Los giros del destino

Capítulo 6: Sorpresa

Alexa

Las palabras de Gabriel Santiesteban acallan todo sonido a mi alrededor y un vergonzoso silencio se instala en la mesa, la sensación es idéntica a la que padecí cuando con 13 años en medio de una obra de teatro escolar me olvidé del diálogo de mi personaje y por más que rebuscada en mi mente no recordaba las palabras que debía pronunciar mientras era observada por un buen número de ojos expectantes.

Hago un nuevo intento pero mi garganta se ha cerrado y  acomodo mis pies en intento inútil de relajar mi cuerpo.

—Por favor, Alexa, calmate. No tengo intenciones de seducirte y pasar una tórrida noche contigo. Solo hablé de mis ganas de besarte, aunque sé que mi comentario pudo ser inoportuno, me sorprende tu reacción, especialmente, cuando te declaraste una mujer liberal y sin tapujos ante el sexo ocasional. 

—No crees que es lógico después de tus malos tratos.

—¿Estás segura qué es solo por eso?, ya me disculpé  y te explique las  razones que tuve para actuar así.

—Lo sé, pero.... decir que te muere  de ganas por besarme —digo sin terminar la frase.

—¿Es inaudito? No somos dos niños, Alexa. Hay una fuerte química entre ambos, dame tu mano —lo miró dudosa, no se qué pretende, ni siquiera sé si sus palabras son ciertas, Gabriel Santiesteban en un completo desconocido para mí, estoy acostumbrada a lidiar con el flirteo, con los enamoramiento pasajeros, pero no con la intensidad de las emociones que este hombre despierta en mí, coloco mi mano sobre la suya sintiendo que me lanzó al vacío e inmediatamente una descarga recorre mi piel —lo siente, ¿verdad?, es innegable lo que causamos el uno en el otro, pero a diferencia de  ti no me gustan las aventuras de una noche, el irme a la cama con una desconocida no es lo mío.

—¿Me estás llamando promiscua?

—No, simplemente estoy dejando claro que me gustas, Alexa, pero no tengo ningún interés en ser uno más de los hombres que han pasado por tu cama.

》Desde mi divorcio, eres la primera mujer en llamar mi atención y eso me desconcerta. No eres el tipo de mujer que me atrae, mis exnovias y exesposa se caracterizan por ser mujeres maduras, exitosas y muy glamurosas, mi exesposa ha ganado varios premios de periodismo y tiene varias especializaciones en su haber, es poliglota en cambio tu trabajabas hasta hace poco en una sex shop, eres estudiante de arte dramático, tu vestir es demasiado llamativo y eres muy joven. 

—¿Si tu mujer era tan perfecta porque te divorciaste? —pregunto molesta por su comentario.

—Porque los sentimientos cambian con el tiempo y a pesar de casarnos muy enamorados el tiempo y las exigencias profesionales de ambos hicieron mella en nuestra relación.

—¿Por qué Arturo no vive con su madre? —la curiosidad mató al gato dice el refrán, pero las palabras escapan de mi boca  antes de poder evitarlo 

—Por su trabajo, cubre conflictos internacionales 

—¿Y no te molesta hacerte cargo a solas de la crianza del niño? —me mira molesto.

—Su madre lo llama casi todos los días cuando está por fuera del país, el tiempo que logra estar en la ciudad Arturo lo pasa con ella, además cuento con el apoyo de mis padres, de mi hermana y un excelente personal de servicio.

—Si, pero eso no compensa la ausencia de una madre y un padre ¿demasiado ocupado?

—Roxana no es una madre ausente y lo admito soy un hombre muy ocupado pero en  contadas excepciones llego tarde a casa —pongo cara de escepticismo— tengo bien claras mis prioridades y mi hijo es lo primero, Alexa, me creas o no.

—¿Entonces, por qué el niño buscó mi compañía? —tal como mi padre, voy directo al grano. Y es divertido ver a Santiesteban tratando de mantener la compostura, es obvio que tengo un talento para sacarlo de sus casillas.

》Mi madre me contó que fue por mi parecido con un personaje de uno de sus cuentos infantiles, una madre armable, el mensaje es obvio ¿no crees? Tim busca una figura materna.

—El ama a su madre.

—No he dicho lo contrario y puede que mis padres me acusen de ser una mujer liberal, demasiado moderna para sus gustos, pero algo si tengo en claro, cuando tienes un hijo,la prioridad es él, y si por el momento no tienes tiempo para la maternidad, te cuidas y evitas traer al mundo un niño que va a sufrir con la ausencia de uno de sus padres. Y para comprender esto, no necesito ser una mujer culta, con varias especializaciones encima, ni hablar varios idiomas —afirmo molesta.

》Me marcho, creo que tu invitación  fue una perdida de tiempo para ambos, no te agrado y tú tampoco me agradas, y si bien es cierto que existe cierta atracción física ,  es irrelevante ante el hecho de que somos como el agua y el aceite.

—¿Está segura? —dice Santiesteban y las manos me pican por arrojarle algo a la cabeza, este hombre tiene la habilidad de sacarme de mis casillas, me pongo de pie decidida a marcharme, cuando soy tomada con fuerza de la muñeca 

—Déjame ir —trato de soltarme pero es inútil— si no me suelta, armo un escándalo, recuerde, soy una mujer que trabajó en una sex shop, me importa muy poco lo que los demás piensen de mí, en cambio usted es un hombre de negocios muy conocido en la ciudad, cualquier escándalo llegaría fácilmente a los oídos de la prensa.

—No te voy a soltar y si fuera tu no me provocarías.

—¿Cómo te atreves?, eres un majadero, un patán, pero ya verás de lo que soy capaz —le doy un puntapié sacándole el máximo partido a mis sandalias con tacones tipo puntilla, lo escucho soltar una maldición y trato de liberarme pero el agarre se hace aún más fuerte mientras nos convertimos en el centro de atención del resto de los comensales.

—Acaso estás loca, casi me lesionas el pie —dice enojado —no se te ocurra volver a hacer algo así.

—Sueltame —ordenó exigente.

—No lo haré, va a escucharme quiera o no —afirma severo.

》Es cierto que dije que eres muy distinta a las mujeres que normalmente me atraen, pero fue solo una observación, nada más, al igual podría afirmar que ninguna mujer me ha intrigado tanto como tu , dejando a un lado nuestras primera impresión, me encanta como mi hijo habla de ti, es notoria la admiración que siente tu hermana por ti, el conocerla a ella y a tus padres, me permitió saber un montón de cosas sobre ti y junto a la información que me proporcionó uno de mis empleados cuando te investigó  pude hacer  un cuadro completo de ti, uno que llamó aún más mi atención, el resultado es que deseo conocerte.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.