JOHANSI
Al llegar a la salida de la escuela logro divisar a Holden encaminándose hacia una calle que mucho de nosotros conocemos como "La calle de la perdición", acaso no tiene miedo, digo en esas calles hay malandrines.
Pero obedecí mi instinto y lo seguí, siento que estoy lo suficientemente comprometida con este reto, además, quien sabe, puede que por fin se quite su capucha.
Los minutos pasaron y yo por supuesto seguía con la cacería de seguir sigilosamente a Holden, logro ver como saca unas llaves de su casaca y entra a aquella casa, de verdad, no puedo creer que este barrio tenga unos parques muy bellos, la casa de Holden queda frente a uno y me atrevería a decir que Holden es afortunado por vivir en un lugar tan bello, fascinante, ahora le tengo envidia.
Seguía mirando aquella casa de dos pisos de fachada color beige y tejado color naranja esperando a que Holden saliera una vez más, tan solo una vez más, ya sea para comprar o respirar aire fresco.
Aquella concentración que tenía se esfumó cuando mi celular empezó a timbrar, ¡Oh no! Pese a estar en otro continente mi madre me sigue llamando, pero los más seguro es que lo hace por pedido de papá, viendo la hora, ya son van a ser las 4:00p.m, de razón me llaman.
- Aló mamá. - Y eh aquí el interrogatorio, en 3, 2, 1.......
- ¿Dónde estás?. - Eh ahí su típica pregunta
- En casa de una amigo.
- Haciendo.....
- Un trabajo para la escuela
- No me digas, de "anatomía"
- ¡MAMÁ!
- Solo digo, te conozco, pero ya sabes mi recomendación, siempre...
- Sí, sí mamá, "Siempre usa protección". -Repito la recomendación que siempre me hace.
- Solo te lo recordaba, ¿A que hora estarás llegando a casa?
- Como a las nueve, ¿Por?.
- Como que a las nueve señorita, y así dices que no es "Trabajo de anatomía".
- Mamá, es un trabajo de literatura.
- Si, de literatura erótica.
- ¡MAMÁ! Quieres que sea honesta contigo, pues el trabajo que tengo que hacer es con un compañero de la escuela que no me cae bien, y yo no le caigo bien a él.
- Si claro, sabes, apuesto que te enamorarás de ese chico y tendrán una relación.
- En tus sueños mamá, él me odia, y yo lo odio, el sentimiento es mutuo.
- Pero ya sabes lo que dicen, "Del odio al amor, hay un solo paso".
- No tienes arreglo mamá, sabes que mamá, mejor te corto la llamada, debo continuar con el trabajo de literatura. Adiós mamá
- Adiós cariño, y no lo olvides, usa..
- ¡YA MAMÁ!
- Bien, bien, como tú digas, adiós tesoro.
Y así corto la incómoda llamada con mi mamá, pero veo como Holden sale de su casa, al fin, y así sigo con mi cacería, sigo a Holden, veo como ingresa a una cafetería cuyo, eh aquí un nuevo dilema, ¿Ingreso o no ingreso?
HOLDEN
En cuanto acabé todo en mi casa me fui a trabajar, de una u otra manera dejé a mi padre en su cama, pero mientras iba camino a mi trabajo sentía que alguien o algo me seguía, me asusté, simplemente caminaba rápido, en cuanto llegué a la cafetería donde trabajaba me puse mi uniforme, de verdad agradecía que nuestro uniforme consistiera en un simple polo verde hoja, un delantal de color verde petroleo y una gorra del mismo color, ¿El pantalón? Pues podía ser de cualquier color, al menos eso era bueno, el otro pro que le encontraba es que usábamos gorras, gracias al cielo.
¡Oh vamos! El universo está conspirando en mi contra o que mierda.
Y es ahí cuando la veo entrar a la cafetería con una sonrisa de lado con la misma ropa que uso en la escuela, de verdad, tal pareciera que el mundo conspira en mi contra, llevar a Johansi Brown a la cafetería en la que trabajaba era demasiado cruel, hasta para ella, nos bastaba con estar en el mismo grupo de trabajo de la escuela, por favor, por lo que más quieras universo, que no se siente en el área que atiendo.
¡Por qué a mí!
Ella toma asiento justo en el área donde YO atiendo a los clientes, de verás, este día no pudo ir peor.
Suelto un suspiro resignado a tener que atender a la cerebro de nuez , y es así como me aproximo a ella y le ofrezco una sonrisa forzada.
- Buenos días señorita, aquí le dejo el menú, en cuanto tenga su pedido decidido, no dude en llamarme. - ¡Demonios! Sí que es difícil tener que fingir una sonrisa ante ella, en especial porque me desagrada, el punto es que le entrego el menú y me retiro, al voltear solo inhalo y exhalo profundamente porque no la veré de aquí en unos 10 - 15 minutos.
- ¡JOVEN!. - ¡Pero qué! Tan rápido decidió, pero decido inhalar y exhalar de mala gana para dar vuelta nuevamente y tomar su orden.
- Sí, señorita, ¿Puedo tomar su pedido?. - No sé, pero siento que mi sonrisa forzada se va convirtiendo en una sonrisa maliciosa ya harto de ella, ya sé, solo han pasado minutos, pero imagínense tener que verla en la escuela y ahora en la cafetería en la que trabajo.
- Sí, por favor, quiero un Bangers and Mash, un pudin de Yorkshire y un jugo de plátano, gracias, ya puede retirarse. - Escucho con atención su pedido para no cometer error alguno y luego el día de mañana me ande agotando la paciencia que no tengo, al menos no con ella.
- Bien señorita, me retiro, le traeré su pedido en cuanto este se encuentre listo. - Una vez más inhalo y xhalo con fuerza, se podría decir que fue audible porque Aidon me mira con cara de "Que fue Holden, cálmate", volteo mi rostro y veo como ella se tapa la boca de manera delicada y sutil, acaso se esta burlando de mí.
#17887 en Novela romántica
#3369 en Joven Adulto
romance amor adolescentes, romance y desamor, traicion amor venganza amor verdadero
Editado: 06.08.2022