Naruto salió volando por un jutzu de aire. El más potente que habían visto jamás. Un ninja de la hierba intentó hacerse pasar por el, pero Sasuke le tendió una trampa y este cayó en redondo. Al menos eso creían...
En cuanto Orochimaru se dio cuenta de que las estrategias de Sasuke eran ridículas, decidió probar su habilidad de pelea. Pero antes de eso, un poco de miedo como aperitivo no estaría mal. El Sanín los atacó con un genjutzu, ni siquiera uno muy fuerte. Los genin incluso sabrían enseguida que no era real. De la kunoichi esperaba ya esperaba esa reacción, pertenecía a un clan insignificante sin ninguna clase de talento. Pero no del Uchiha. Había escuchado que los Uchiha eran invencibles en cuanto a genjutzu se refería. Sin embargo los dos genin estaban paralizados de miedo.
Orochimaru estaba decepcionado. Realmente creyó que Sasuke Uchiha sería el heredero apropiado. Teniendo en cuenta que Itachi había escapado de él su hermano era un gran prospecto. Decidió que los eliminaría solo por que estaba hartó de sutileza. Esconderse en Konoha había sido más problemático de lo que esperaba. El cuarto Hokague parecía casi omnipresente con ese jutzu del segundo.
Para su sorpresa, el niño Uchiha recurrió a una acción desesperada. Se enterró un kunai para poder reaccionar y esquivar los de Orochimaru. Eso despertó la curiosidad del hombre serpiente. Sasuke no era tan inútil después de todo.
Siguió atacando, mandando a sus serpientes para arrinconarlo. Intentaba despertar esa parte de los shinobis que desea sobrevivir desesperadamente. Eso que, a algunos, los impulsa a avanzar un paso más y a otros los obliga a huir sin mirar atrás. Quería ver de que tipo era el Uchiha. Pero él simplemente se mantenía retrocediendo y esquivando. Había hecho una acción desesperada y solo le había servido para no quedarse pasmado. En algún momento pensó en usar a la chica pero a Sasuke no parecía importarle mucho.
En ése momento llegó Naruto. Había mandado a una serpiente a eliminarlo, pero el hijo del Hokague se liberó. Si no fuera hijo de Minato, Orochimaru hubiera intentado algo con él, pero estaba demaciado en el centro de atención, más de lo que podía manejar.
—... Por cierto. ¿Cuál era la contraseña? —Dijo el rubio para terminar su entrada dramática. El enano le recordaba un poco a Jiraiya. Los recuerdos de su antiguo equipo de Konoha aún ocupaban su mente, cuando Uchiha hizo algo que confirmo los temores del Sanín.
—Esta bien, toma el pergamino y déjanos ir. ¿Eso es lo que quieres, no?
Orochimaru estaba nuevamente decepcionado, pero sonrió para ocultarlo.
—Si, es lógico. Las presas a veces prefieren dar algo más valioso para distraer al depredador y salvar sus propias vidas.
—¿De que hablas Sasuke? Debes estar bromeando.
—Cállate Naruto. No sabes en lo que te estás metiendo.
Orochimaru los miraba discutir en medio de la peor situación posible. Al parecer el rubio era capaz de influir en Sasuke, eso no era bueno para el. ¿O si?
—Tómalo. —Dijo Uchiha lanzándole el pergamino, pero el rubio hizo algo que abrió muchas posibilidades. Saltó sin pensarlo y atrapó el pergamino antes de que llegara a Orochimaru.
—¿Quién eres? —Preguntó Naruto mientras guardaba el pergamino en su porta shuriken. Incluso Orochimaru quedó pasmado por la estupidez del hijo del Hokague. Habría reído si no estuviera en medio de una representación.
—¿Qué estupidez dices Naruto? —Preguntó perplejo el acusado.
—Pero, el es Sasuke. —Comentó Sakura confundida. Seguramente sus compañeros creían que se había vuelto loco.
—No hay manera... Puedes parecerte a él, moverte como él, hasta sonar como él. Pero no eres Sasuke. El Sasuke que conozco no se rinde tan fácilmente, no señor.
Orochimaru casi tuvo un orgasmo en ese momento. Definitivamente el rubio influía en Sasuke, y eso le daría justo lo que buscaba. Uchiha estaba sin habla, impactado por el razonamiento de Naruto. Éste se dio la vuelta encarandolo, sin saber que estaba frente a uno de los legendarios sanin de konoha.
—No se quién eres y no me importa. Ahora, nos darás el pergamino o te lo quitaré a la fuerza.
Orochimaru sonrió aún con la cara de la kunoichi de la hierba.
—Esto será entretenido. —Dijo y enseguida hizo una invocación. Una gran serpiente apareció bajo su mano destrozando los árboles de alrededor en el proceso. Ésta atacó a una orden de Orochimaru pero Naruto y Sasuke la esquivaron a tiempo. Sakura estaba fuera del alcance de su ataque. El sannin se sostenía con chacra sobre la cabeza de la invocación, guiando sus arremetidas. Naruto profirió un grito de batalla cuando tuvo a la serpiente enfrente, y se lanzó al ataque. Con puños y patadas, sorprendentemente, logró hacerla retroceder. Sin embargo el sannin no se iba a quedar de brazos cruzados. Usó su lengua para atrapar a naruto por los hombros. Naruto se quejaba de lo asqueroso que era eso, cuando lo arrojó con violencia contra un árbol cercano.
Sasuke estaba pasmado viendo la pelea. Orochimaru no estaba seguro de lo que pasaba por su mente, pero tenía una agenda que cumplir. Con una rapidez sorprendente para una criatura tan grande, la serpiente se abalanzó contra Sasuke. Éste abrió mucho los ojos pero no pudo hacer más. La serpiente se estrelló contra algo y se detuvo en seco, así el sannin comprobó una de sus sospechas. El hijo del cuarto era un jinchuriki, era lo único que podía explicar tanta fuerza.