Los Salvatores, La Originals

continuación capitulo 6

-¿PORQUE MENTISTE ARANZA?- dijo padre –MIRAME A LA CARA- mi hermana tenía la cabeza abajo y no podía levantar su mirada, estaba llorando y lo único que hacía era limpiarse las lagrimas de sus mejillas

Me partía verla así, si ella me hubiera buscado la hubiera cubierto, pero nuestro padre nos enseño que para ser un buen alpha en la manada no se puede cubrir una mentira que traerá consecuencias.

-Papa, no seas tan duro con ella- dijo alexter –esta arrepentida- finalizo y se acerco a ella apretándola a su pecho.

-si papa calma, nuestra hermana no lo volverá hacer- seguí a mi hermano, Aranza no hablaba y estaba más abrazada alexter, me preguntaba si ambos sentían la corriente eléctrica recorrer su cuerpo. No me importo, me acerque a ella y la tome de la mano donde tenía su brazalete.

Nuestro padre se acerco y por su mirada sabía que había sido un poco duro con ella al regañarla como alpha, Aranza aun seguía llorando y con la cabeza abajo por respeto a nuestro padre.

-ven aquí pequeña- esta vez hablo con voz dulce y amor. Ella se agarraba fuerte a alexter y apretaba fuerte mi mano, no quería acercarse. Padre lo noto, sentía su miedo y le dolía que su pequeña no se acercara.

-mi princesita ari, perdóname no quise gritarte- tenia la mirada triste –sabes que no me gusta que me mientas, ¿y si algo te pasaba? Y no estabas con tu hermano para defenderte- empezó a decir. La verdad no entendía porque esa pregunta ¿y si algo te pasaba? Acaso hay algo más que no sepa. Todos en el valle somos conocidos ¿Qué le podrían hacer a la hija del rey akim?

Ella se acerco y sin verlo lo abrazo

-perdóname papa, no quería mentirles, perdóname- empezó a llorar más fuerte y su respiración era agitada

-calma mi pequeña, trata de respirar con calma- pues sus latidos iban rápido, pero ya iban a ritmo normal, mi papa logro calmarla con sus caricias y besos.

Alexter y yo nos quedamos observando la escena, ella era nuestra pequeña, los tres la amábamos incluyendo nuestra nana, éramos muy unidos. ¡Somos una familia real muy unidos! Un lazo irrompible.

Aranza quedo una hora en los brazos de nuestro padre, y de tantos sollozos quedo dormida.




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