Estaba emocionado, pero, a la vez nervioso e inseguro no sabía exactamente que reacción iba a tomar ella, así que contaba las horas para que llegara el día en el que me confesaría, después de todo no sabía si ella seguía sintiendo algo por Matt. Así que comencé a prepararlo todo, decidí usar mi automóvil para poder movilizarnos con más facilidad, también tuve que pedir ayuda para que no hubieran personas en la playa en la noche, aunque era muy poco probable que eso sucediera, pero era mejor estar prevenidos, coloque una manta en la arena con velas alrededor de ella, para poder observas las estrellas recostados, sé que soy muy cursi pero algo tuve que aprender de los libros que he leído, además siempre me han gustado ese tipo de escenas así que creo que a Lili también le gustaran, o eso espero. Quería poner pétalos de flores, pero en lugar de hacerla feliz solo haría que se enfadara conmigo, bueno, ya aprendí la lección cuando le di tulipanes en agradecimiento a que me dejo presentar la pintura en la exposición. Lo cual solo hizo que se enfadara diciendo que había matado a esos tulipanes por su culpa.
Me encontraba tan ansioso que no podía quedarme en un solo lugar, después de todo ya solo faltaba un día para nuestra cita, así que de los nervios comencé a caminar sin rumbo alguno, está bien, al parecer mis pies me dirigían a la cafetería donde Lili trabaja, al hacer tal recorrido me quede observando el lugar donde vi a Lili por primera vez, hice una sonrisa de idiota recordando ese momento, pero esa sonrisa se me borro en un instante, a la distancia pude observar a dos personas en ese lugar, y para mi sorpresa y desgracia eran Lili y Matt, sentí que mi corazón se encogió en ese instante, mi cerebro comenzó a pensar en cosas negativas diciéndome a mismo que ya no tenía ninguna oportunidad, que ya no valía la pena nada de lo que había hecho y que toda esperanza había terminado para mí, no sabía exactamente qué hacer, y solo me quede paralizado en ese lugar, mi cerebro me decía que tenía que alejarme de ahí pero mi cuerpo no me respondía, apreté los puños y con valor levante mi rostro, ¿he? La expresión que tenía Lili no era de felicidad, su rostro reflejaba incomodidad y enojo, gracias a eso mi corazón comenzó a tranquilizarse un poco, gracias a eso pude comenzar a moverme y me aleje de ese lugar, gracias a eso mi corazón albergo una pequeña esperanza.
Al fin llegó el día, no niego que aún me siento inseguro después de lo que vi ayer pero si no me arriesgo ahora siento que nunca voy a poder avanzar, y que más adelante me arrepentiré de no haberme confesado, así que comencé a ponerme positivo, miento, era más negativo en ese momento, pero tenía que encontrar el valor para poder hacerlo, así que pase por Lili a su casa, Woow se veía hermosa, era la primera vez que la veía usar un vestido y tacones, me puse un poco nervioso al verla así, así que tuve que disimularlo y comencé a hablarle normalmente, la dirigí a la puerta del automóvil, a lo cual ella hizo una cara de sorpresa, enfatizando en que no sabía que tenía automóvil
-claro que tengo, es solo que disfruto más el caminar, ya que de esa manera es más fácil observar todo a mi alrededor-. Le dije
En fin, ambos hablamos en todo el camino, no niego que tenía ganas de preguntarle acerca de lo que paso ayer, pero siento que eso en si no es asunto mío.
Llegamos al lugar de la exposición, se estaban presentando pinturas de otros pintores, así que decidimos ir a verlas primero y después nos dirigiríamos a donde estaban las mías, claro, todas eran muy buenas después de todo por algo estaban ahí, pero Lili era la persona que más las disfrutaba, a veces hasta se quedaba con la boca abierta, lo cual me parecía un poco gracioso, aunque espero que también haga esa reacción con mis pinturas, y sí, así reacciono a ellas, estaba tan animada y feliz cuando las vio (claro no es por presumir) que me preguntaba a cada rato si de verdad yo las había pintado, ¡waaaa! ¿tan malo creía que era?, pero bueno, continuamos viendo todo a nuestro alrededor y asimismo comimos algunos bocadillos que se estaban sirviendo en el lugar, ya llegando las seis de la tarde la exposición comenzaba a finalizar siendo esta todo un éxito.
Así que nos subimos al automóvil, Lili me preguntaba a cada segundo ¿a dónde íbamos? y ¿cuánto faltaba para que llegar?, a lo cual le respondía que era sorpresa, ella solo hacia pucheros, jajaja nunca la había visto haciendo eso, ¡por Dios! me va a dar un ataque al corazón si sigue así. Al percatarse del paisaje de la playa vi su rostro lleno de emoción, lo cual hacia que ganara confianza, ya que me hacía sentir que elegí el lugar indicado, cuando bajamos del automóvil ella se quitó rápidamente los tacones, comenzó a caminar en la arena y poco después comenzó a correr como una niña de cinco años, parecía que era su primera vez en la playa, aunque no niego que termine haciendo lo mismo que ella, después de todo no había estado en este lugar de noche y no niego que se veía hermoso.
Decidí tomarla de la mano aunque no sabía cómo reaccionaría, bueno esperaba una bofetada de su parte ya que me había percatado que no le gustaba el contacto físico, pero no fue así, ella también tomo la mía, así que la lleve a donde se encontraba la manta, para ser sincero me sentía nervioso porque no sabía cómo reaccionaría, pero a pesar que al principio parecía sorprendida, hizo una sonrisa y se dejó caer en la manta, al principio me sorprendí, pero después también sonreí y me deje caer quedando al lado de ella. Al observar el cielo, ambos nos sorprendimos, el cielo estaba siendo iluminado por las estrellas, todo se veía hermoso, el sonido de las olas hacia que el ambiente fuera aún mejor, todo alrededor estaba hermoso, todo era perfecto, nos quedamos ahí acostados sin decir nada, solo admirando ese vasto cielo. Después de tanto tiempo de silencio decidí armarme de valor y hacer lo que tenía que hacer, me levante de allí a lo cual Lili hizo lo mismo, tome los dos collares que había mandado a hacer, acorte la distancia entre ella y yo y sin tantos rodeos se lo dije: