"solo en sueños puedes tener lo que deseas entre los dedos.”
en un mundo donde los sueños pierden su valor; un niño sueña: con ser vapor, con ser brisa, con ser nubes. es un pequeño enamorado de la vida y de la fantasía que pasa desapercibida por todos. pasa la mayor parte de las tardes en la ventana soñando; con volar, se imagina volando vestido de blanco jugueteando con las nubes, se imagina usando las estrellas como decoración en su ropa y zapatos... la tarde que vio por primera vez el mar; se imagino montando un caballo echo de la espuma de las olas. es un niño muy pequeño con una imaginación infinita, ve el mundo con algo de fantasía. Una noche se quedó dormido con la ventana abierta. sintiendo el frío viento nocturno el sueño de siempre se hizo presente: un hombre echo de nubes le pide permiso de formar parte de su vida:-siempre he querido saber que se siente soñar, te he observado desde mi nube y deseo sentir lo que tu sientes. El sueño hasta esa noche había terminado de la misma manera: el niño despierta sin dar respuesta al extraño hombre. La siguiente noche fue distinta: observo al hombre con atención. -siempre he querido ser parte del bello paisaje que existe en el cielo. Dijo el pequeño. -entiendo. Dijo el extraño hombre Dicho esto y sin hacer preguntas, el niño le dio la mano a aquel extraño e inmediatamente despertó. Sus días siguieron como siempre. el pequeño creyó que tal vez solo había sido un sueño fantástico más; pero un día una extraña Mancha de tono claro apareció en su mano y poco tiempo después aparecieron más manchas en sus brazos, pecho y pies. Cada Mancha tenía una forma distinta y las observaba al tiempo que aparecían. una noche volvió a soñar con el hombre de nubes: -¿cuando dejaran de aparecer estas manchas?. pregunto el niño haciendo muecas. - cada una de tus manchas es una nube. Dejaran de aparecer cuando ambos cumplamos el deseo pedido. Yo ganó vivir experiencias únicas en la mente de un soñador. ver, oir, sentir, vivir, como un niño. Tu tendrás a cambio mi fuerza y alguna virtud que se me dio como guardián. Pero debemos tener cuidado si das un mal usó de mis dones me devolverán a las nubes y tu serás vapor. -dices que dejaran de aparecer cuando ambos cumplamos el deseo pedido ¿cierto?. -si. es cierto. - yo deseé formar parte del paisaje del cielo. Tus dones me darán eso?. - niño tu eres el cielo cada Mancha es una nube. - quiero ser nubes así como tu... Quiero poder tocar las estrellas... El hombre lo interrumpió molestó - ni siquiera yo. puedo tocar las estrellas pues existen guardianes que las protegen. Y un guardian de estrellas puede dañar horriblemente a un guardián de nubes si así lo desea. - ese fue mi deseó. Dijo el pequeño asiendo berrinche.- está bien serás parte del paisaje todos los días. Diciendo ésto el hombre puso sus manos sobre la cabeza del pequeño niño. ala mañana siguiente despertó muy animado, salió de su casa dispuesto a jugar como siempre. Pero había algo distinto aquel día; el viento se sentía diferente se oía diferente. Escuchaba un susurro suave que le decía: - cierra los ojos. El niño obedeció cerro los ojos y sintió como sus pies se comenzaron a elevar poco a poco. Volvió a escuchar el suave susurro: -eres parte de las nubes ahora. El niño abrió los ojos y vio que Estaba parado sobre una enorme nube blanca. No pudo hacer más que gritar de la emoción, miro a su alrededor y no había nada ni nadie más que el. miro hacia arriba y vio las estrellas, Su ropa era de color blanco como la nube, sus pies estaban Descalzos y su cabello despeinado por el viento. cuando al fin decidió bajar el viento le susurro:- no le muestres a nadie lo que puedes hacer. El niño comenzó a correr de vuelta a