Capítulo 9 Ep. 5

Aion salió por la puerta principal de la casa al día siguiente. El suelo de gravilla crujía bajo sus pies mientras él se dirigía a su coche, cuando de pronto un niño se le acercó. Observó las facciones del niño, parecía nervioso.

Aion Samaras le sonrió mientras el pequeño se acercaba. Era el mismo niño que había tropezado antes con él, pero ahora lo miraba con una expresión cautelosa, como esperando algún tipo de señal para saber si podía seguir acercándose a él.

Le asintió levemente con la cabeza, dándole a entender que se le permitía avanzar hacia él para poder hablar. Luego se agachó para estar al mismo nivel que el niño, y le ofreció una sonrisa tranquilizadora.

⸺Hola… ⸺El pequeño lo saludó. Parecía ser bastante introvertido, pero su curiosidad era más grande que su timidez en ese instante.

⸺Hola, ¿cómo te llamas? ⸺preguntó Aion.

⸺Me llamo Demian.

⸺¿Demian?, ese es un nombre muy bonito. Es un gusto conocerte, Demian ⸺respondió Aion, aún con una sonrisa en su rostro. Aunque él era un hombre peligroso, no quería parecer intimidante para los niños pequeños, así que intentó ser lo más amable posible con Demian⸺. ¿Cuántos años tienes, eh?

⸺¡Tengo seis años! ⸺dijo Demian de pronto mientras perdía poco a poco su timidez para acercarse más a él.

Aion volvió a sonreírle, alegre de ver que se estaba ganando la confianza del niño.

⸺¿Y dónde están tus padres? ⸺preguntó, con un tono todavía amigable y curioso.

⸺Este… Mi mamá está ahí. ⸺Demian señaló a su madre, que estaba muerta de miedo mientras observaba a varios metros de distancia a su hijo hablando con este hombre mortal para el que trabajaba.

A Aion le sorprendió la reacción de la mujer al ver a su hijo interactuar tan casualmente con él, y soltó una risa en respuesta a su expresión facial horripilada, solo para mostrar que encontraba el asunto divertido.

⸺Tu mamá está preocupada por ti ⸺le dijo Aion al niño, su tono ligero y entretenido⸺. ¿Tienes hermanos, o eres hijo único? ⸺continuó, sus ojos aún brillaban con interés.

⸺Este… No. ⸺Demian miró hacia abajo y luego hacia él⸺. ¿Tienes hijos?

Aion se mordió el labio antes de responderle.

⸺Sí, tengo uno ⸺contestó, su voz baja y sensible. No tenía que fingir sus emociones ni su deseo de hablar más sobre su hijo con Demian. La naturaleza inocente del niño había logrado romper el frío exterior que Aion solía mantener⸺. Tengo un hijo llamado Nevan. Es más pequeño que tú. Tiene casi cuatro años ⸺continuó Aion.

Demian miró a su madre, que le estaba haciendo señas para que se fuera con ella rápidamente sin que Aion se diera cuenta.

⸺¡Hufff! Mi mamá me está llamando ⸺rezongó el niño con un exagerado jadeo⸺. Todo el mundo aquí te tiene miedo… Incluso mi mamá…, pero yo no te tengo miedo ⸺añadió solemnemente.

Aion se enderezó un poco.

⸺¿Todos? ⸺preguntó alzando una ceja. Le gustaba la honestidad del niño y su interés por él.

Demian asintió y luego añadió con entusiasmo:

⸺Cuando traigas a tu hijo, ¿puedo jugar con él y ser amigos? No hay muchos niños aquí…

Aion sintió un tirón en las fibras de su corazón al oírlo. Extrañaba a Nevan horriblemente, el sentimiento de culpa lo inundó sabiendo que todavía tenía que recuperar a su hijo.

⸺Claro, claro… Una vez que traiga a mi hijo aquí, ustedes dos podrán hacerse amigos ⸺le prometió Aion con una sonrisa angustiosa. Demian parecía muy emocionado de conocer a Nevan, pero su madre todavía estaba preocupada por él. Aion se puso de pie para evitar que Demian se acercara demasiado a él⸺. Bien, eso es suficiente hablar por ahora. Pronto podrás conocer a mi hijo. Ahora ve con tu mamá.

El niño asintió y corrió hacia su madre.

Aion lo observó regresar con ella y cómo la mujer extendió sus brazos para recibir a su hijo, la forma en que ella lo abrazaba con fuerza. No pudo evitar sentir un poco de envidia por eso.

Se quedó allí, la visión de madre e hijo reunidos así, de una manera tan cálida y cariñosa hizo que añorara aún más a Nevan. Echaba de menos abrazar a su propio hijo, sentir su calor, oír su risa, ver su rostro, sentir su olor... Y aquello inyectó otra gran dosis de determinación en su corazón.

Se dirigió a su auto y cerró la puerta con fuerza. Arrancó el vehículo y casi inmediatamente sintió una presencia a su lado.

Aion no se inmutó, sabía que era la presencia de Gris. Tampoco dijo nada al respecto.

⸺¿Pudiste encontrar algo que te ayudara allí? ⸺le preguntó ella con esa voz que él aún recordaba.

Aion suspiró y miró a Gris, pero no habló de inmediato. No tenía nada específico que informarle, pero aprovechó la oportunidad para hablar con ella ahora que finalmente se habían encontrado de nuevo.

Dudó por un momento antes de hablar.

–No, no pude encontrar nada ⸺dijo, su voz contrita y seria. Estaba frustrado.

Gris era lo suficientemente valiosa, sus habilidades como agente federal podrían haber sido de gran ayuda si todavía estuviera viva, pensó Aion, pero su presencia ahora le causaba gran dolor.