capitulo 19

Llega el aclamado fin de semana.

Estoy terminando de arreglar mi atuendo, consiste en algo sencillo. unos Jean ajustados, polera para nada ajustada, algunos accesorios, mis tenis blancos y listo.

Bajo y me espera Noah y Nick en la entrada de mi casa. Dios se ven hermosos juntos, hasta diría que son padre e hijos.

Nick, lleva un polo blanco, Jean negro y lo tenis a juego, Noah por igual. Río por eso quería el vestirle.

 —mujer pensé que te habías muerto —exclama exagerado Nick.

— mami vámonos— dice mi hijo antes de que le reclame a Nick, este saca la lengua en forma de burla.

—iremos en mi auto— dice Nick encaminándonos a este —antes pasaremos por mi empresa tengo que buscar algo—dice abriendo la puerta trasera a noah y la de copiloto para mí. Nick pone en marcha el auto y vamos escuchando canciones infantiles y riéndonos a carcajadas.

—taza, tetera, cuchara, cucharon, plato hondo, plato llano... —cantamos a todo pulmón entre risas.

—atención, atención, este juego va a empezar, atención, no se puede equivocar... —cantamos todas las canciones hasta que Nick para el auto. bajamos entre risas y burlas hacia Nick, cantaba las canciones con mucha pasión y asiendo muecas súper raras y graciosas.

Sostengo a Noah y comenzamos a caminar hacia las enormes puertas de la empresa, es la primera vez que vengo y puedo decir que es sumamente grande por fuera y por dentro, su decoración es muy llamativa.

La atención se centra en nosotros, algunos nos mirar con ternura, otros con envidia y otros también con miradas que no puedo descifrar ¿asco? hacia mí. Miro mi atuendo y no veo nada raro. Nick se acerca y me susurra al oído.

—no te preocupes mi cielo, es solo que quieren ser ellas las que estén a mi lado— da un beso a mi mejilla y lo miro asombrada por lo que dijo —siéntete afortunada estás hablando con el puto amo de aquí— dice con superioridad, sonrió divertida, Nick y sus ocurrencias.

Algunos del lugar se detienen a saludarlo con respeto.

La oficina de Nick queda en el último piso, así que tomamos su elevador privado y llegamos a esta.

su secretaria nos saluda, este solo asiente con la cabeza, noah y yo, respondimos a su saludo. Entramos a su oficina y me asombro, es bellísima, con una vista esplendida y maravillosa. Noah por su parte Va al sillón giratorio. Ya veo que se familiarizo con la oficina.

 —puedes tomar asiento no tardo mucho —me sonríe desde su posición.

Lo hago como niña obediente y tomo uno de los catálogos que se encuentran en la oficina y comienzo a verlo, nada interesante, pero me entretiene.

— vámonos— dice Nick, me levanto, tomo a Noah de la mano y salimos de la oficina.

...

Pasamos a una galería de arte pedida por Nick, al museo natural favorito de Noah y a una biblioteca recomendada por mí. Nos llevamos recuerdos de todos los lugares a los que fuimos, comimos a un restaurante que Nick nos llevó. Cayo la noche y decidimos volver.

En estos momentos vamos en el auto, todos estamos agotados fue un día muy largo, pero valió la pena, nos divertimos bastante. Noah se encuentra en el asiento trasero durmiendo.

 —gracias Nick—digo sincera —hoy fue un día muy lindo—sonrió.

 —porque me des esa sonrisa, lo haría las veces que fuera necesaria—dice toma mi mano y planta un beso en esta. Miro sus labios y recuerdo el día que me beso, sus labios con los míos juntos. Sacudo la cabeza borrando esos pensamientos. Creo que estoy confundiendo las cosas, somos amigos y aprecio mucho a Nick, es solo eso.

— uff mírala, mírala no más —dice canturrearon Nick —¿en qué estás pensando pecadora? —sonríe divertido.

—nada —no me había fijado que me quede embelesada viéndolo, volteo rápido la cara sintiendo vergüenza.

—hare como que te creo, pecadora—dice divertido.

 —¡¿qué diablos?! —Nick para el auto al frente de la casa. La puerta esta derrumbada, y me pasmo del miedo. Hay oficiales afuera.

 —quédate y no salgas —dice un Nick preocupado. Iba a hablar, pero él ya había salido.

Suspire nerviosa viendo como Nick se dirige donde los oficiales, se encuentran hablando. Siento como mis manos tiemblan y sudan por el miedo.

—mami— me sobresalto. Respiro profundo tratando de calmarme. Vamos Karen es solo Noah —¿qué paso? ¿porque hay policías fuera de nuestra casa? — pregunto somnoliento, pasándose las manos por los ojos.

—No lo sé— digo —Nick fue a ver, así que no te preocupes—digo para que no se asuste.

En eso llega Nick abre la puerta y arranca el auto. No dice, ni una sola palabra, puedo notar que esta tenso y enojado como aprieta el volante.

—Nick—lo llamo y no responde— ¿qué dijo la policía? ¿a dónde vamos?  —pregunto preocupada.

—iremos a mi casa —dice tensando la mandíbula. Suspiro y no sigo insistiendo. El transcurso en el auto se vuelve incomodo, me volteo y miro a Noah, se volvió a dormir parece un ángel... mi ángel.

Después de unos momentos llegamos a una lujosa casa, el portón se abre dejándonos pasar. Nick detiene el auto y se baja yo me dispongo a hacerlo lo mismo iba a tomar a noah en el asiento trasero, pero Nick se adelante y lo carga en brazos.

—sígueme —es lo único que dice, camino detrás de él fijándome en su espalda, los músculos de esta están tensos, entramos a la enorme casa. No me detengo a observar, solo sigo a Nick. Subimos por las escaleras, se detiene en una puerta y la abre.

Es una habitación, él va directo hacia la cama y lo recuesta en ella. yo mantengo una distancia prudente observando todo, oigo como suspira pesado, se voltea y me mira en sus ojos puedo ver un mar de sentimientos. Me hace una señal, para salir de la habitación. Salgo y veo como él se encuentra detrás de mí.

Me sobresalto cuando su cuerpo choco con el mío en un abrazo fuerte, escucho la respiración acelerada de Nick y como me estruja más a sus brazos.