La flor imperial nos saca de Egipto y nos lleva a nuestra base a Italia nuevamente. Siento que me están retirando de la misión de alguna forma u otra.
—¿Por qué estamos aquí?
—Necesitamos pensar en nuestro plan de forma más tranquila. Estar en esta base nos hará reflexionar— dice Charles.
Alisto la cama para que Galata descanse y los miembros de la flor imperial se quitan su armadura y armas para también darse un respiro. Lo que me preocupa son mis amigos que deben de estar preocupados por mí y yo por ellos.
—¿Dónde están ellos?
—Deimos tuvo que llevarlos a la ciudad subterránea para usarlos como conejillos de indias. Si usamos las cámaras inteligentes, lo único que encontraremos son infiltrados a los cuales tendremos que atacar, pero no dirán su paradero— dice Andrew.
—¿Cómo podemos entrar?
—No hay forma o no sabemos exactamente como entrar— dice Charles decepcionado.
Lexintong está revisando a Galata por si tiene algo metido en el cuerpo o también tiene alguna dificultad con su salud. Yo solo me recuesto en mi sofá y cierro los ojos para imaginar que nada de esto pasa.
Al despertar veo a toda la gente actuando de forma muy extraña y acelerada, como si una guerra estuviera llevándose a cabo ahora.
—¿Paso algo?
—Ven a ver esto— dice Lexington.
Las noticias nos informa del derrocamiento del rey de España. Un grupo de rebeldes entro al palacio real de su majestad en Madrid. Esto tiene que ser obra de Deimos porque no hay posibilidad de que puedas entrar a un lugar tan protegido sin siquiera dar guerra, sin duda esto lleva planeado varios meses de antelación
.
—Esto es obra de los infiltrados — dice Charles
—Los infiltrados han estado trabajando desde hace mucho y la pregunta más importante es ¿Por qué España?— digo.
Uno de los pilares se encuentra en las costas de Barcelona, así que sin duda alguna están haciendo este golpe para poder llevarlo a la superficie o quizás lo están resguardando.
—Será difícil entrar e incluso será muy difícil saber como atacar— dice Holland.
Creo que lo más importante ahora es encontrar a mis amigos para luego idear un plan y con ello poder enfrentarlos.
—Debemos rescatarlos — digo.
—Tus amigos están en un mundo que nosotros desconocemos y que no tenemos idea de como entrar— dice Andrew.
—Tenemos una entrada.
La mejor forma de entrar es ir a España para saber como ingresar. Uno de los infiltrados debe tener un acceso o portal, puedo atreverme a decir que tiene un mapa de las ubicaciones en dónde las tropas deben entrar. No puede deambular por ahí como si no pasará nada; son estrategas, son inteligentes, así que tendré que ver como paso.
La flor imperial conoce el riesgo de esta misión, entraremos por vía aérea para que yo salte y llegue a la parte céntrica de la ciudad. Lo que me gusta es que podre aterrizar en uno de los nuevos vehículos, la motocicleta antigravedad; ruedas que no están en el suelo, sino que crean su propia gravedad y me ayudan a viajar más rápido.
—Conoces el riesgo — dice Holland.
—Son mis amigos y mi equipo sin ellos no iré a ningún lado — digo.
Llegando a suelo español me tiro por los aires mientras volteo, veo a un grupo de militares persiguiendo el avión, por el momento ellos estarán bien. Del lado derecho veo el paquete que cubre la motocicleta.
Al aterrizar trato de usar el paracaídas que me lleva a un edificio en lo más alto y, por lo tanto, un grupo de personas esperándome para atacar.