ¿Ahora con que cara miraría a su esposa? ¿Cómo no le aviso donde estaría anoche? Si se había acostado con Mitzy sería el peor error de su maldita vida.
— ¡Samuel me estás lastimando! — agraviada lo miro y le dolió el hecho de que pensara en que había engañado a su esposa en vez de que pudo pasar una buena velada con ella — ¡No sé qué pasó, pero seguimos en ropa interior! Quizás no pasó nada... — al verlo así de histérico prefirió no mentirle por ahora.
— ¡Más vale que eso sea cierto Mitzy! ¡Amo a mi esposa y no es posible que la haya engañado contigo! — la soltó frustrado, se enmaraño el cabello y busco su ropa que estaba toda regada por el suelo — además estoy seguro de que no nos acostamos, nunca he podido hacerlo ebrio.
— ¡¿Cómo estás seguro de eso?! — pregunto preocupada, si ese era el caso tenía sentido el hecho de que no pudo excitarlo cuando se puso encima de él. Era una gran piedra pues no podría usar ese truco.
— Summer me lo ha dicho y yo lo he notado así que al menos sé que no pasó nada — termino de vestirse y se sentó en la cama pensativo.
— Pero, estoy segura de que me besaste. Mira las marcas en mí y en tu cuello — le señaló deliberadamente, así más adelante tendría con que arrinconarlo haciéndole saber que no podía rechazarla.
— Si ese fue el caso te pido perdón Mitzy, no quise hacerlo y será mejor que dejemos el tema aquí — se abrochó sus pantalones y zapatos y camino a la salida — me disculpo y espero que no menciones esto nunca más.
Mitzy se sintió herida por el hecho de que él quisiera olvidar el asunto, vamos ni siquiera la miro ni un segundo. ¿Acaso su cuerpo no era lo suficientemente atractivo? ¿Sus pechos no eran deseables? O ¿Sus labios carnosos?
— Tranquilo Samuel, quizás solo fue un percance extraño — busco su bata y se la puso, debía ceder está vez de lo contrario el sospecharía algo y la alejaría — además aún estoy dolida por lo de Sean así que... Quizás me invadió el recuerdo — Samuel suspiro y creyó su excusa, no quería dañar su amistad por una estupidez. Así que tranquilamente camino a la sala, no había pasado nada así que solo tenía que estar tranquilo y explicar a Summer su ausencia.
Debía sentirse bien por no haberle fallado a su esposa, pero aun así sentía un tremendo abismo en su corazón. Cómo si algo le dijera que no estaba bien estar ahí o que debía alejarse de Mitzy.
« Es una estupidez, ella es mi amiga y nada más » intento justificarse y tratar de calmar esa ansiedad que no lo dejaba tranquilo.
— Me voy Mitzy, nos vemos más tarde en la oficina... — se paró antes de salir y volteo a mirarla — Y por favor ni una palabra de esto — le advirtió, aunque en el fondo confiaba en ella.
— Entiendo Samuel, tranquilo — con una sonrisa fingida despido a Samuel lo más lejos posible. Quería llorar y lamentarse por el hecho de que él no la miraba como quería.
— Gracias, nos vemos — tomo sus llaves y salió del apartamento de Summer.
Bajo las escaleras y vislumbro el amanecer que apenas daban los primeros rayos de Sol. Suspiro cuando subió a su auto y trato de serenarse.
« Calma Samuel no pasó nada, solo fue un efecto del alcohol y nada más » encendió el auto y se alejó lo más que rápido que pudo. No quería lastimar a su esposa, pero tampoco quería perder a su amiga.
No sabía si contarle a Ricky que lo más seguro es que le daría una buena reprimenda y no solo eso le haría confesarlo a Summer lo que le daba pavor. Solo le había contado que Mitzy trabajaba en la empresa, pero no que era su asistente.
Sabía que ella se enojaría por las cosas del pasado, pero quería confiar en que eso era una página atrás y Mitzy no tenía ningún sentimiento por el cómo Summer afirmaba.
Mitzy lo vio irse y desquiciada tiro todo lo que había en la mesa del centro. No había previsto que el reaccionaria así, le dolía en el alma saber que el hombre de su vida ni si quiera sentía deseo por ella. Constantemente miro su miembro en busca de una señal, pero, nada.
Se sentó en la sala llorando y pensó en su próximo movimiento, al menos había sembrado algo y ahora tenía que buscar más formas de pasar sola con Samuel, así como buscar alguna situación en la que él pueda desconfiar de Summer.
Con una nueva perspectiva se levantó, limpio lo que había tirado y se dio un buen baño relajante. Debía ser paciente pues Roma no se construyó en un solo día. Al menos él dijo que no quería perderla y eso era un punto para ella, Samuel la tenía en su corazón así que podía competir bien contra la arrastrada de Summer.
Samuel dio varias vueltas antes de llegar a casa, intento quitarse las marcas en el cuello y casi no logro nada. Esperaba que Summer estuviera dormida así él podría bañarse y quitar esa sensación que tenía en el cuerpo.
Quería evitar las preguntas de su esposa pues sabía que ella era muy intuitiva y podría delatarse muy fácil. Respiró antes de bajar de su coche que ya estaba estacionado en el garaje y salió para entrar en su casa.
Entro sigilosamente y miro que todo estaba sumamente tranquilo y limpio, tal como siempre lo mantenía su Summer. Sintió una alegría en su corazón de saber que su esposa estaba ahí y quería repetir lo de días atrás pero no era lo correcto.
Subió las escaleras sin hacer ruido y entro al cuarto donde los dos dormían. Cuántos abrió la puerta vio a su esposa dormida en la cama, estaba hecha bolita y enrollada con toda la cobija lo que le dio gracia.