casa. Mientras corría pudo notar que el viento le obedecía, saltó sobre un charco y el agua quedo suspendida frente a el cómo si esperará que el niño le mostrará alguna dirección en la cual caer, el niño corrió más rápido ahora asustado y sin aliento. Por un momento sintió que el tiempo se detuvo. Paso por su mente una imagen del día en qué vio el mar; aquel día era tan distante ahora en sus recuerdos... Se sorprendió al ver que estaba flotando, como si el viento sostuviera sus pies. comenzó a elevarse nuevamente... - llévame a la playa más hermosa. Suspiro el niño. Pocos minutos después ya se encontraba en una playa Hermosa, de arena blanca y aguas cristalinas. El viento lo bajo suavemente, cuando por fin sus pies tocaron la arena suave, el viento comenzó a silbar una hermosa canción; De pronto una voz gruesa le llamó: - niño ven aquí. Al darse vuelta el niño quedó sorprendido pues quien le llamaba era un hombre formado de agua. parecía difícil observarlo pues su apariencia era cristalina. Este hombre tenía una voz tenue y fuerte ala vez; -niño acércate. Dijo el extraño hombre. El pequeño sentía miedo sin embargo su curiosidad lo guiaba. - eres de agua. Afirmó el pequeño tartamudeando de miedo. -yo soy; el agua, Soy el mar. Dijo suavemente el extraordinario hombre. -es fantástico. Dijo el niño muy emocionado. -¿ahora puedo ver lo que los demás no ven?. -si. Dijo el extraño hombre. -por qué?. -tu imaginación te permite ver. Para algunas personas lo obvio es lo único que existe; Los humanos son egoístas y piensan que el mundo está echo solo para ellos. Sin embargo en el mundo existen seres que ellos jamás podrían entender. Ellos son ciegos, pero tu;nos veías y nos escuchabas: no sólo era tu imaginación éramos nosotros. - pero ahora es distinto. Dijo el pequeño observando el paisaje. -aceptaste el trató y eso será el final de tu historia. -pero ¿mi madre?. -ella no te recordará, el viento y el tiempo lograran hacer que te olvide. cuando tu tiempo se termine ella ya te habrá olvidado. -el no me lo dijo. -tu no preguntaste más. Serás vapor y no existe ningún modo de evitarlo. Y en realidad no te importa. -creó que ya lo sabia. -tienes poco tiempo. Decidí mostrarte el tesoro más valioso que resguardo entre mis aguas. El hombre saco de entre las olas una hermosa piedra tornasol:- esta piedra es el tesoro del planeta; hace muchos años un volcán gigantesco salio de entre las aguas y lanzo esta piedra. - esta es la última lágrima que se desprendió de la tierra... Su aparición provocó que muchos guardianes se reunieran para escucharlo. -es poderosa y su tarea será cumplirle a los guardianes lo que ellos deseen... Los guardianes comenzaron a discutir sobre que es lo ¿que podrían pedir?; -¿que podríamos desear? A mi parecer no nos falta nada. Afirmó un guardián de nubes. -desearan lo único que se les ha negado. Diciendo esto lanzo la roca a los cielos los relámpagos iluminaron con algo de violencia el cielo. La roca permaneció suspendida entre las nubes. Cuando comenzó a descender, el volcán anunció:-el mar tendrá la tarea de proteger esta roca. Pues en su momento será deseada por todos los guardianes. La muerte estaba presente y escucho lo mismo que nosotros. Sin embargo si alguien desea esta roca es ella... los ojos del pequeño se llenaron de Lágrimas. -¿que te ocurre?. Pregunto el mar. -creo que no estoy listo para esto... El niño Sollozaba. -no lo estas. Afirmó el mar mirando las estrellas. La noche no tardo en llegar y el pequeño volvió a casa. Observo a su madre dormir despeinada y con las medias rotas. - tal vez ya empieza a preguntarse el motivo por el cual trabaja tanto. Pensó el pequeño -no. Susurro una leve brisa. De pronto su madre despertó, lo