Capítulo 20: Detención de los pilares

Cuando caemos del vehículo observamos el panorama de la ciudad que aún está preparada con todos sus ciudadanos listos para entrar en guerra. No me sorprende que Leo nos esté rastreando para llevarnos con Deimos.

Los muchachos y yo decidimos escondernos en uno de los callejones y analizar la situación. El problema está más que claro, la ciudad está lleno de soldados principiantes y experimentados, un ejército con armas que están mejores diseñadas y avanzadas con referencia a lo que nosotros tenemos. 

—Algún plan — dice Tania.

—Hay ciudadanos armados por todas las calles. Si vamos por el suelo, los drones nos detectarán fácilmente — dice Kaz.

—Necesitamos un plan — dice Hanna. 

—Los infiltrados — sugiero.

—Tiene los dispositivos para hacerse pasar por personas en la superficie. Ocultar en vez de esconder — digo.

En ese momento un grupo de guardias está acercándose, así que esperemos a que lleguen a nuestro callejón para la emboscada. Lanzo una carta de humo, mientras Hanna y Kaz los noquean, me arrojan los dispositivos de encubrimiento y tomamos sus rostros para ir desapercibidos; también tomamos los mapas y posible información que nos sirva para lograr tender una trampa y también conocer sus estrategias.

Caminamos al lado norte que es dónde se encuentran los preparativos para el lanzamiento del pilar, además de encontrar una de las entradas al mundo superficial. Observamos como la parte de arriba se abre lentamente y como los ciudadanos lentamente se van para evitar que les caiga la tierra. Debe ser una parte desolada en alguna parte de Inglaterra, ya que no hay edificios o estructuras que se derrumben. 

Los muchachos y yo seguimos a la multitud poco a poco hasta ver como el pilar sube lentamente, lo mejor es subir a los techos de los edificios que se encuentran cercanos al lanzamiento para poder idear un plan. El pilar se encuentra con varias estructuras, entre ellas los propulsores y también un armazón que sirve para romper las barreras atmosféricas.

Es una dificultad bastante grande porque pueden lanzar los otros pilares en los diferentes países y ya no contamos con ayuda para tratar de ser estratégicos, lo único que nos queda es detener este pilar aquí y ahora.

Mientras todos se quedan observando el momento de ignición del pilar, nos dirigimos a lo que es la base central para saber como detenerlos. Hay un equipo de científicos en la cabina que monitorean en todos aspectos: meteorológicos, atmosféricos y también geográficos. 

Entramos por la fuerza lanzando cartas eléctricas que los dejan inconscientes. Tratamos de usar los comandos para detener el despegue, pero en ese momento siento como una cuerda me jala desde mi pierna izquierda y me arrastra por el suelo.

—Te tengo — dice Leo.

Él me toma y me lleva a la parte del pilar que al parecer cuenta con su propia gravedad para que podamos luchar.

—Escucha Leo. Déjame en paz y deja de molestarnos — digo.

—He estado en este infierno subterráneo por años y por tu culpa otro disfruto a Galata— dice furioso

—Ese no es mi problema — dice.

Ambos desenfundamos nuestras armas y comenzamos a pelear. Intento dañarle las piernas con las varas, pero él logra bloquearlos. Decido mejor sacar mi espada que puede absorber la energía de sus ataques. 

Él logra desubicarme con una luz aturdidora, así que lo mejor que hago es activar el escudo. Salto encima de él y trato de dañarle la cabeza con mi espada, pero ese logra darme una patada en el estómago justo en el momento justo.

—Te has vuelto fuerte — digo.

—Eso pasa cuando te reprimen por años aquí — dice.

Lanza varias balas que logro bloquear hasta que una me da en el brazo izquierdo, eso me debilita al momento de tomar una de mis armas, pero debo seguir en el intento, corro hacia él y trato de dañarlo, pero solo logro que me da un golpe en la espalda. En ese momento el pilar logra despegarse un poco del suelo mientras Leo me sigue golpeando.