continuación capitulo 7

-tu pastel es un desastre- reí cuando vi su decorado, la verdad es que ni lo había intentado 

-¡Ay! Cállate- ambas reímos –Comamos pastel- miro mi pastel.

La profesora me felicito y me coloco 20pts en la clase de decorado con mangas, salí satisfecha, Mayra y yo nos dirigíamos a la plaza del colegio, todo iba bien hasta que ¡pum!

-discúlpame, discúlpame Aranza- había chocado conmigo y destrozo todo mi pastel dejando a una Aranza muy empañada de dulce.

-¡affs! Idiotaaa, arruinaste mi pastel- exprese molesta, más bien estaba furiosa y si tuviera que transformarme en una loba lo haría para pisotearlo. Pero aun faltaba mucho para mí transformación. Se acerco y trataba de limpiarme todo el dulce en mi cuello, y en mi uniforme.

-si soy un completo idiota- dijo Scott –voy llegando tarde al entrenamiento y pues no te vi cuando saliste del salón- Mayra fue en busca de un paño o algo para limpiarme, y buscar al personal de limpieza para que limpiaran el pasillo.

-no me toques, yo misma me limpio lobo apestoso- se reía y se fue acercando poco a poco a mí, quedando a unos pocos centímetros y cuando me fije ya estaba pegada de la pared. El pasillo estaba vacío, pues los demás alumnos estaban en sus respectivas actividades.

-es que tienes un poquito de dulce aquí- toco mi cuello, me estremecí un poco, sus manos eran cálidas y ya sabía el juego ¿Quieres jugar? Pues juguemos. Había apoyado sus dos manos a la pared de manera que quede acorralada entre la pared y el.

-¿y por donde más tengo dulce?- toco mis labios, reí dentro de mi misma porque estaba coqueteando con un idiota.

Scott era un chico blanco, cabello negro y ojos azules, en pocas palabras era atractivo, su cuerpo era musculoso pero no tan exagerado, su abdomen era muy bien definido, se notaba que le gustaba hacer ejercicios, cualquier chica del colegio moriría por tener un novio o un mate así.

-¿Quieres que te lo quite? Te pueden llevar las hormigas- decía divertido, y reí por eso.