miro y acariciando su cabeza le dijo: - mi pequeño Sebastián ¿que haces despierto?; vamos duerme. Dijo la madre mientras abrazaba a su pequeño. En sus sueños el niño vio al hombre hecho de nubes observo su mano y vió desaparecer una de sus manchas. -mi madre no recuerda mi nombre. Dijo el pequeño muy triste observando su mano intentando esconder sus lágrimas. -yo tampoco se tu nombre niño. Dijo el guardián de nubes mirando irónicamente sus dedos blancos. -mi nombre... -tu también lo olvidaste? Como sabes que Sebastián no es tu nombre si tu tampoco sabes... -mi nombre es
Héctor. Dijo el niño con coraje. -no me dijiste que de cualquier modo voy ha desaparecer. - cierto pero yo estoy cumpliendo mi promesa. Visitaste una playa que muy pocos humanos han visto, has sido parte del paisaje. Y por mi lado ya jugué como un niño sobre una suave nube, ya rei a carcajadas, y sentí felicidad y tristeza así como un niño. Por ese motivo desapareció la Mancha de tu mano. Ambos hicimos lo que deseábamos. - el hombre de la playa me dijo que; tengo poco tiempo. -tienes dos días Héctor. El pequeño despertó preguntándose si su nombre si era Héctor, de pronto su madre lo llamó a desayunar:- ¡Leandro Esta listo el desayuno!. Grito la madre. El niño bajo y con tristeza observo a su madre. La mujer sirvió huevos revueltos en dos platos y vacío leche en dos tazas viejas. Mientras desayunaban la mujer observaba fijamente al pequeño. -ya no sabe quién soy. Pensó el niño. La mujer salió de la casa para luego dirigirse al trabajo. -son las once de la mañana con dos minutos. Dijo el pequeño. se observo en el espejo que colgaba de un clavo en la habitación. -mis ojos son color miel, mi piel es Morena y mi cabello es café obscuro... Soy muy Delgado y también soy muy bajó, Mis labios son delgados y mis dientes están sucios. Preocupado salió de la casa y le pidió al viento ayuda para recordar su nombre, el viento lo hizo ver la casa por fuera. -es pequeña solo tiene dos habitaciones y esta inclinada. es muy gris y el baño es muy pequeño... El viento lo bajó y susurro;- tu nombre no es tan importante, y tu madre ya no sabe quién eres. mañana por la noche ya serás vapor. -¿como es posible que todos me olviden?. Pregunto el niño. De pronto el viento comenzó a soplar con fuerza levantando al pequeño; el viento se llevó al niño a una nube cercana dónde se encontraba el guardián de nubes con el que hizo el trato. - mi nombre es cirros; mi nube es conocida como suspiro. - yo ya no estoy seguro de cual es mi nombré. Dijo el pequeño molestó. -me queda solo un día y medio. Continuó. -yo solo quiero ver a través de los ojos de un niño. Los niños ven el mundo de maneras distintas... Al crecer dejan de ver con admiración dejan de sorprenderse. Escuchar como niño es: no escuchar los problemas, o los asuntos complicados que afligen a un adulto. - yo solo soñaba. No me quedaba más que imaginar. Ahora tengo miedo de lo que pasará mañana... Diciendo esto al pequeño se le llenaron los ojos con lágrimas. Cirros se acercó y con sus blancos dedos limpio las lágrimas del pequeño. - tu serás importante mientras continúes siendo distinto. Diciendo ésto el niño despertó: parecía una mañana cualquiera con un paisaje común, su madre lo llamó amorosamente. -Santiago baja a desayunar. El niño se emocionó, revisó su cuerpo y las manchas ya no estaban. se corrió veloz para abrazar con fuerza a su madre. El día parecía maravilloso, paso la tarde con su madre escuchando su manera peculiar de silbar. Al llegar la tarde Leandro salió de su casa para escuchar el silbido del viento con los ojos cerrados; el viento era fiero aquella tarde Leandro abrió los ojos y con un suspiro del viento se convirtió en vapor.